El comienzo del huracan

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4 meses antes...

Aimee, Viridian y Conrad comenzaban a subir los instrumentos a la vieja Van de Conrad, el cuidaba esa Van como si fuera su propio hijo, a pesar de estar en muy mal estado, según el "Era una representación de la madurez que su padre le había otorgado después de haberlo decepcionado dejando la preparatoria para cocinar metanfetamina".

Él era mayor que Aimee por cuatro años, ambos se conocieron en el primer año de preparatoria, cuando Conrad retomo el año que perdió, se hicieron amigos y exactamente un mes después Viridian llego como alumna de intercambio, desde entonces los tres se hicieron inseparables. Formaron una banda de rock, que tocaba todos los viernes por las noches en el club Sieven&Cheig, la mayor parte de las veces tenían buen publico y recibían buena paga pero cuando llego el tiempo para decidir qué sería de sus vidas los tres hicieron solicitud para la misma universidad, aunque Aimee quería principalmente esta por su programa de estudios del arte. Conrad decidió estudiar ingeniería química, ya que por obvias razones se le daba bien y Viridian solo quería estar con sus amigos, así que escogió algo "fácil", comunicaciones.

Como los tres hicieron solicitud para quedarse en los apartamentos del campus, decidieron rentar una pequeña bodega cerca de la universidad para guardar sus instrumentos y todo su equipo. Después de acomodar todo en la bodega se dirigieron al que sería como su hogar durante tres años.

─Bien, esta es la despedida amigos─. Dijo Aimee con tristeza fingida.

─Solamente estaremos en habitaciones diferentes, no seas melodramática─. Respondió Viridian riendo

─Ustedes tienen suerte, tal vez no estén en la misma habitación pero estarán en el mismo edificio, yo tendré que estar tres edificios lejos de su preciosa compañía, además tendré que compartir la habitación con alguien llamado Bryan, ¡Nada bueno puede pasar con alguien llamado así! tú misma lo dijiste ─. Dijo Conrad con preocupación mordiendo sus uñas

─No, solo dije que era una "superstición" Mexicana, no tienes nada de qué preocuparte ─. Aimee hizo comillas con los dedos cuando dijo superstición.

Claro que Aimee había dicho esto, como parte de una broma, sus amigos siempre estaban preguntando este tipo de cosas, ella lo sentía un poco ofensivo así que se desquitaba jugándoles bromas sobre ciertos significados. Ella nació y vivió en México durante 7 años de su vida hasta que sus padres se divorciaron, según su madre, su padre tenía otra mujer y según su padre, su madre era demasiado sugestiva y celosa.

Ella, su hermana mayor Jessica y Sonia, su hermana menor adoraban pasar el rato con su padre, Luis, él era un tipo adorable y carismático, las consentía demasiado, Aimee sentía que su madre, Nichole, estaba celosa de este comportamiento puesto que solo salía pocas veces con ella pero su padre se excusaba diciendo que para él era más fácil pasar el rato con las niñas a que Nichole siempre le estuviera haciendo una "auditoria" sobre lo que hacía cada segundo del día.

Nichole era una poderosa abogada con fuertes influencias así que cuando se divorciaron Nichole logro demostrar que Luis tenía otra mujer y gano la custodia de sus hijas, decidió regresar a su país de origen, en parte como venganza ya que sabía que su ex esposo no podría costearse un viaje Nueva York cada semana para ver a las niñas.

Al principio las llamadas eran constantes, todos los días hablaba cerca de una hora o más con cada una de sus hijas, pero al pasar el tiempo las llamadas fueron escaseando, luego se casó con otra mujer y tuvo dos hijos varones y las llamadas cesaron.

Jessica siempre fue la más cercana y por lo tanto fue la que más cambio de actitud cuando esto paso, Aimee recuerda que Jessica era tierna, brusca pero con un gran corazón y siempre queriendo ayudar a los demás, después de esto, empezó a tener comportamientos erráticos y Sonia al ser la menor seguía el ejemplo de su hermana mayor.

When It RainsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora