Querido hurón desteñido

I

(Carta inspirada en Ya nada queda-Kudai  )

Querido Draco:

                            Miro y ya no estás en nuestro departamento, no hay nadie con quien hablar aquí. Es extraño, aún puedo recordar la primera vez que nos vimos de una manera distinta. Ahí estabas, con tu chaqueta de cuero, tendido en el césped de aquel parque. Mirabas el cielo aquella noche de luna llena. No sé aún qué hacías ahí.

Aún puedo sentirte, soñarte, aun estoy adicta a ti; a tu perfume, a tus recuerdos... demonios, hasta a tu desorden. No sé cómo lograrlo. No sé cómo hacer para sacarte de mi cabeza, de mi corazón. Mi alma clama por ti, pero no puedo hacerle más caso del que ya le he hecho. No me he bañado en una semana. Nuestro –mi– departamento es un completo desastre. Ginny y Harry han venido a ayudarme a ordenar. Ginny me obligó a darme una ducha y ahí estuve, desenredándome el cabello por más de una hora, creyendo escuchar tu voz diciendo "lindo peinado, Granger.

Te extraño.

Ellos dicen que se me pasará. Que la vida continúa, y sé que tienen razón, pero... yo no quiero continuarla sin ti, sin embargo, debo hacerlo, porque no soy egoísta, no como tú.

Si te hubieras ido con otra, seguiría, si te hubieras ido del país, seguiría. Pero no, te fuiste. Te fuiste a un jodido lugar donde no puedo seguirte. Te fuiste, maldito egoísta, porque tu cabeza estaba tan mal después de la guerra, que te abriste los brazos en nuestra bañera después de que te dije que no estaremos solos... fuiste egoísta, cobarde y débil, y te odio por eso... pero yo tengo que ser fuerte. Mil veces más fuerte que tú, maldito bastardo. Tengo que serlo ahora que tengo claro que no me dejaste sola, maldito egoísta.

¿Querías ponerle Draco como tú?, te jodes, por egoísta. Se llamará Scorpius, Como la constelación cercana a la tuya.

A pesar de ser un imbécil, Te amo.

Hermione.