capitulo 2

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SARA

¡MIRA POR DONDE PASAS IDIOTA! Dije mientras levantaba la cabeza para ver quién era.

Oh por Dios.

Es guapísimo tenia cabello castaño oscuro ojos marrones y cuerpo buen escultural, tenía los hombros anchos que lo hacía ver encantador, era más alto que yo ¡mucho más alto!

Enseguida note que me estaba observando fijamente y no me había dado cuenta por pensar en lo hermoso que era.

No puede ser.....que me trague la tierra.

Trate de que no se note que estaba nerviosa, al darme cuenta que me estaba mirando. Mis ganas de ir al baño aumentaban más y no quería comenzar a bailar, quedaría en ridículo.

Mira tú por donde vas, en vez de estar despidiéndote de tu "bebe". –me dijo con un tono calmado y relajado, que me hacían sentir mal por haberle gritado.

Su mirada estaba fija en mí, no podía dejar de pensar en lo guapo que era, era tan joven que no creía que era profesor.

Vamos Sari pregúntale.

Estúpida conciencia........

Oye tú eres muy joven para ser profesor......-le dije mientras miraba mis brazos acomodando bien mi chaqueta, era imposible mirarlo a los ojos, porque me derretía con la mirada tan perfecta que tenia.

Sí, porque...necesitas algo??.....

Oh por Dios, es tan joven que no parecía.

No pareces.... -Le dije con los ojos bien abiertos y moviendo mi cabeza hacia los lados en señal de un "no".......eres tan joven...

Termine mi carrera a los 22 años y he dado clases desde entonces y ahora tengo 25 años... -me dijo seguro de lo que decía, que era muy creíble su respuesta.

De repente ya no me podía aguantar más, mis manos sudaban y sentía claramente que se me salía la pis...... lo deje sin despedirme y Salí corriendo chocando nuestros hombros de un golpe....

No puede ser si no encuentro un baño, voy a ser la primera chica en crear un océano.

Pase por muchas aulas, veía alumnos pasar...y todavía no encontraba un baño, iba a explotar si no encontraba uno ya.

¡AL FIN!.. –dije mientras entraba al baño y disimuladamente vi como dos profesores me quedaban viendo de la forma mas vergonzosa por reaccionar así ante un baño, pero no me importo.

Entre y me sentía como un perrito con su cabeza en la ventana recibiendo el aire más rico del mundo ¡qué alivio!

Al salir él chico de hace un rato estaba allí.

¡No puede ser!, dile a Camila que la amo.

¡QUE HACES AQUÍ! ! ACOSADOR! ¡VETE!... –le dije mientras lo empujaba tan fuerte que mis manos comenzaba a doler.

¡TRANQUILA!... –me grito tan fuerte como yo había hecho con el...! ESTE ES EL BAÑO DE HOMBRES!... –me dijo señalando el cartel donde claramente decía "baño de hombres"

¡Qué vergüenza!

Lo siento mucho... -no podía creer que despistada que soy, el solo me miraba con el ceño fruncido y con los brazos entre cruzados...... pero aun así se veía hermoso.

Está bien, ahora si te importa yo también quiero ir al baño... -creo que las dos veces que me lo he topado le he gritado y estaba enojado por eso, el solo me hizo a un lado y entro al baño sin dirigirme la mirada.

decidí darme una vuelta por todo el colegio, y la verdad que era bien bonito, tenia las paredes bien limpias como recién pintadas, no era como mi colegio cuando estudiaba porque ese tenia las paredes dañadas, pero de igual manera lo amaba porque eran 8 horas que no veía a mi papa y no sufría los malos tratos.

¡SARI, SARI! ¡ESPERA! –escucho la voz de Camila corriendo hacia a mí con la respiración agotada que parecía que hubiera hecho 100 flexiones de pecho sin parar, pero no era sorpresa, yo siempre hacia ejercicio y ella no movía ni un dedo.

-¿Qué paso? porque no estas en clase.

-pedí  permiso para ir al baño y te vi de lejos

-ah acuérdate que no te tienes que meter en problemas.

-si si si, oye Te vi con un chico hace rato, viiiiii ¿quién era?

-un profesor tuyo, se supone que lo conoces.

-mm la verdad que no todavía no he visto clase con él.

-bueno ya me voy Camila, después te veo.

Ven acompáñame –me dice Camila corriendo hacia el aula.

Yo solo la seguí caminando, no veía el apuro de ir.

¿Tiene algo que compartir con la clase señorita? –no puede ser... era el chico, claramente se notaba que era profesor de matemática por los números marcados en la pizarra que estaba a un costado de él.

Vi como Camila se reía en silencio en el fondo de la clase, era obvio que me dijo que la acompañe por él, porque ella lo había visto mientras chocábamos y hablamos en el baño.

Disculpe profesor soy nueva y quisiera saber su nombre? –Camila le dice al profesor levantando su mano ¡BIEN! Era la oportunidad de saber su nombre ya que no sabía cómo se llama.

Jake señorita, bienvenida.

Jake, pero que bello nombre.

Y usted como se llama señorita? –no puede ser, me lo decía a mí, me estaba mirando fijamente mientras yo estaba hipnotizada con el bello nombre que tenia.

-mmm Sara, no, Sari, no Sara. Mmm me llamo Sara pero me dicen Sari

-mucho gusto, ahora por favor se puede retirar que quiero dar mi clase.

Que boba soy, parecía foca tratando de decir mi nombre.

Está bien, con permiso. –dije mientras me alejaba lentamente del aula para irme a casa.

En el camino me quede pensando en la escena del baño que me había dado tanto miedo, muchos hombres abusaron de mí que hasta creo que les tenía miedo. Bueno aunque yo le tengo miedo a muchas cosas como que Camila se meta en problemas, ya que si ella se metía en problemas no habría un representante, hasta tuve que rogarle a mi jefe del bar que por favor me ayude a matricularla ya que su hija también está en el mismo colegio, y tiene contactos, pero de igual manera tenía que prevenir los problemas.

Tengo miedo a que nos descubran, a que descubran que mate a mi papa, que descubran que prácticamente le robe todo el dinero para poder vivir con comida, techo, educación, salud, nuestra casa era de dos pisos y grande, agradecía por eso demasiado, prácticamente yo solo quería un departamento grande y bonito para vivir con algo de lujo ya que nos sobraba el dinero robado de papa, pero ella escogió esa casa, me rogó mil veces, me decía que ahí quería vivir el resto de su vida, no tuve más opción de cumplirle el capricho ya que ella nunca tuvo ni un juguete, pero aun así yo tenia que trabajar porque el dinero no dura para siempre y quería buenos estudios para Camila

Mi papa tenía mucho dinero gracias a los malos negocios que tenía con personas malas, con narcotraficantes, y todo esto sabe Camila, nunca le oculte nada, para que sea más fuerte y nunca se deje de nadie, ella ahora tiene 15 años y es una chica encantadora, tiene el cabello oscuro como el mío ondulado y le llegaba a la cintura, aunque la mayoría de veces lo solía tener recogido , tiene ojos claritos como la miel, y muy hermosa, tiene una cinturita, ya a mí me da coraje ver su cintura porque ella no hace ejercicio, en cambio yo me mato para tener un cuerpo perfecto.

El punto es que nuestra familia es solo ella y yo, mi mama se murió cuando yo tenía 12 años y Camila 7, nos mudamos a un pueblo remoto de los Ángeles donde creemos que no nos encontraran, pero no hay que confiarse mucho.

Al fin llegue a mi casa y lo primero que hice fue recostarme en mi cama y dormir lo que no pude, porque Camila me levanto.

Aprendiendo a vivir con ellaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora