Free Souls

II

COURTNEY
No me lo podía creer.
Elizabeth Mirallegro en frente mío, después de crecer juntas, y ser el pilar de apoyo de ambas, volvemos a estar juntas.
No me podía creer que había pasado, ¿Cómo no me he dado cuenta de que era ella antes?. Lo esencial es invisible a los ojos dicen...
- No me puedo creer que después de tanto tiempo separadas volvamos a estar juntas- Dije sonriendo y abracé a Elizabeth con fuerza.
Elizabeth tenía los ojos acuosos, y tenía las manos en la boca
- Te he echado mucho de menos Court...- Respondió ella emocionada.
Logan se quedo parado en frente de nosotras, me miró, y luego miró a Elizabeth.
- Dios Mío - Dijo Logan sonriendo, seguidamente le dio un abrazo a Elizabeth.
- ¿ Y dime Liz, cómo estás ahora? Después de tanto tiempo separadas, me tendrás que poner al día - Dije sentándome en la butaca con Logan a mi lado.
Elizabeth miró al suelo y se frotó las manos
- Bueno... Trabajo de camarera como bien sabes - Rió
- Y vive en Whinterlious - Argumentó Logan
- Si... comparto piso con un chico muy majo que se pasa el día frente al ordenador encerrado en su habitación, así que es como vivir sola. A parte, no hago mas que ir del trabajo a casa y de casa al trabajo. Llevo solo tres semanas aquí y no me ha dado tiempo ni de mirar tiendas.- Explicó ella.
Elizabeth suspiró y se sentó en el sofá, delante de donde estábamos sentados Logan y yo.
- ¿Así que... todo bien? - Pregunté
- Bueno, digamos que estoy estable. Es mejor que vivir en Italia con el pesado de mi padre...- Dijo
- ¿ Y tu madre ? - Preguntó Logan
Miré con los ojos muy abiertos y con el ceño fruncido a Logan, dándole con mi codo en su brazo.
- Mi madre falleció cuando era pequeña, por eso mi padre y yo vinimos a vivir aquí - Dijo Elizabeth mirando hacia abajo
Yo miré a Logan y suspiré...
- ¿ Y a vosotros, cómo os va ? - Preguntó ella
Logan me miró, se rascó la nuca y hizo un suspiro.
- Bien. - Respondí seca. Él sonrió y me puso su mano en mi pierna
- Liz, discúlpanos un momento, vamos a la cocina y en tres minutos estamos aquí- Dijo Logan levantándose, y yo juntamente con él. Liz asintió y sonrió.
Le seguí hasta la cocina, cerré la puerta corrediza y levanté las cejas.
- ¿Así que bien?- Dijo él
- No del todo. Elizabeth es mi mejor amiga desde siempre, necesito tiempo para contarle todo lo que ha pasado entre nosotros...-
- Entonces, le contarás lo que pasó el otro día, ¿verdad? - Dijo Logan
- Es posible...- Mire hacia abajo y suspiré
Logan me cogió las muñecas y los sus ojos se empezaban a humedecer
- Courtney, te juro que fue un malentendido, tu eres la chica a la que quiero, he pasado mi vida a tu lado y eres parte de mí, eso no significó nada.- Explicó Logan
- ¿Y si no significó nada, porqué lo hiciste? - Pregunté enfadada
- Fue un malentendido. Sarah y yo nos conocemos desde pequeños, perdimos el contacto y fue ella quién se encontró conmigo, por eso me vi con ella.- Explicó Logan
- ¿ Y por eso te besaste con ella ? - Pregunté

ELIZABETH
Court y Logan estaban en la cocina. ¿Cómo no podía haber caído antes en saber quién eran? A Logan lo conozco desde hace más poco, antes de volver a Italia recuerdos haber pasado ratos con él y Courtney. Pero mi mente es borrosa y aún no recuerda muy bien el porqué mis memorias parecen tan abstractas. Será que tengo mala memoria.
Después de estar un rato sentada en el sofá, con las manos apoyadas en mi cara, decidí levantarme e investigar.
El salón era muy acogedor, los tapices color granate y la madera oscura adornaban el salón, con cortinas largas y muchas estanterías llenas de libros.... Caminando lentamente, me fijé en los polaroids colgadas en las estanterías con pequeñas cuerdas de adorno, en la primera foto, se veía a Logan de Quarterback, supongo que en el instituto hacía deporte. En la segunda foto, se veía a Courtney mirando vinilos en una tienda de música, y en la tercera, pude reconocer a la madre de Court, Karen, leyendo en la butaca del salón con Candelo tumbado en sus pies.
Reí al recordar todos los momentos juntas, pero al minuto, mi sonrisa se borró del rostro y recordé porqué volví a Italia con mi familia. No me encontraba bien, y mi cabeza empezó a dar vueltas, así que decidí ir a por Courtney y Logan. Investigué hasta que supe llegar a la cocina, de lejos se oían gritos, y la puerta corredera estaba cerrada.
Abrí cuidadosamente, y ambos se callaron de golpe cuando abrí la puerta.
- Siento interrumpir, pero me encontraba mal y creo que quizás estaría bien volver a casa...- Dije
Courtney asintió, y sin mirar a Logan se dirigió hacia mi y fuimos al salón.
- Liz, siento el panorama de la cocina, pero es una situación delicada, voy a buscar la moto, esta a al lado de casa, y de paso dile a Logan que te de un cargador de móvil, así puedes tener un poco de batería.- Explicó ella mientras se dirigía a la puerta de entrada
Yo asentí, cogí mi mochila negra vieja llena de parches de bandas, y fui a ver a Logan. Logan estaba sentado en el suelo, con las piernas cruzadas y apoyado en la encimera isla.
- Ey, ¿Todo bien?- Le dije tocándole el hombro
El asintió y se frotó los ojos.
- Court ha ido a por la moto, así me puede llevar a casa, me ha dicho que me des un cargador pero creo que me voy a sentar a tu lado a consolarte.- Le dije
El rió, seguía mirando hacia abajo.
- Cometí un gran error, y no estamos bien desde ello, lo hablamos pero ella siempre acaba histérica, y yo triste por la semejante tontería que hice...- Explicó Logan
- Seguro que no es tan grave...- Intenté consolar
- Me enrollé con una amiga mía de la infancia, hace tiempo que no nos veíamos y nos encontramos hace unos meses, entonces quedamos y...-
Logan paró, se puso a llorar
- Yo quiero a Courtney pero es incapaz de perdonarme- Dijo él sollozando
- Estoy segura de que va a salir bien, conozco a Court, y es dura porque no quiere hacerse daño a si misma, la verdad, ser infiel es algo muy feo y más cuando llevas toda la vida con Courtney... ¿Cuántos años por cierto?- Dije curiosa
- 8 años... Toda la adolescencia básicamente- Dijo él, ahora mirándome a los ojos.

COURTNEY
Abrí la puerta de entrada, ahora con el casco de moto en mano
- Elizabeth, te espero fuera, date prisa- Grité desde el recibidor. Oí los pasos de Elizabeth desde la cocina, y junto a ella venía Logan, el tenía los ojos mas cristalinos que de costumbre y el pelo alborotado.
Liz abrazó a Logan y le chocó la mano despidiéndose
- Cuando llegue a casa, os enviaré un mensaje para hacer saber de que estoy sana y salva- Dijo ella sonriendo
Logan nos sonrió y nos despedimos, subimos a mi moto y llevé a casa a Elizabeth.
De camino íbamos cantando nuestros éxitos adolescentes, My Chemical Romance, Nirvana y muchas bandas que cualquier adolescente en su fase emo adoraría.
Aparqué delante del loft de Liz. Me despedí con la mano
- ¡Court espera!- Me dijo Elizabeth cuando me estaba poniendo el casco, lista para volver a casa
- Logan no me dio el cargador porque esta muy triste, se puso a llorar después de que hablaseis en la cocina, esta muy mal Courtney - Explicó ella.
Yo aún estaba enfadada por lo que pasó con Sarah, pero aún no me podía creer que en 8 años me haya sido infiel, yo nunca le haría algo así, porque sé que es la persona con la cual quiero estar. No estoy segura de nuestra relación ahora mismo, siempre me pongo nerviosa cuando hablamos del tema. A veces tenemos buenos momentos y nos sentamos en el sofá a leer, o toco la guitarra mientras el me toma polaroids, esos momentos son los que de verdad me doy cuenta que quiero estar con Logan a mi lado, pero no estoy tan segura de si él siente lo mismo.
- No quiero hablar de ello Elizabeth- Respondí
- ¿No ves que te estas mintiendo? Olvídalo ya, el está por los suelos y no sirve de nada estar enfadados, buen rollito, non violence- Dijo ella
Asentí mirando hacia abajo, arranqué la moto y me fui a casa.
Una vez llegué y saludé a Candelo, fui a por Logan. No estaba en la planta inferior, así que subí las escaleras pero tampoco estaba en nuestra habitación, así que mire en la terraza que hay al lado de nuestra cama.
Ahí estaba, Logan mirando al horizonte, con los brazos apoyados al balcón y un cigarrillo en la mano.
Me acerqué a él
él se giró
nos quedamos quietos, parados en el uno frente a otro con el atardecer de St Pauls de fondo.
Y solo lo abracé, lo besé, y cerré los ojos mientras el me tocaba el pelo.