Va a ser una semana desde que se fueron, y ya no recibo msj de ellos, deben de estar distendiendose. Me entra una llamada mientras me ducho, la ignoro la veré después, tardó un poco más de la cuenta, me visto y salgo a la calle, estoy a una cuadra de casa, cuando vuelve a sonar mi teléfono, lo atiendo distraída mientras miro una vidriera.
* Steel, quien habla?- mi voz es monótona.
* Soy Christian, como andas?- y ahora que quiere!!
* Christian, bien y tú?- trato de sonar casual más que molesta.
* Muy bien gracias, me preguntaba si quisieras venir a mi casa?- si como no!
* Oh, lo siento, me encuentro indispuesta, no puedo salir de la casa- miento, no quiero verlo.
* No puedes o no quieres?- me suelta
* No, no es que no quiera es que- No termino de hablar cuando lo veo caminando hacia mí, mierda.- Así que estas indispuesta- me mira esperando explicación.
- Yo- no se que decir- es que- nunca me había pasado esto.
- Que pasa Ana, te comieron la lengua los ratones?- Esta molesto, y no lo culpó.
- No.
- Porque me evitas entonces?- No podía decirle que estaba enojada con él por no invitarme a comer con sus padres, no eramos nada.
- Estoy saliendo con alguien!- digo sin pensarlo.
- No es cierto, Elliot me lo hubiera dicho- me contesta arrogante.
- Elliot no sabe nada de mí vida, así que si me disculpas.- Lo esquivo y sigo caminando.
- Ana- me sigue y me jala de brazo- Porque me evitas- en sus ojos puedo ver como trata de leerme- después de esa noche yo pensé- se interrumpe- pero desperté y ya no estabas, ni una nota, nada.
- Christian sueltame, debo irme- lo miro y contengo mis ganas de arrojarme a sus brazos
- He estado manteniendome lejos, lo conseguí porque estaba enojado- me confiesa molesto- pero te vi acá y automáticamente marque tu número- me suelta y pasa sus manos por su cabello frustrado.
- Christian yo- no quiero verlo así, frustrado- perdoname encerio.
- Porque te fuiste? No lo entiendo- me interroga- Tú no lo sentiste acaso?- como se dio cuenta.
- No se de que hablas- digo desentendiendome
- No me mientras en mí cara Ana- dice un poco más fuerte esta vez.
- Acaso eso importa- le tiro enojada- Tú solo querías llevarme a la cama- escupo.
- De donde sacaste eso- me dice impactado por mi arrebato.
- No importa- ya es tarde si no sigo llegare tarde al trabajo- llegare tarde al trabajo.
- Espera que sucedió?- me pregunta mientras me sigue.
- El domingo- suelto, unos minutos pasan hasta que suelta una risa.- Me alegra saber que todavía lo divierto señor Grey.- Ahora si estoy muy enojada, soy una estúpida.
- No Ana espera- me alcanza y me detiene- Estas así porque no te lleve a conocer a mis padres?- me escanea pero no le contestó- recién estamos conociéndonos y no me pareció apropiado, sin contar con el echo de que no somos pareja- una arruga se marca en mi frente- oficial me refiero- aclara.
- Ya no importa de todos modos- sigo andando.
- Claro que importa, si no fuera por tu amiga no estaríamos hablando de esto- como se atreve.
- Ojo el tono que usas al hablar de Kate- lo fulmino con la mirada.
- Mira, yo no soy como mi hermano, no ando presentandole a mis padres a toda mujer que me tiro, eso se lo dejo a él- a toda mujer que se tira? Ahora si estoy muy cabreada.- mierda, no es lo que quise decir.
- Entonces que es lo que quieres decir Christian?- le grito, no puedo ocultar mi rabia.
- Me gustas okey?- se rasca la cabeza exasperado- soy un maldito multimillonario, puedo tener a la mujer que quiera, y estoy correteando tras de tí, es que acaso no te das cuenta?- me mira incrédulo.
- Tienes razón lo siento- contesto mientras empiezo a caminar nuevamente.
- Eso que significa?- me pregunta mientras camina conmigo.
- Estoy actuando como una loca, lo lamento- estoy tan avergonzada.Caminamos unas cuadras más, Christian esta sumido en sus pensamientos. Ni siquiera me mira. Cuando llegamos le digo adiós con una mano, pero el me para y me aleja de la puerta.
- Dime que no significó nada para tí!- Su mirada me penetra- dime que no lo sentiste!- apartó mi mirada y él toma mi cara, la acaricia y no puedo evitar cerrar los ojos- Ana...
- Que me estas haciendo- es lo único que contesto.
- Lo mismo digo!- me contesta con una sonrisa.
- Debo entrar! - Le digo abriendo mis ojos, él se acerca y deposita un suave beso en mis labios, que me hace suspirar, deseo a este hombre con locura, no sólo carnal, sexual, este hombre me llena de algo más, me desarma con solo tocarme, y esa sensación extraña vuelve a florecer en mí.
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Anastasia Steele
FanfictionAna empieza su vida en seattle, pero no todo lo que a esperado se realizará como ella cree, llevándola por caminos oscuros, conociendo a personas nuevas y afianzando las viejas.