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Llegamos a mi casa, Javadd se fue después de despedirse de mis padres, omití darle un beso de buenas noches, estaba muy enojada con él, estaba muy nerviosa por qué mañana quería mi memoria de vuelta, así que esperaría a que el viniera a mi casa o de alguna forma yo quería mi memoria de vuelta, Javadd me explicó lo de los "poderes" que tenía, estaba molesta por qué ahora entendía que aquel hombre que sujetaba mi mano en la cama del hospital era Harry, había tenido el descaro de haberme ido a visitar.
Llamé un rato a Damie, ella estaba feliz por qué su periodo había llegado, quería contarle todo lo que me sucedía pero yo no tenía el valor, no quería hablar de como fui una mala madre y no quería que pensará que estaba loca, así que colgué después de un rato y me metí a la ducha durante unos 30 min. Salí y me coloque una pijama para dormir, me acerque a mi cama y comencé a tirar las almohadas que no ocuparía al suelo, miré hacía mi ventana, y ahí estaba, la luna viéndome llorar otra vez, me acerqué a la ventana y la abrí un poco. El sonido de un auto aproximarse captó mi atención quedándome ahí por un rato más, era el auto de Harry, se había parqueado al otro lado de la calle a dirección de mi casa, sentí su mirada,sabía que era él y me estaba observando desde mi ventana, miré el auto unos segundos más. Cerré la ventana de golpe y caminé hasta mi cama, al tomar la colcha me quedé viendola otros segundos más, bufé un poco y me di la vuelta tomando una sudadera de mi clóset. Salí despacio y sin ruido de mi habitación, y comencé a caminar hacia el pasillo principal donde se encontraban las escaleras, las baje despacio y lento para no hacer rechinar la madera. Camine hacia la puerta y tome las llaves para abrirla.

-_____. -abrí la puerta de golpe y Harry estaba ahí parado. Me dió un susto enorme que casi grito, pero tapo mi boca y se adentro conmigo, frunció el seño y me sale de su agarre con brusquedad.

-Largate de mi casa.

-Si no quieres que esté acá por qué bajaste a verme?.

-Por qué te iba a decir que te fueras. -fruncí el ceño molesta- Ahora vete.

-Ya escuchaste la versión de Malik, por favor escucha la mía.

-¿Donde está mi hija?. -me miró y se quedó callado, bajo la mirada melancólico y frunció sus labios.

-Perdoname...-susurro sin subir la mirada del suelo.

-Cuando Lú regrese con vida a mi lado, cuándo Lú perdone desde donde quiera que este que su padre la abandono y la entregó, ese día tal vez lo piense mil veces antes de perdonarte. -mis ojos se llenaron de lágrimas, el seguía inmóvil- Quiero mi memoria de vuelta, quiero recordar como era mi bebé.

-Vamos... Yo te llevaré con Erik y Samuel, ellos son los únicos que pueden hacerlo.

Miré hacía el reloj de pared, eran las 2:35 de la mañana, miré a Harry quien ya me miraba a los ojos, no me había percatado de sus ojos, los tenía levemente hinchados y rojos como si hubiese estado llorando hace unos momentos. Camine hacia la puerta y salí girando me a verlo dándole a entender que iría con él. Salió y cerró la puerta, salimos de la casa y nos adentramos en su coche, un olor a rosas y jazmines, inundaron mis fosas nasales, era ella, olía a Olga Malik.

-Que rico perfume.

-Dejaste el tuyo en la casa.-susurro mientras encendía el auto-.

-Y ella lo usa por mi?

-No sé de qué hablas. -sonreí incrédula mientras giraba mi vista a otro lado y me cruzaba de brazos, continúo manejando hasta llegar a aquella casa a las afueras del pueblo. Aquella casa a la que nadie quiere ir y evita todos los 30-31 de octubre, era grande casi como la de los Malik,pero su aspecto era más sombrío y triste, no me daban ganas de bajarme pero tenía algo pendiente.
Se dió la vuelta pero antes de que me abriera la puerta yo la abrí rápidamente y salí del auto. Camine hacia la puerta como si recordara el camino. Entramos y lo primero que ví fueron dos hombres altos y delgados uno más bajito que el otro y de cabello más oscuro, eran peliroja y sus penetrantes ojos azules miraban hacía a mí.

-Ya llegó la Señora de Malik. -dijo el de aspecto más risueño y divertido.

-Cállate Erik...-Harry se adentro más.

-Perdón creí que no te importaba.-Harry me miró unos segundos.

-No me importa...-tartemudeo un poco, pero nadie le prestó antención- Ahora quiero que le regreses a ____ a la normalidad.

-Sabes que no puedo -Erik arugó su frente.

-Me debes una Erik....-El chico suspiró ondo y rodeo los ojos.

Erik se acercó a mí y me tomo de la mano, me miró a los ojos, sus ojos eran tan azules, era como ver un océano, nunca había ido a la playa pero, supongo que así se sentía, su mirada azul celeste tenía como destellos grises, sus pestañas era cortas pero espesas, podía verle a los ojos todo el día y no me importaría, no por qué me atraiga como hombre si no que, él tenía algo que hacía que sin problemas yo pudiera estar así sin cansarme.

-Listo...-sonrió soltandome, estábamos sentados en el sofá y no me había dado cuenta cuando no como llegamos
hasta ahí- Quita esa cara _____ solo fue 1 hora.

Me sentía como si hubiera despierto de un largo sueño, miré a Erik quien me veía risueño como la primera vez que lo ví sentado ahí mismo donde se encontraba,se levantó y pude ver a Harry, al maldito Styles recargado en la pared.

-Tu....-dije levantándome del asiento y caminando hacia él- No se me olvida lo que te dije anoche y sabes qué...ya lo pensé mejor -sonreí falsamente- Ojalá haber dado  la vida de tu propia sangre a cambio de una mujer haya válido tanto la pena, no siento rabia por tí, ahora que recupere mi memoria, lo único que siento por ti es lastima, ojalá todos los días cuando despiertes te sientas feliz por el sacrificio que hiciste, ah y no se molesten en regresarle la memoria a mis padres y a mi amiga, yo estoy bien así, es mejor que sepan que voy a llegar pura y casta al altar con Malik.

Me giré y caminé hacia la entrada, no escuché ningún movimiento, solo las miradas de Erik y Samuel atrás mío, me detuve un segundo y giré mi cabeza observando la puerta que daba hacía el salir y al fondo la puerta del despacho principal de Harry, ahí había caído de rodillas llorando y suplicando que no se la llevarán, ahora recuerdo ver a Erik y Samuel entrar después de que los Pettit se fuerza con Lú llorando entre sus brazo estirando sus manitas hacía mí y Harry, después de eso recuerdo despertar en una cama de hospital. Me giré nuevamente pero antes de que pudiera abrir la puerta está se abrió de golpe...era ella la chica del retrato que había vistos hace ya varías semanas. los ojos miel como los de Javadd me miraraban fijamente, si cara era de confusión y un poco de enojo, supongo que Styles no le había dicho que vendría.

-Que haces aquí. -me miró enojada- ¿Te atreviste a traer a esta a la casa? -dijo alzandole la vos a Harry.

-Te voy a pedir, que todo lo que tienes o tenías de Lú me lo des mañana mismo.

-¿Quien es Lú?...-la dulce voz ahora enfadada de la chicha se escuchó por todo el salón.

-Que él te lo explique...-la miré directamente a los ojos.

Salí de la casa y el frío de la madrugada se hizo notable, eran alrededor de las 4:34 según mi teléfono, caminé por el jardín y salí de ahí rápidamente. Camine otros 20 min y pude llegar a mi casa, me arrope y me quedé dormida.

Dulce o Truco   |H•S|  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora