Mercurio el Otro Lado de la Chica ~

Capítulo 4: El Closet

Hana, lentamente abrió sus ojos de par en par, esperando con ansias que todo eso que había vivido fuera sólo un tonto sueño.

Al acomodar su visión logró darse cuenta de que ni la fuente ni la lámpara de mercurio rosa se encontraba, sólo el inocente peluche del Gato que parecía estar durmiendo junto a ella.

- ¿Dónde esto...? Ah, cierto... - Murmuró Hana levantando su vista hacia aquél cielo, era aburrido que sea igual siempre, le quitaba lo especial que era por sí .

Tratando de no llorar, pues sería inútil, Hana se levantó con dificultad del suelo y tomó al Peluche del Gato rosa entre sus manos, ahora estaba inmóvil y sin decir una palabra, algo que no molestaba a Hana en lo absoluto.

Con un increíble aburrimiento comenzó a caminar por ese mundo desolado, tratando de encontrar algo que fuera diferente, pero todo era igual, una y otra vez era igual.

- ¿Qué era esto exactamente? - Pensaba Hana en su cabeza, mientras continuaba caminando. 

Con un sentimiento extraño en su pecho, ella se sentó en el suelo, estaba cansada, no sabía cuando tiempo había caminado, pues allí no había relojes y tal vez ni un uso horario.

Con lo cansada que Hana se encontraba, lo único que le quedaba era recostarse y observar el cielo e imaginar cosas mejores, como imaginar que estaba en su mundo junto a Oliver.

Eso no fue muy bueno en verdad, pues hizo que la chica derramara unas pequeñas lágrimas, quería verlo, pero tenía que encontrar la manera de escapar de este lugar. Algo que resultaba ciertamente imposible, a decir verdad.

- ¿Estás aburrida, verdad? - Retumbó una voz por los oídos de Hana, haciendo que se sobresalte de repente.

- ¿Q.. Quién eres tú? - Preguntó nerviosa Hana.

- Te sientes sola, ¿No es así? - Preguntó la voz nuevamente, no podía distinguir de que género era la persona o cosa que la emitía, estaba muy distorsionada. - Yo sé que sí.

- ¿Por qué... Por qué me preguntas.. Eso?

- Porque es lo que necesito saber.

- ¿P.. Por qué? - Hana no entendía que es lo que le decía ese ser poderoso o lo que sea que fuese.

"Te quiero, te odio, te quiero, te odio, ¡TE ODIO, TE ODIO, TE ODIO!"

- ¡¿Q... Qué es esa voz?! - Gritaba Hana con gritos de dolor, ese sonido se metía por su oído, haciéndola escuchar esas palabras a un volumen realmente intenso.

- ¿Lo ves? Ni siquiera tu amado Oliver te dice esas cosas.

- ¿Oliver e.. Está diciendo eso...? - Preguntó Hana devastada. - ¡No, Oliver jamás diría algo así!

Hana se encontraba gritándole a la nada, si se encontrara en su mundo estaría actuando como si fuera una verdadera loca.

- ¿Y como lo sabes? Tal vez sólo eres una muñeca que él controla. - Decía la voz una y otra vez.

- ¿P... Por qué? É... Él me quiere. - Se dijo Hana a si misma, para tratar de repeler las palabras de la otra extraña voz que provenían de ningún otro lado.

- Mira esa estrella que cae... - Le dijo la voz a Hana, la chica levantó su cabeza y observó una estrella fugaz que caía en ese mundo desolado. - Así serás tú si le sigues creyendo a ese chico de mentiras.

- ¿Y... Y quien eres tú para juzgarme? - Le preguntó Hana. - Además, Oliver jamás... Jamás haría algo así. 

- ¿En serio lo crees? Entonces... ¿Por qué no lo compruebas? - La puso a prueba la voz, aunque era algo tonto lo que decía, no tenía mucho sentido.

- ¿A qué te refieres? - Le preguntó Hana confundida, por todo en general.

- Corre hasta esa estrella y luego te volveré a hablar. - Dijo la voz, dejando de retumbar en los oídos de Hana.

- ¿S.. Sigues allí? - Preguntaba Hana a la nada, dándose la vuelta hacia el lugar dónde cayó la estrella, que no estaba nada cerca. 

Así que, con preocupación por las palabras de ese ente, o lo que fuese, Hana se preparó y comenzó a correr hasta ese lugar alejado donde la estrella había dejado el cielo y había tocado la tierra.

Cuando al fin llegó hasta ese lugar se dio cuenta que en lugar de un cometa o estrella había un gran closet de color verde-celeste, en las puertas tenía un papel escrito.

Hana lo tomó entre sus manos y leyó lo que decía:

"Ábreme, sé que quieres abrirme"

Eso sólo incitaba más y más a Hana a abrir las puertas de ese misterioso Closet, y cuando se acercó a las puertas, el Gato rosa de peluche se despertó.

- ¡NO HAGAS ESO! - Gritó el Gato con terror corriendo hacia Hana, la chica asustada se dio la vuelta.

- ¡CÁLLATE! - Dijo la misma voz de antes, y Hana presenció como el Gato se elevaba y desaparecía en un "Puf" Mágico.

- E.. Espera... - Hana soltó las puertas del Closet e intentó correr, pero entones estas se abrieron de par en par y una ráfaga arrastró a Hana hacia dentro del Closet, entre gritos y peleas desgarradores, el Closet se cerró.

  ~★ Mercury ★~ 

Ño tengo nada más que decir xD Este capítulo fue extra corto pero es para mantener el misterio (? xD ¡Bye Bye! Que pasen bien.

Ahora yo ño subía un Capítulo por 3 Meses (???) xDDD