Mi subconsciente es benévolo conmigo, y me aporta recuerdos alegres en los que aparecemos mis padres, Max y yo en el coche para ir a un lago. No vivíamos cerca de la playa, nunca la he visto con mis ojos, por eso siempre que hacía buen tiempo y estábamos juntos íbamos a pasar el día a la orilla de un lago o un río. Parece una tontería, pero cuando tienes solo unos pocos días con tu familia reunida, hasta lo más simple es lo mejor. Recuerdo un día en el que Max se metió en el agua y salió diciendo que le había picado una medusa. Mi padre le explicó que solo hay medusas en el mar, que habría sido que se había picado con un palo. Nos hizo ir a mirar si era un palo o era la "medusa", así que pasamos toda la tarde buscando lo que le había picado. Al final, nos confesó que no le picó nada, que solo quería jugar en el agua con todos en vez de estar sentados tomando el sol. No le culpo, yo también habría hecho algo para estar todos jugando si tuviera "edad" para permitirme gastar una pequeña mentira y no llevarme una reprimenda.
Me desprendo de los recuerdos en cuanto mi cuerpo gira repentinamente por una superficie dura. Trato de abrir los ojos, y me cuesta un gran esfuerzo poner en marcha mis párpados. Finalmente consigo ver que estoy en una especie de furgón, con dos de los hombres sujetando un arma cada uno. Me quedo quieta, no sé lo que pasará si me muevo. Tal vez los dos idiotas armados piensen que soy una amenaza y me metan un tiro en la sien. Muevo los ojos por el furgón, lo cual hace que me duela la cabeza a cada mirada que echo. En frente de mí, está Max inconsciente. Ya no tiene el dardo en el cuello ni su mochila a la espalda. Tampoco yo tengo mi carcaj ni mi arco. Tal vez lo abandonaron todo en el bosque. Algo en mi cabeza se enciende y recuerdo lo que me dijo el hombre de los ojos oscuros: mi padre está vivo en alguna parte del mundo y trabaja contra el enemigo número uno de Estados Unidos. Además de eso, mi hermano y yo somos un peligro por ser hijos de mi padre, y nos van a meter en algún sitio donde nuestra vida se basará en contar nuestra vida una y otra vez para ver si hay alguna pista del paradero de mi padre.
–¿Se ha despertado la chica? –pregunta uno de los hombres al otro. Cierro los ojos rápidamente, aunque lo único que consigo es medio cerrarlos antes de que el otro le responda.
–No, creo que todavía sigue drogada. –noto una luz intensa a través de mis párpados y un poco mi retina. Aguanto sin moverme nada hasta que se rinde y la luz cesa.– Sí, sigue muy drogada.
–¿Cómo habrán durado seis años en el bosque sin ser descubiertos? Ni una persona les ha visto.
–Ya, llevó ciento y la madre encontrarlos. Menos mal que se les ocurrió aparecer cerca de nuestro campamento.
–¿Han encontrado dónde se escondían?
–No, aún siguen buscando. Ahora están mirando cuevas, por si han dejado alguna pista de si se han quedado algún día ahí.
–Estos chicos no saben en el lío que les ha metido su padre.
–Bueno, ahora se quedarán una temporada con el agente Reeb, hasta que su padre se digne a salir cuando sepa que sus hijos están con nosotros.
–Entonces, aún queda un poco hasta el aeropuerto.
–En veinte minutos ya estamos allí. A ver si estos dos se despiertan antes.
–Ya, no me apetece hacer el paripé delante de una azafata. –se quedan en silencio unos instantes y continúa– ¿Este fin de semana vas con tu mujer?
En ese momento desconecto de la conversación, prefiero masticar bien lo que he escuchado. Han dicho algo de que hemos estados seis años escondidos, por lo que nos sitúa a mí con veinte años y a Max con catorce años. Mi padre, si le queda algo de conciencia, vendrá a buscarnos y a explicarnos lo que ha pasado. También nos va a refugiar el agente Reeb, que debe de vivir lejos de aquí para tener que coger un avión. Hay muchos datos que asimilar, pero muy poca información. Todo ha pasado rápido. ¿Qué hora debe de ser ya? No sé cuánto tiempo he estado inconsciente. Tal vez unas cuantas horas o incluso más. ¿Y Max? ¿Seguirá inconsciente? No me atrevo a mirarle, a pesar de que los hombres están hablando entre ellos de resultados de algún deporte.
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Amnesia
Misterio / SuspensoNora y Max han estado viviendo en un bosque durante años. Hijos de una madre suicidada y un padre militar presuntamente muerto, descubren que en realidad está vivo y trabaja para una asociación rusa. Capturados por el ejército de Estados Unidos, viv...