Tu Me Cambiaste[FNAFHS][FREDXBONBON]

4

~Fred-Senpai~

Me duele el estómago~ 7-7 creo que debí desayunar más. Un momento ¿que hora es? Espera otro momento ¿donde estoy? No recuerdo nada...

-Hey... hermanito... -¿esa es la voz de Freddy? Al parecer si. Espera otro momento aparte de los otros momentos, el nunca viene a saludarme en los recesos porque esta ensayando con su banda. ¿Entonces...?

~Narradora~

-¡Abre los ojos pedazo de retrasado!

Fred se encontraba durmiendo debajo de un arbol en el patio de su escuela. ¿La hora? Las 4:00 y el no despertaba, tiene el sueño pesado. Su hermana y hermano se encontraban intentando despertarlo, más no lo conseguían.

-¿Lo damos por muerto? -pregunto el mayor.

-Yo me quedo con sus ahorros.

-Y yo con su cuarto.

-¿Q-que? -preguntó, el medio dormido peli-negro, tallando su ojo izquierdo y bostesando levemente.

-Pueeeees, ya despertó ;-; yo quería su cuarto.

-También te quiero ;-; -dijo el peli-negro levantándose mientras buscaba con la mirada su cuaderno de dibujo.

-¡Mamá está preocupada por ti! ¡Baka! -gritó dando unas cuántas patadas al suelo la peli-roja. -¡Vamonos ya o te jaló la oreja! >:v

-Y-ya voy tranquila...

~Fred~

Mi hermana da miedo, bueno, estoy acostumbrado. Nos fuimos del patio de la escuela caminando hacía casa. Mis hermanos iban de brazos cruzados y con el ceño fruncido, ¿Qué hora es?

-Fran, ¿what hora is it? -pregunté sacandome los lentes y limpiandolos con una pequeña toalla que saque de mi bolsillo.

Mi hermana miro su muñeca derecha, viendo la hora.

-Las 4:03 -respondió mirándome.

-Gracias.

¿Tanto tiempo pase dormido? Se supone que salgo de la escuela a las 2:00 pm. Mierda, mamá hoy me castra. Íbamos caminando normalmente hasta que cuatro chicos se interpusieron en nuestro camino.

-¿Qué es lo que quieren?

-Bueno... -estábamos apuntó de irnos cuando un chico de cabello azul me tomó por la espalda al igual que ah Freddy. Fran fue golpeada en la cara por otra chica peli-rosa, cayó inconsciente al suelo. Ambos forzajeabamos para salir de su agarre, era prácticamente imposible. Me golpearon la cabeza y caí al suelo escupiendo un poco de sangre. Sólo observaba como mi hermano mayor hacía lo posible para escapar, aquellas personas tomaron su dinero y se fueron, no sin antes patearlo tantas veces que perdí la cuenta. Enserio me dolía verle así, gruesas lágrimas comenzaron a salir de mis ojos y a resbalar por mis mejillas. Aun no podía hacer nada, sólo escuchaba los sozollos de mi hermano, y la escasa respiración de mi hermana. Trataba de moverme pero no podía. Había perdido toda mi fuerza, y simplemente observaba mi sangre en la calle.

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