Hoy es el gran día, después de diez años regreso a mi ciudad, podría decir que a mi antigua vida, pero eso sería una falsedad, mis padres se divorciaron luego de que mi papá encontrara a mi madre con su mejor amigo, desafortunadamente mi hermana y yo tuvimos que irnos con ella, pues las leyes la protegían, no sé cómo le hizo para que el juez le diera custodia total sin permitirnos ver a mi padre, sólo podíamos hablar con él por teléfono y sólo una vez a la semana. Finalmente he cumplido la mayoría de edad así que puedo decidir con quién vivir, sin embargo mi hermana debe quedarse con mi madre, aunque creo que eso será por poco tiempo ya que se ha iniciado un nuevo juicio en el que le permitirán decidir con quién quiere vivir.
La mudanza no es un problema pues realmente sólo traje mi ropa y los artículos u objetos que necesito. Mañana será mi primer día en el Instituto Wella Elite, no sé porque estoy nervioso quizá es la emoción de saber que volveré a ver a mis amigos, he estado en contacto con ellos, no tanto como me gustaría, pero las redes sociales nos mantienen al día.
Bajo del avión y voy a recoger mi equipaje para poder ir con mi padre quién me espera, pero al llegar veo como alguien se lleva mis maletas, apresuro el paso para alcanzar a esa persona pero esta sale antes de que la pueda alcanzar y se lleva mis maletas. No entiendo que sucedió aquí, aquel chico se llevó mi equipaje. Regreso a la zona donde se encuentra el equipaje que aún no ha sido recogido y me doy cuenta que hay dos maletas parecidas a las mías, y digo parecidas ya que las mías eran de color azul marino y estas son negras, ¿cómo alguien puede confundir el azul marino con el negro? Tomo las maletas con la esperanza de que aquel chico se dé cuenta de su error y podamos intercambiar equipajes, mis datos se encuentran en mi equipaje, pero en este no encuentro ninguna información que me pueda servir para localizar a esa persona. Salgo a la sala en la que mi papá me espera, quien al verme sus ojos se llenan de lágrimas y corre a abrazarme, esto es algo nuevo, ya que durante los ocho años que viví con él jamás lo vi derramar una sólo lágrima, mi papá era mi ídolo, siempre fuerte, serio, cariñoso y comprensivo, no lo pude evitar y un par de lágrimas salieron de mis ojos, diez años viví alejado de él y por fin podía verlo de nuevo.
Durante el camino a su casa nos la pasamos hablando de todo lo que pasaba por nuestras cabezas, el viaje duró casi una hora, estar con mi papá era increíble. Después de ese largo y entretenido viaje llegamos a casa, la casa no era una mansión pero tampoco era muy pequeña, era de dos pisos con jardín trasero y una piscina, también tenía un área en donde se encontraba el asador contaba con cinco habitaciones de las cuáles dos eran destinadas para los invitados, el piso de la casa era de madera justo frente a la puerta de entrada se encontraban las escaleras que se dividían en dos para llegar a la planta alta, donde se encontraban las habitaciones con baño cada una. En la planta baja estaba la cocina, la sala, un baño para visitas, el comedor y el despacho-biblioteca de mi papá.
Toda la tarde del domingo me la pase arreglando mi habitación con ayuda de mi papá, comimos pizza y vimos películas, creo que nunca había disfrutado tanto como el día de hoy. Tuvimos una video llamada con mi hermana, quien se puso a llorar alegando que me extrañaba y que ya quería venir a vivir con nosotros. Al finalizar el día me fui a dar un baño para que pudiese descansar mejor, pero claro no tenía ni mi ropa, ni mi cepillo de dientes, ni nada de lo que había empacado, mi papá me prestó un pijama, y en cuanto a los artículos de higiene tenía nuevos en el baño, claro no era de lo que yo usaba pero al menos servirían. Al terminar mi ducha me acosté en mi cama pues el viaje si me había dejado exhausto, por ello no tarde ni cinco minutos en quedar profundamente dormido.
Me despierto por unos golpes en mi puerta, es mi papá que me está despertando para que no llegue tarde a mi primer día de clases. Me levanto y tiendo mi cama, me dirijo al armario y saco el uniforme que mi papá me compró antes de que yo llegara, tomo mi toalla y entro al baño para ducharme. Quince minutos después salgo totalmente aseado, me visto y me paso los dedos por el cabello para "acomodarlo".
Bajo a la cocina donde mi papá está terminando de preparar el desayuno.
—Buenos días — saludo a mi papá que está colocando waffles en un plato que me acerca para que coma.
—Buenos días hijo, ¿estás listo para tu primer día? —dice mientras se sienta frente a mí en la barra de la cocina. Mi papá es un excelente cocinero y un gran amigo.
—Pues listo no sé, quizá preparado, dime ¿nadie ha llamado para lo de mis maletas?
—No, lo siento hijo pero yo creo que deberías de darlas por perdidas, no te preocupes esta tarde te llevaré de compras
— ¿Llevarme de compras? ¿Es enserio papá?, no es que tenga algo en contra de las mujeres... pero eso sonó muy... de chicas— le digo mientras me rasco la nuca nervioso—Creo que esta vez paso de salir contigo, mejor podrías darme el dinero y así yo voy a surtirme de los artículos que necesito?
—Vaya para el caso es lo mismo, está bien te entrego esta extensión de la tarjeta, sólo recuerda que no somos ricos así que más te vale no sobrepasarte en tus artículos.
—Tranquilo, soy consciente de mis gastos— veo la hora en mi reloj y me sorprendo al ver que ya ha pasado mucho tiempo, si quiero llegar a tiempo debo salir ya —Bueno papá se me está haciendo tarde te importaría llevarme al instituto?, sólo para saber cómo llegar
—Claro, ve a lavarte la boca mientras yo voy por mis cosas
Diez minutos después salgo de mi casa rumbo a mi nuevo instituto, según mi papá está a quince minutos caminando y a cinco en auto, así que llegaré cinco minutos antes de que la campana suene.
Al llegar me despido de mi papá y salgo del auto, en cuanto a terreno es un poco grande, pero no tiene muchos edificios tiene muchas áreas verdes y deportivas. Me dirijo a la oficina del director donde se encuentra la señorita que me dará mi mapa, mi horario y las reglas del instituto.
El Instituto cuenta con nueve edificios, tres son de clases, uno es la dirección y cubículos de profesores, otro es la biblioteca que al menos por fuera se ve que es muy grande, en otro se encuentra el gimnasio, en otro están los laboratorios, tanto de lenguas como de cómputo, uno más es el dojo y finalmente la cafetería. Cuenta con un campo de futbol soccer, otro de futbol americano, pista de atletismo, canchas para basketball y volleyball. El instituto está muy bien equipado. Saco mi horario y veo el salón en el que será mi primera clase.
Después de dar un par de vueltas llego al salón, afortunadamente el profesor aún no llega, al entrar todos me miran fijamente como si fuera un extraterrestre, ¿acaso nunca habían visto a un alumno nuevo? Al final del salón se encuentra un lugar vacío, me dirijo a él ignorando las miradas de los demás.
En ese momento entra el profesor y todos se van a sus lugares, el profesor se presenta y comienza con el programa de la materia. Durante toda la clase sentí como si alguien me estuviese observando, pero decidí ignorarlo, al terminar la clase tomo mis cosas y me dirijo a mi siguiente clase, al salir del salón alguien me toma del brazo deteniéndome
— ¿Kyle? Eres tú ¿cierto? —al girarme me doy cuenta de que es uno de mis mejores amigos Scott
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SIEMPRE TÚ...
Teen Fiction"Todo sobre nosotros comenzó por casualidad al principio no sabía que iba a ser amor, supongo que el amor siempre llega como destino, como si pasara una repentina lluvia empapándote" Yonghwa
