Only Human's ; Editando.

Cap.13:"Patético".

Chris

Otra vez se fue. No se cuantas veces más lo hará. Ella no era así, ha cambiado tanto, no es la misma chica tierna de antes, ahora, con dolor al pensarlo, resulta ser más dura e seria.

Y resulta ser que ahora, y-yo...

Y-yo...

La amo aún más.

A pesar de esos cambios, en el fondo de ella, se que habita la hermosa persona que me cautivó, que despertó mi tan extraño y loco lado cursi, por que si soy de esta manera, es por ella, por su tan linda cabellera roja y esos hermosos ojos esmeralda. Resumiendo, la chica de mis sueños.

Esa hermosa chica, de alma pura, sentimientos hermosos, tan amable, considerada, amorosa...

Es que sobran palabras para describirla...

¿Sonó patético?, ¿Si?, lo sé...

Pero no me culpo, o tal vez si, o tal vez no se ni siquiera lo que estoy pensando ahora. Es normal, siempre supe que el amor envuelve a las personas convirtiéndolas en seres que no saben controlar sus propios y tan hermosos sentimientos...

Josh tiene razón, estoy loco. Soy patético. Patético.

Desordené mi cabello con la yema de mis dedos mientras miraba a mí alrededor con fines de encontrar a la dulce chica de mis sueños. ¿Conseguí algo?, no.

Las únicas cosas que lograba conseguir eran lamentos, fuertes lamentos. Lograba dañarme a mí mismo, me hacía sentir como un desastre, un monstruo. ¿Por qué había sido tan malo con ella?, si ella era prácticamente mi todo. Que patético, Chris.

Algo quemaba, una llama se encendía tan fuertemente en el sector de mi pecho, causaba un fuerte dolor, me volvía frágil. Algo tan patético...Tan desgarrador.

-Eh, campeón, ¿Por qué la cara?-

¿Este siempre había sido así de imbécil?

-...¿Ah?
-No se entendía ni a sí mismo.

-Eh, vamos, despierta, baja de tu nube por un rato.

-Decirlo para ti es fácil pues no tienes a Jess dando vueltas sola por toda la ciudad, sin recordarte, sin recordar todo lo que hiciste para conquistar su corazón, todas las estupideces que hiciste, todas las lágrimas que derramaste sólo en tu habitación pensando en su tan bello rostro...

-Chris

-No, por su puesto que no, no lo entiendes

-Desearía poder entenderte

-No, Mike

Aumenté la rapidez de mis pasos, Mike permaneció en su lugar y me quedó observando desde atrás, yo no pensaba detenerme, pero tampoco pensaba buscar por toda la ciudad a una persona que no quiere verme.

En algún punto ella se acercará, vendrá a charlar conmigo, entonces deberé expresar todo lo contenido detro de mi corazón. Pero basta de perseguirla, no quiero obligarla a nada...

Supongo que por ahora debo callar, cosa tan difícil para personas impacientes como yo. Era cierto que necesitaba verla, era cierto que necesitaba su hermoso aroma, su hermosa sonrisa, su hermoso rostro sonrojado al bromearle, la necesitaba. Quería gritar su nombre, me negaba estar así.

Mike se encontró con tres chicas en el camino, y siendo honesto, eran bastante guapas...

Pero ningúna como ella. Ella era única, ella era especial, ella, la dueña de mi frágil corazón, Ashley, Ashley Stineman.

Sonreí de una manera tan tonta al recordar su hermoso rostro sonriendo por mí.

-Hola nenas, ¿No habrán visto pasar por aquí a una chica de cabello rojo?

Solo desvíe mi mirada, tenía más que claro que no la ibamos a encontrar, ella era buena en estas cosas de desaparecer por completo.

Otra vez me apenaba...

—Aaam...¿Hola?.
—Dijo una de las chicas mirando con ceño fruncido a mi amigo el cual trataba de sacar información...¿Ligando?.

–No, no la han visto, vámonos Chris, no está, debe estar más adelante.

...¿Sabés?, con ese sonrojo nunca pasas desapercibida.

Entra las dos chicas había otra pequeña y dulce de cabello de un tono tan bonito, unos ojos hermosos, eran como lindas esmeraldas, aún con esas gafas los podía reconocer...

Se veía tan linda, tan inocente, ingenua, tan ella...

Era ella me repetía constantemente. ¿Sabés las ganas que tenía de tomar tus adorables mejillas y de acercarme y juntar tus dulces labios con los míos?.

A pesar de las ganas, no podía, ¿Sabés por qué?, porque tú no me ves de la manera en que te veo yo a ti, porque ya no lo haces. Porque ya no sientes lo mismo que sentías antes por mí...

Pero...Si estás bien así, solá, pensando bien las cosas, debo dejarte así, no puedo obligarte a estar conmigo, yo no mando tu vida, menos tus sentimientos. Pero si quiero que recuerdes, Ashley, que aquí siempre se va a encontrar el chico rubio de gafas.

Esperándote.

Recuérdalo, ¿si?

—S-Si...Gracias chicas—
—Fue lo último que dije antes de ver tu rostro tal vez por última vez.