Adán y Esteban [Editando]

Capítulo 4

ESTEBAN

Odio mi vida, lo único que quisiera es tomar un arma y acabar con este sufrimiento. Iba en el auto a casa con mi pesado y odiado hermano centro Estarlin. Tanto el como mi padre Roberto, me odian, y no quieren verme ni en pintura, por el simple hecho de ser gay. Lo único que quisiera es morirme.

—¿Viste que mala noche me hiciste pasar? —Hablo mi estúpido hermano.

—Te Dije muy bien que no quería ir a esa cena. —le conteste. —pero claro, tu nunca escuchas Estarlin.

—Porque estela, me dijo que te sacará un rato, y por mi Hermana acepté, claro aunque no debí hacerle caso.

—Claro, tu siempre escuchando a mi hermana. —dije.

—Esteban, ¿Porque demonios te volviste gay? —pregunto.

Yo lo mire incrédulo..

—Y a ti que te importa que sea gay. Lo soy y punto.

—Sabes lo mucho que te odio por eso. ¿verdad? —dijo y me miro.

—Lo se desde que nací, porque fui el causante de la muerte de mi madre.

—No metas tu pinche nacimiento y la muerte de mama, en esta conversación. Sabes muy bien el tema que estamos hablando.

Yo me quedé callado y pensativo también. Y así dudamos todo el camino hasta llegar a casa, que lo único que espero, es que mi papá no aparesca para seguirme insultando. Pero para que hablo, si como quiera pasará. Al llegar a casa encontramos a mi hermana mayor estela conversado con mi papá, si es que se le puede llamar así.

—Hola Estarlin. —saludo el. —¿Como estubo tu noche con esta mariposita?

—¡Papá!!! ¿Tu crees que Esteban no se cansara de que le diga así?

—Me importa un pepino lo que diga, esa escoria no es mi hijo. —dijo.

—Papá, ¿Hasta cuando los insultos contra Esteban? —Quieras o no, es tu hijo.

—No, No y no. Esa escoria, no es nada mío. Lleva mi sangre y mi apellido. Pero no mi amor. Nunca lo vas a tener Estevan Díaz. NUNCA!!!!

Yo sin decir nada más, me fui corriendo hasta mi dormitorio. Que no di cuenta que mi hermana venía detrás mío. Y cerro la puerta y dijo;

—¡Esteban! —dijo ella y se acercó a mí a consolarme.

—¿Porque? ¿Porque? —fue lo único que pregunte, entre sollozos.

—Esteban, Sabes que papá está herido por la muerte de nuestra madre. Y como el es muy religioso, se niega a aceptar la homosexualidad como algo normal.

—Roberto siente un odio más grande hacia a mi. Y eso no puedo cambiar, la única manera que ser feliz son dos cosas, o morirme o saliendo de aquí para siempre.

—No digas eso hermanito, que si no después quien me va a consetir así como lo haces tú.

—Pos Estarlin. —dije.

—¡No! Estarlin no sería lo mismo que tú. Tu me haces mi día todos los días hermanito, y yo espero. Y rezo a todos los santos, que tú un día, seas la persona más feliz de este mundo. Y encuentres a la persona ideal y que quiera formar una vida contigo.

De pronto cambien mi cara de feliz a triste, o nose. Y dije;

—Yo en esa parte, no creo que sea feliz algún día. —dije algo triste.

—Ya verá que si Esteban. El amor de tu vida. Aparecera donde tu menos lo vas a esperar.

ADÁN