Youtube Stars (Drarry AU)

Trece.

Draco POV

Doy un par de vueltas delante del espejo, sonriendo. La gente de vidcon nos ha dejado un par de smokings de nuestra talla, van a aprovechar para hacer algunas fotos. (Que luego venderán estampadas en todo tipo de objetos, desde lápices hasta toallas.)
Mi reflejo me devuelve la sonrisa. El traje de Valentino que han escogido para mí es arriesgado, con detalles plateados. Me encanta.

-Esto no es cómodo. -oigo detrás de mí, y me giro.

Harry lleva un traje negro, sencillo pero elegante, que le sienta como hecho a medida. Me vienen a la cabeza imágenes de altares y anillos, pero las aparto de immediato.

-Joder.

Harry se ríe.

-¿Tan mal me queda?

-¿Qué? ¡Ah! Eh...no, no. Lo decía porque me sorprende verte bien vestido.

Eso ha estado cerca, soy imbécil.

-A tí también te queda bien el tuyo.

-Por supuesto. -le contesto sin dudar.

-Creído. -sonríe.

-Vamos. No querrás llegar tarde.

-Claro que no.

La sesión de fotos resulta agradable. La fotógrafa es simpática, y consigue que parezcamos relajados y naturales incluso en poses rarísimas. Nos reímos mucho y charlamos más. Para cuando estamos sentados en la mesa, listos para cenar, el ambiente es cómodo y distendido.

Nos traen ostras, fresas con chocolate y champán. Y velas. Muchas velas.

-Espero que no arda el restaurante.

-Eso sería desafortunado, sí.

Harry me mira fijamente. Sus ojos sonríen. Me digo a mi mismo que debo de estar en un sueño.

-¿Puedo preguntarte algo? -me dice- Es un poco personal...

-Sí, claro...

-¿Cómo supiste que...eh, bueno, que eras gay?

-Oh. No sé. La verdad es que no lo pensé mucho. Siempre me habían gustado los chicos y simplemente crecí y aprendí que había una palabra para eso.

-Ah...bien.

-¿Por qué me lo preguntas?

-Bueno yo esperaba algo un poco más mayor, algún chico que te haya...abierto los ojos. La verdad es que yo... Mejor dejémoslo.

No puedo creerme que acabe de insinuar lo que creo que ha insinuado.

-Harry, sea lo que sea, puedes contarmelo. No habré pasado por la misma experiencia, pero sé lo que es, creeme.

Harry baja la mirada.

-No...no lo había aceptado hasta ahora pero...creo que soy bisexual.

Mi corazón se acelera al oír esto. Todo dentro de mi se revoluciona ante esta oportunidad. Intento deshacerme de esa sensación. Eso no significa que yo le vaya a gustar.

-¿Cómo te has dado cuenta?

Harry se encoge de hombros.

-A veces pasan cosas que no ves venir.

-Supongo que no lo has contado mucho por ahí.

Harry niega.

-Eres el primero que lo sabe.

-¿Crees que tus padres serán comprensivos?

Me mira sorprendido, pero luego la tristeza inunda sus ojos.

-Mis padres murieron cuando yo era pequeño.

-Oh. No lo sabía. Lo siento mucho. -le digo de corazón.

-No pasa nada. Ellos me querrían igual. De hecho, me he criado con mi padrino y su novio. Son como unos padres para mí.

-Deben de estar muy orgullosos de ti. -le digo- los cuatro.

Harry POV

Debajo del niño rico, debajo del chico borde (aunque muy atractivo), debajo de todo eso, está el verdadero Draco Malfoy.

No es que él no sea todo eso, lo es, pero hay una gran parte oculta que sólo se intuye al conocerlo, pero sale a relucir más a menudo de lo que cabría esperar. Una parte amable, sincera e incluso tierna.

¿Cuánto tiempo lleva enamorarse?
¿Cuáles son los síntomas?

Desgraciadamente no hay guías para eso, pero estoy empezando a pensar que quizás haya un motivo por el que me late más fuerte el corazón cuando él está cerca.

Tiene los ojos grises, algo nacarados, fijos en mí.

-Espero que sí. Solo quiero estar a la altura. -contesto.

-Lo estás. -sonríe ampliamente. No está fingiendo. Le he visto sonreír falsamente, y es atractivo, pero esta sonrisa es de verdad y creo que nunca he visto algo más maravilloso.

Draco Malfoy tiene varias partes.
Y me estoy enamorando de todas ellas.

Cuando terminamos la cena y el champán, nos ponemos a pasear por el jardín del restaurante. Está oscuro, excepto por algunos farolillos sueltos. Quizá es el alcohol, pero me siento eufórico, valiente, y no puedo dejar de mirarlo.

Hay un pequeño estanque, que bordeamos. Le doy una patada distraída a una piedra.

-Estos dos días han sido...-empiezo, pero no sigo, no sabría como describirlos.

-Sorprendentes. -me dice él.

-Sí. Y muy agradables. No me había sentido así en mucho tiempo. -debería haber dicho "divertido así", mierda, ahora se me nota mucho. Mierda, mierda. Estoy seguro de que Draco no siente nada por mí. ¿Qué haré si no sé ocultar mi crush?

-Yo tampoco. -admite, y enseguida añade- Nos han preparado muchas cosas.

-No tiene nada que ver con las actividades. -digo. ¿Pero qué estoy haciendo? ¿A qué viene este ataque de sinceridad, Harry?

Draco se para a mirarme, muy sorprendido.

-No, la verdad es que no.

Mi corazón se acelera a límites probablemente peligrosos. Cálmate, Harry, solo ha admitido que disfruta con tu compañía, no te ha pedido que te cases con él.

-No quiero que estos días terminen. No quiero que vuelvas a Inglaterra.

Vale, tiene que dejar de hacer eso. De verdad que tiene que dejar de hacerlo porque me está confundiendo.

Nos miramos a los ojos. Los suyos reflejan un farolillo cercano. Tiene que dejar de hacer esto.
Tiene que dejar de hacer esto porque si no voy a tener que besarle.

Nos miramos a los ojos.

-Siempre puedo volver. -murmuro, y suena demasiado a promesa de amor para que no lo sea.

-Eso está bien.

De repente me doy cuenta de que está más cerca. Demasiado cerca. ¿Por qué está tan cerca?

Mi corazón late más rápido (al parecer era posible) y mi cerebro parece haber abandonado sus funciones habituales para convertirse en una especie de esponja que solo puede pensar en una cosa.

DracoDracoDracoDraco

Y está muy cerca. MUY cerca. No sé por qué está tan cerca, pero tiene que parar porque si no tendré que-

Draco se adelanta, me pone una mano en la mejilla y junta nuestros labios.

Un último pensamiento cruza la esponja en la que se ha vuelto mi cerebro antes de rendirse del todo a su contacto.

Estoy besando a Draco Malfoy.