Teen

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—Entonces... ¿cuánto va a costar la amplificación y el recorte de esta foto? —pregunto, Michael, tímidamente.

—$10. —la castaña mastico fuertemente su goma de mascar.

El pelirrojo, sacó de su mochila el billete arrugado y se lo entrego a la muchacha.

—¿Cómo dices que vas a querer la foto?

Calum suspiró, estresado. —A ver, ¿estas idiota? Esta esta es la cuarta vez que nos preguntas.

—Calum... —susurró/grito Michael.

—Pon atención, que no voy a decirte otra vez. La foto vas a ampliarla en tamaño oficio, y después vas a recortar foto, separando a los dos tipos que estan allí, quedando dos rectángulos de la misma medida. Y queremos los dos rectángulos, no solo uno. ¿Entendido? —la chica asintió. —Muy bien. Y mas te vale que lo hagas bien, porque si sale mal, te lo meto por el culo.

Finalizó y se sentó en uno de los sillones que habían allí.

Era Viernes y Michael acostumbraba a quedarse a dormir en la casa de su amigo, o viceversa.

—Saliendo de aquí vamos a comprar todo para la noche.

—Esta vez, ¿qué vamos a hacer?

—¿A qué te refieres? —pregunto Calum.

—Siempre que vamos a quedarnos en tú casa o en la mia, hacemos algo, vemos películas, hacemos retos, entramos a omegle o jugamos en línea. ¿Qué vamos a hacer esta vez?

—No sé. —se encogió de hombros el moreno. —Podríamos ir a algún lugar.

Ambos chicos se sentaron en los sofás que tenían en el estudió, Calum sólo se enfocaba en molestar a su amigo, mientras que el pelirrojo se dedicaba a mirar las fotografías que tenían colgadas.

—¿Tú te quieres casar, Cal? —el chico pregunto después de un tiempo.

—No, yo no me voy a casar, no, no, no, yo no, yo no.

—Sería lindo casarse. —murmuró Michael, sonriendo.

—Que aburrido estar amarrado a alguien. Conforme pasa el tiempo, el amor se va acabando y termina convirtiéndose en lástima o algo peor. —bufó.

—Vaya, parece que alguien esta resentido con el mundo. —empezó Michael a codear a su amigo en las costillas para molestarlo.

—Claro que no.

—¿Tu familia va a estar en tu casa hoy?

Obvs no. —empezó a juguetear con un hilo que salía de su playera. —Mis padres se fueron a un retiro matrimonial que organizó la iglesia, y le di mis ahorros a mi hermana para que se quedará en otro lugar.  —respondió. —¿Por qué?

—El profesor Hemmings tiene turno en la tarde también, ¿verdad?

—Creo que si. —volteó a verlo extrañado. —¿A qué se deben tantas preguntas?

—En cuanto nos den las fotos, vamos a mi casa, hacemos una mochila y volamos hacia la secundaria.

—Que hueva, tu casa esta al otro lado del mundo. —recargó la cabeza sobre la pared rosa del local donde se encontraban. —¿A qué quieres ir a la secundaria? Apenas llegamos a la primera hora y ya nos queremos ir, para que después quieras volver a ir en la tarde, eso ya es de locos.

Vamos a investigar donde vive el profesor Hemmings.

❌❌❌

Ambos chicos bajaron del camión, escondiéndose detrás de aquel contenedor azul que estaba ubicado en el estacionamiento de su secundaria.

—Si sale Luke, ¿desde dónde lo vamos a seguir para qué no se de cuenta?

—Nos vamos a ir en taxi, Cal.

—Ahorita no veo a ningun taxi que este disponible.

—En camión.

—No sabemos hacia donde va exactamente, si tomamos una ruta equivocada, vamos a ir hacia otro lugar.

Michael suspiró frustrado. —Pide un uber, Calum.

—Un uber se tarda en llegar si no hay disponibles por aquí, de aquí a que lo pidamos Luke se va a perder de vista.

—De verdad que tu me cagas en todos los sentidos, Calum.

Calum se levantó de donde estaba escondido y de una patada hizo que su amigo cayera de espaldas.

—En lugar de estar aquí, levántate y vamos a buscar un taxi o algo, bruto.

El pelirrojo ignoró a su amigo, quien empezó a caminar unos cuantos metros para buscar transporte.

Sintió todos los vellos de su nuca erizarse cuando vio aquel carro conocido, rogó para que aquel contenedor logrará ocultarlo bien y trató de ubicar a su moreno amigo.

—Maldita seaaaaa, Calum. —su cabeza comenzaba a dolerle, tenian que seguir a aquel carro que ya estaba un poco alejado de ellos y su amigo no aparecía.

Quibole, lacra. —la voz de su amigo hizo que su alma volviera otra vez a su cuerpo. —Subéte porque no llegamos.

Entró al taxi y se recargó en el vidrio.

—Pensé que te habían robado.

—No, tuve que ir a Smart para pedir un taxi, me quedé parado hasta que llegó uno, era el único disponible.

—¿A dónde quieren que los lleve, hijos? —preguntó a aquel señor de cabello ondulado.

—Siga al carro negro que esta adelante, el que tiene una imagen de disney atrás.

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Se estrelló mi celular:)))))). xD

:'v

Math Teacher.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora