23.

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A la mañana siguiente la pareja decidió que debían decírselo a los padres de Tyler.

—No importa como reaccionen, no importa como reaccionen.

Sabes que te odiaran

—No importa como reaccionen.

Te dirán cosas horribles y todo sera verdad

—No importa como reaccionen, no.

Todos pensaran que eres raro

—Todo estará bien, porque me aman.

Serás una desgracia

—Si me hace feliz a mi, ellos estarán felices por mi.

Que mentiras te dices Joseph

Tyler no había podido dormir como hubiese querido, había demasiado pasando por su cabeza como para aceptarlo e ir a dormir plácidamente. Había pasado la noche debatiendo sobre como demonios iban sus padres a reaccionar, ellos no eran precisamente unos ogros respecto a estos temas, pero tampoco estarían encantados.

—¿Tyler?

La voz de Josh saco al menor de sus pensamientos, abrió la puerta de la habitación y lo vio allí parado esperándole.

—¡Es hora de irnos!

El castaño no dijo una palabra hasta que tuvo que despedirse de su ahora suegra.

—¡Oh querido, Te deseamos suerte al decirle a tus padres!

—Y si algo sale mal alli—El padre de Josh coloco una mano sobre el hombro de Tyler—Nos tienen a nosotros.

Al menor se le formo un nudo increíblemente gigante en la garganta y luchó consigo mismo por no soltarse a llorar ahí mismo, en vez de eso tomo rápidamente la mano de Josh es busca de apoyó y cuando sintió el tacto cálido de esta algo dentro de el se calmo.

Los dos volvieron a su casa y pasaron la tarde allí, Tyler sentía cada vez mas ansiedad y ya era visible para Josh.

—BabyBoy, basta.

—¿Que?

Tyler se encontraba sumergido en sus propios pensamientos.

—Basta Ty, estaremos bien, tus padres lo entenderán.

—Josh, ¿que pasa si no lo hacen?

—Lo haran, deja de ser tan pesimista—El mayor tomo la mano izquierda de Tyler— Y si no, prometo que yo estaré allí para defenderte.

Al caer el anochecer la pareja se encontraba frente a puerta principal de la casa de la familia de Tyler, sabia que a lo sumo solo se encontrarían sus padres y tal vez alguno de sus hermanos.
Al tocar la puerta Tyler comenzó a transpirar notoriamente y sus manos comenzaron a temblar un poco.

—Tyler, calmate— le pidió Josh.

Este instantáneamente paro de temblar, en un esfuerzo por demostrarle a su amado que era lo suficientemente fuerte como para componerse a si mismo.

By The Way |JOSHLER|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora