Historias cortas❤️

Amor prohibido

Ella caminaba por la calle, apurada y bofeada, no podía creer que su carro se tuviera que descomponer de la nada, justo en un día de examen, tenia que apurarse pues ese examen contaba más de la mitad de su calificación y no quería tener que repetir el mismo examen en vacaciones.
Tras haber pensado unos minutos se subió al primer autobús que encontró, para su mala suerte había demasiada gente dentro, ella pese a lo incómoda que se sentía subirse así a un trasporte, decidió firmemente proseguir, aunque tuviera que viajar algo incómoda.

Era una tortura para ella pues debido al atuendo que tenía, el cual consistía en una falda pegada que hacía resaltar su cintura y una blusa algo escotada, hacia que los señores que viajaban dentro no dejaran de mirarla, se sentía acosada, y hasta cierto punto intimidada.

Cuando por fin decidió bajarse pues ya había llegado a su destino, entre toda la gente que quería bajar tropezó, callendo sin previo aviso hacia fuera.

Afortunadamente un joven al ver que iba a caer, logró atraparla entre sus brazos, negando el impacto que hiba a producir su caída.

- ¿Te encuentras bien?-. Preguntó el joven rubio con una sonrisa en su rostro. - Parece que es mi día de suerte, no siempre caen del cielo mujeres hermosas justo en mis brazos-. Bromeó aquel muchacho.

Ella afortunadamente no se golpeó, y estaba agradecida, quiso darle las gracias pero al verlo a los ojos, se perdió en la inmensa profundidad de ellos, pues sus ojos azules la habían cautivado, sumandole esa hermosa sonrisa la cual denotaba su seguridad.
Solo termino diciendo entrecortadamente:

- Gracias.. Muchas gracias, me has salvado emm...

- Alex, me llamo Alex, ¿y tu?-. Preguntó sin dejar de sonreír.

- Me llamo Leina, mucho gusto Alex.

Ella no podía dejar de mirarlo, sus ojos la habían cautivado, y se había robado su total atención, ni si quiera recordaba el examen al cual porcierto llegaría tarde, desde que cruzaron miradas solamente en sus ojos existían ellos, nada más ellos.

Finalmente ella comentó.

- Podrías bajarme un momento -. Contesto algo apenada, pues desde hace un rato que el la tenía cargando y debido a la distracción de el y sus hermosos ojos no se había percatado de ello.

- ohh, si, perdona-. Respondió bajandola con delicadeza.

En ese momento no sólo sus miradas se entrelazaron si no sus corazones también, pues apesar de apenas a verse conocido, ellos sabía que no sólo era un encuentro casual, pues entre ellos nacía un amor a primera vista.

Ella llego barrida al examen, toda cansada, pero con una sonrisa en su rostro, "se llamaba Alex, que hermosos ojos", era en lo único que ella pensaba.

La llegada del profesor al salon la saco de su transe amoroso, y trato de concentrarse en el examen, aunque por mas que lo intentaba, por su mente de pronto aparecía la sonrisa de aquel joven, esa hermosa sonrisa que logró cautivarla.

Pasada una hora, todos los compañeros y ella misma, soltaron los lápices y dieron suspiros ahogados, el examen había terminado.

- ¿Como te fue?-. Pregunto Daniel un amigo de ella, mientras entraba al salon de ella.

- Pues... si creo pasarlo, no pude concentrarme muy bien -. Respondió con una apenas pequeña sonrisa.

Daniel se percató de ello y se le hizo extraño, pues ella era bien estudiosa y en cuanto exámenes se trataba siempre se exigía demasiado y la concentración era lo que mas tenía.