Yukina siempre ha ignorado que Hiei es su hermano. ¿Qué pasaría si se enamorase de él sin conocer el parentesco que les une? ¿Podría el amor convertirse en una obsesión?
(yukina POV) Me encontraba en el templo de Genkai. Estaba barriendo la entrada, recogiendo suavemente las hojas que habían caído durante la noche.Deje mi tarea a medias en cuanto note una presencia. Sonreí. El estaba allí, había venido a verme de nuevo.
Cuantas veces lo habrá hecho? En cuantas ocasiones me habrá observado desde las ramas de los árboles creyendo que yo ignoraba que estaba ahí?Oh, Hiei. Por que siempre me observas en secreto? Cuando serás capaz de confesarme tus sentimientos?Si, porque yo se que me quieres. Me amas tanto como yo a ti.A pesar de lo frió que eres con todo el mundo, a mi no has podido ocultármelo.No fue muy difícil darme cuenta, realmente no sabes fingir.
Recuerdo la primera vez que te vi.Fue hace tres años, cuando todavía me encontraba cautiva en la mansión de ese horrible humano.Cada vez que recuerdo los años que estuve recluida en aquella casa, no puedo evitar un escalofrío.Sufrí tanto, tantos años privada de mi libertad, sufriendo torturas, palizas, insultos y humillaciones... obligada a satisfacer las ambiciones de aquel hombre tan vil.Quería mis lágrimas, esas lágrimas que se convertían en hermosas perlas al deslizarse por mis mejillas...Llegué a odiarle tanto... pero a quien quería engañar? A quien más odiaba por encima de todo era a mi misma. Me detestaba por ser tan débil. Por haber sido tan ingenua comopara dejarme atrapar... en el fondo me lo tenía merecido.Por haber sido tan estúpida... por intentar ser lo que no era...Había huido de mi pueblo, con el fin de ir al mundo humano. Hasta ese momento yo había vivido en Hyoga, rodeada de otras koorime como yo.Esas mujeres con las que vivía hacían verdadero honor a su nombre: mujeres de hielo.Así es, una koorime debe ser totalmente ajena a cualquier tipo de sentimiento, no nos esta permitido amar. Vivíamos apartadas de todo ser, ya fuera humano o youkai, que pudieraalbergar cualquier sentimiento de calidez.Hasta tal extremo llegaba nuestra reclusión que llegábamos a asesinar a los hijos varones que habían nacido fruto de la relación de una koorime con un hombre. Como le sucedió a mi hermano, sangre de mi sangre, asesinado por aquellas crueles mujeres.Por eso quise huir, quería conocer aquello de lo que tanto había oído hablar, quería conocer el amor.Pero cuando logré escaparme fui capturada, privada de mi libertad, obligada a llorar y llorar sin poder detenerme. Llegó un momento en el que dejó de importarme todas las cosasque me hicieran. Los golpes ya no me dolían, los insultos ya no me afectaban... todo había dejado de tener sentido para mi.Me había convertido en lo que tanto odiaba... una mujer de hielo.Perdí todas las esperanzas de ser rescatada algún día e incluso intente suicidarme en varias ocasiones, pero mi poder regenerativo actuó contra mi y nunca pude lograrlo.Me convencí de que los buenos sentimientos no existían. Como no iba a hacerlo con semejantes seres a mi alrededor? Con todos aquellos que lo único que querían era explotarme?Fue entonces cuando me sacaron de mi celda. Querían que observara una pelea entre unos muchachos que venían a liberarme y los hermanos Toguro. Lo hacían para hundirme mas, querían que me sintiera culpable por la muerte de esos chicos, porque ahora que sabían que los golpes no me afectaban, se dedicaban a hundir mi espíritu.No pude hacer otra cosa que compadecerles y odiarme mas a mi misma por haberme dejado atrapar. Habían arriesgado su vida por mi culpa e iban a morir, porque nunca podríanderrotarlos, eran demasiado poderosos.Pero para mi sorpresa, aquello no ocurrió, consiguieron liberarme.
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Aunque fuiste tú, el que me arrebató de las garras de ese humano. Recuerdo claramente como le golpeaste,apartándole de mí. Que fue lo que le dijiste? No voy a matarte. No dejare que Yukina se ensucie con tu muerte.Aun me pregunto por que dijiste aquello, acaso ya me amabas antes de conocerme?Sí, porque yo se que me amas. Tal vez haya fingido no darme cuenta, pero lo se.Volví a sonreír.Cuantas veces había usado el mismo truco? El de fingir inocencia? Desde que tenía uso de razón me había funcionado. Mi apariencia frágil me ayudaba a ello. Pero en realidad, notengo nada de inocente, he visto y sufrido demasiadas cosas.Lo he hecho tantas veces... sobretodo, cuando estaba en presencia de Kuwabara. Pobre humano, de verdad le aprecio mucho, pero yo ya amo a otra persona. Por suerte, Kazumanunca ha intentado propasarse, me trata como una muñeca que pudiera romperse en mil pedazos si llegara a tocarme.En esas ocasiones agradezco profundamente mi apariencia tan delicada, tan pura. Será por esta misma pureza que aparento que el no se atreve a declararse?Una vez le pregunté a Kurama por que Hiei tenia aquel carácter tan frío. Me dijo que había sufrido mucho durante toda su vida, se había visto obligado a matar, robar y traicionarpara poder sobrevivir... sus manos estaban manchadas por la sangre de miles de personas.Acaso temes que te rechace por la vida que has tenido?
No deberías hacerlo, pues yo también he sufrido mucho. No soy tan pura como aparento. Conozco lo que es el dolor, la ira, el miedo, el odio, la desesperación... yo también los hesufrido en mis carnes.A veces pienso que estamos destinados a estar juntos, aun a pesar de que tu seas un youkai de fuego y yo una mujer de hielo, ambos tenemos muchas heridas que sanar.Quiero curar todas tus heridas, ayudarte a olvidar todo tu odio. Y tú a cambio curarías las mías y me enseñarías lo que es el amor, se que estamos hechos para estar juntos.Desde el primer momento noté que conmigo te comportabas diferente.Realmente fuiste muy obvio Hiei. Te he descubierto muchas veces mirándome de reojo cuando crees que no te observo, te pones nervioso ante mi presencia, te sonrojas como unniño pequeño cuando te sonrío y te pones muy celoso cuando estoy cerca de Kuwabara... realmente eres muy obvio.Por eso me pregunto muchas veces... a que esperas para decirme lo que sientes? Será por timidez? Por miedo al rechazo? Pues no temas mi youkai de fuego, yo lo haré por ti. Te confesare lo que siento Hiei – susurré dirigiendo mi mirada al árbol en el que estabas acomodado.
