Era oscuro cuando por fin había logrado despertar.. no sabía dónde me encontraba, salí rápidamente de entre todos los escombros para así poder toparme con la vista de lo que mi hogar alguna vez había sido.
Todo se encontraba en ruinas, muy pocas cosas habían logrado mantenerse en píe por lo que trataba de moverme con precaución durante mi transcurso por la zona.Pasado el tiempo me dirigí hasta mi hogar esperando así poder encontrarme con mi familia.
Para mi sorpresa, no logré encontrar a nadie..
Salí de ahí para así, después de explorar más a fondo por la zona dirigirme hasta el exterior.— Tenía años que no salía de esa madriguera.
¿Ahora qué haré? Estoy solo. —Me dije a mi mismo mientras apretaba con fuerza la mano derecha.
Al instante de ello levanté un poco su cabeza pidiendo así observar mejor el lugar.Inkopolis, sabía perfectamente y tenía que dirigirme hasta ahí.
— Ajustar cuentas es lo único que ahora necesito hacer.
¡Pagarás por todo lo que nos hiciste, maldito! —Y dicho aquello procedí a dirigirme hasta la ciudad.
No descansaré hasta encontrar al culpable de todo lo ocurrido.
ESTÁS LEYENDO
La última Octoling
RandomA veces tu peor enemigo puede convertirse en todo lo contrario de lo que esperabas. Nuestros protagonistas en esta historia son una pequeña y tímida Octoling llamada Iris junto con el fuerte y carismático Inkling llamado Luck. Cabe resaltar que, ést...