Capitulo 2

39 3 0
                                    

Fui saliendo de entre sueños, y noté un peso en mis piernas. Asustada toqué lo que tenía, y lo sentí. Sentí su cabeza en mi regazo, junto a unos leves ronquidos de su parte.

- Salte de aquí perro faldero. - inmediatamente lo alejé de mí, y oí su cuerpo caer al suelo.- ¿Ahora quién tiene mal el trasero idiota?

- ¿Con esa boquita dices mamá?

- Sí, pero no tengo.

- ¿No tienes boca? ¿Entonces como hablas?

- No tengo mamá imbécil...ella murió en un accidente. -hubo un largo silencio. -No puedo creer que conozca un tarado que sepa todas mis miserias. -susurré para mi misma. -¿Puedo llamar a mis padres adoptivos? En verdad me quiero largar de acá.

Ethan me guió hasta su teléfono y marcó el número que le pedí. Atendió Mónica preocupada por donde me encontraba. Le conté toda mi situación y le rogué que me venga a recoger lo antes posible.

- ¿Ya te vas? ¿Tan pronto? -me preguntó Ethan con algo de tristeza en su voz.

- Tengo que irme.

- Por lo menos dime tú nombre...y sí te volveré a ver.

- Soy Test, Test Jason.- de pronto escuché una contención de su risa. - ¿Qué tienes? - fue allí cuando sentí la explosión de la risa que se estaba aguantando.

- Tú nombre significa "prueba" en inglés.

- Y tú nombre es como "tarado" en japonés.

- Mentira.- dijo parando de repente su risa.

- Pues en mi diccionario significa eso. -intuí que se había quedado pensando, hasta que...

- ¡Etest! Nueva palabra en tú diccionario.

- ¿Y se puede saber que significa eso?

- Un amor ciego y estúpido como nosotros dos.

- Déjame adivinar, tú eres el estúpido.

- ¿Cómo supiste?

- Lo intuí.

En ese momento sonó el timbre de la casa. Supé que era Mónica porque cuando Ethan abrió la puerta pude escuchar su preocupada voz llamándome.

- ¿COMO PUEDES DESAPARECER ASI DE REPENTE TEST? Con tu padre estábamos sumamente preocupados.- sentí como Mónica agarraba fuertemente de mi brazo.

- Ustedes no son mis padres. -dije con voz calma.

- Señora, ¿no quiere una chocolatada para calmar sus nervios? -saltó la voz de "mi héroe"

- Que sea mejor un café lindo. - escuché los pasos de Ethan dirigiéndose a la cocina.

- Lo siento Test, siento haberte gritado así, y mas frente a tu novio. No sabía que tenías un novio tan lindo.

- Ethan no es mi novio. Nunca lo será. Solo es un idiota que me ayudó cuando estaba sola en la playa, y en lugar de llevarme a mi casa me trajo a la suya. -suspiré.

- Creo que a él le gustas hija...

- No me llames así, no soy tu hija, tú no eres mi madre y Eric ni se asoma en ser parecido a mi padre. Ustedes solamente me cuidan. Somos personas totalmente diferentes. Se que no soy lo que esperabas, ¿pero que esperabas? ¿Una chica tierna, dulce? Pues no, te tocó esta desgraciada, así que confórmate con lo que tienes y por lo que mas quieras no me trates de 'hija', porque tanto como tu y yo sabemos que no nací de esa vagina. -hubo unos segundos de silencio, pero de ese silencio que parecía que te cortaba la piel.

- Sube al auto. - lo dijo tomando, esta vez, mas suave de mi brazo.-Ethan lo siento pero no nos quedaremos mas, nos tenemos que ir.-gritó muy cerca de mí.

- Adiós señora...hasta pronto Test. -sentí como depositaba un cálido beso en mi mejilla izquierda. Ese contacto me hizo erizar la piel, por lo que me alejé repentinamente de él.

Me recosté en el asiento de copiloto recapacitando en todo lo que había pasado. Aún no podía creer como caí tan bajo, ese chico era un completo desastre. Un idiota. Un tarado. Un imbécil. Pero veamos el lado positivo, no lo tendría que volver a estar con él nunca mas.

Todo el viaje fue un completo silencio. Mónica no había emitido ni un solo sonido desde que subimos al auto hasta que nos bajamos. Me sentía un poco mal por lo que le había dicho. Pero que mas da, se lo merecía. No me puede tratar como alguien quien no soy.

Ella me abrió la puerta de la casa, y por instinto me dirigí al baño. Necesitaba urgentemente una ducha, ya empezaba a oler a mar y a ....Ethan. Aún no comprendía que es lo que tenía mal ese muchacho. Era muy infantil para mi gusto, pero con unos bíceps que me hace pensar que no me vendría nada mal conocer a su amiguito. Inmediatamente saqué ese pensamiento de mi cabeza. No podía pensar eso de alguien quien no es de mi gusto que digamos.

Salí del baño con la toalla envuelta en mi cuerpo. Me coloqué (como pude) una remera, y unos shorts. Ahora no podría salir de casa. No hasta que tenga un nuevo bastón. Me senté en la orilla de la cama, cuando de repente suena el teléfono. Como nadie respondía me tuve que levantar y comenzar a tocar todos los objetos hasta que logré obtener el teléfono. Contesté inmediatamente.

- ¿Hola? -sentí una respiración al otro lado de la línea. Me estremecí un poco. -¿Hola? -volví a repetir un poco más alto esta vez. Pero me colgaron. Genial, me hicieron levantar para nada.

Traté de volver a la cama, pero cuando me recosté en esta, sentí que había un palo largo debajo mío. Grité a Mónica y Eric. Esta vez fue Eric quien apareció, lo supe por la desesperación de su voz.

- ¿Qué ocurre Test?

- ¿Qué hay sobre mí cama?

- Pues tu bastón...y una carta.

- ¿Qué dice la carta?

- "Perdón por romper tú anterior juguete, te compré uno igual para que podamos volver a jugar en la playa como ayer. Con amor, Ethan." Cariño, ¿quién es Ethan? -Me quedé callada un rato, meditando lo que Eric me había dicho. "Con amor, Ethan." Ethan me compró un nuevo bastón.

- Nadie, un idiota que me rompió el bastón ayer...¿te puedo hacer una pregunta? -dudé un poco antes de seguir. - ¿Mónica..emm..como esta? Hablo de que, ¿sigue molesta o enfadada? ¿Algo por el estilo?

- Ella se encuentra bien cariño, solo fue a comprar algunas cosas para comer. Que raro que te preocupes por la gente Test.

- Solo fue una pregunta Eric, no te emociones. -dije cortante, y sentí como sus pasos se alejaban de a poco.

Tomé la carta que Ethan me había hecho y la guardé en unos de los estantes donde había colocado mis viejos libros. Dejé el nuevo bastón donde solía dejar el viejo, y me recosté en la cama.

- ¿Cómo la estas pasando en el juego,Test? -esa voz, él otra vez.

- Tú por lo menos puedes ver lo que está pasando, no como yo que todavía tengo que soportar tu castigo. ¿Por qué a mí?

- ¿Por qué no?

- Era feliz. -dije en un susurro.

- Eso es lo que crees, Test.

- ¿Y como se supone que siendo ciega, sin familia, y ni una buena noche de fiesta, sexo y alcohol sea feliz?

- Ethan.

- ¿Ethan?

- Ethan. -volvió a repetir.

- No entiendo...- en ese momento supe que ya no se encontraba nadie mas en la habitación. Mis ojos comenzaron a aguarse. De un momento a otro me encontraba llorando.

¿A esto le llamaba felicidad? ¿Qué tiene que ver Ethan en todo esto? ¿Por qué? ¿Por qué justo él?

Como Te ImagineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora