Capitulo 15

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El vaso se deslizó de mis manos, cayó en picada y pude escuchar cómo se rompía, como se desvanecía , como se esparcían por ahí pequeños fragmentos de vidrios y como unos rozaban mi pierna por el impacto.Sabia exactamente como se volvía nada,y lo sabía, por qué así mismo me sentía yo.

-Ana, a que no adi...- Diego estaba en la entrada de la cocina.Quedó paralizado.Miro y sentí como lamentaba dentro de sí mismo.

Pero...¿Qué iba a lamentar?.

Me llene de cólera, lo mire y las comisuras de mis labios lucharon para que pudiera esbozar una sonrisa.Pero lo logré.

-A que no adivinas - dije despacio- ¡He conocido a tu novia! - dije con un irónico y falso entusiasmo.- Al fin la conozco.

Salí rápidamente,justo antes de soltar una lagrima ,ya fuera de la cocina, Diego me tomó por el brazo impidiendo que me fuera.

-Puedo explicarlo-dijo.

En un violento movimiento me zafe de el,lo mire y todo para mí tuvo sentido, ¡TODO!.Me sentí ciegamente estúpida, como había caído tan bajo. Pero todo concordaba,el hecho de que todo hubiera ocurrido tan rápido.

-Que bella es- dije secamente,lo mire directo a los ojos- Les deseo la mayor suerte del mundo.

El sabía que lo que decía era mentira,pero desgraciadamente yo era así, nunca me dejaría ver vulnerable, nunca dejaría que me viera llorar o darle la satisfacción de demostrarle de que a pesar que no éramos nada, me había herido.Y decirle aquello tan calmada,me pesaba como ladrillos dentro de mí, pero como dicen :"lo que no te mata, te hace más fuerte". Y como aquello no me había quitado la vida, tenía que seguir adelante con y sin mi rabia.

Salí del apartamento a paso rápido como si escapara de la tormenta pero estuviera prohibido correr.Las lágrimas caían, me las secaba con mis manos mientras que maldecía dentro de mí por estar llorando. Justo antes de poder presionar el botón, el ascensor se abrió en frente de mi y vi a Arthur en su interior,frene en seco no iba montarme en el elevador con el ahí, escuche la voz de Diego llamándome , venía corriendo hacia mi, pero no quería saber nada de él. Así que, no tenía más opción brinque al ascensor y presione el botón rápidamente y muchas veces para que las puertas de este se cerrarán, y así fue, Diego quedo en frente de mi pero el espacio era demasiado diminuto para que el pudiera pasar, detalle sus hermosos ojos castaños,su cabello alborotado, pero las puertas se terminaron de cerrar y ya no lo pude ver más.

Cualquier cosa por ti .Donde viven las historias. Descúbrelo ahora