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Narra Guillermo

— Maldito teléfono.

Veo la hora y son las ocho de la mañana, salgo rápidamente de la cama. Me visto con unos pantalones ajustados, que remarcan mi silueta, una camisa roja y unas vans negras

Mi autobus personal me está esperando afuera, ojala fuera así, este autobus lleva a 10000 personas más de la capacidad de asientos.

Cuarenta minutos después llego al maldito colegio, con muchisimo frío, siento mi cabeza a punto de explotar.

Subo la rampa y aprovecho para hacer fuerza con las piernas a ver si levanto algo de culo.

Paso por la ventana de mi salón y ya están haciendo ruido mis idiotas compañeros, como es usual.

Abro la puerta y desconcertado, como si estuviese en otro planeta busco un lugar donde descansar mi trasero

Finalmente me siento en la segunda fila de los asientos, me acomodo y ahí es cuando lo veo.

Una perfecta barba color ocre junto a unos ojos color marrónes se apresuran a entrar al salón para pasar lista.

Rápidamente noto sus dedos, son largos y punteagudos, las ganas que le tengo a este profesor ya vienen siendo evidentes.

Sacudo mi cabeza y volteo a inspeccionar a mi alrededor.

En la primer fila, está Chino, con sus auriculares y mirando al infinito, a su lado, Chesi, copiando algo en el pizarrón y con mucho malhumor

Una voz grave inunda mis oídos, volteo nuevamente a ver de donde procede.

Es él.

Cierta vergüenza me invade al ver qué él hombre de gran cuerpo esboza una sonrisa.

No me incomodaba decir que era la puta del colegio, en mi trasero han entrado alrededor de 300 penes y he hecho mamadas a mas 600 chicos y adultos.

Con la forma en la que el profesor me mira, pienso que en un chasquido de dedos, estará dandome por el culo.

— Necesito qué te quedes después de clases de gimnasia para discutir un asunto pendiente.

Mi Profesor, Mi Pervertido ~ Wigetta Lemmon Hard +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora