Anastasia Steele

Capítulo 17

Comemos en silencio, cuando terminamos dejamos todo ahí y volvemos a la habitación, Christian sigue sin decir nada, entonces tendré que ser yo.

- Que fue todo eso Christian? Porque hiciste eso?
- Necesitaba sacar el dolor- me dice mirando por la ventana.
- Asustarte a todos era necesario?
- Ellos trabajan para mí Anastasia, no tienen que mirar ni hacer preguntas! Como querías que lo tomará?- gira y me mira.
- No lo se, pero no así. Tu no eres así!
- Tú me volviste esto.
- Es por eso que no es bueno ni sano que estemos juntos- Camina hacia mí.
- No, no quiero que te alejes de mí, desde que te conocí vi en ti algo que necesitaba, que nunca lo encontré en nadie y me a vuelto un maldito loco- se para delante de mí y entrelaza nuestras manos- pero no quiero que esa parte se valla ahora.
- Escuchas lo que dices, vivimos discutiendo, peleando no es sano, no podemos llevar una relación así.
- Somos el uno para el otro Ana, con toda esta locura atrás, no cambiaría nada con tal que tu permanezcas en mi vida, por favor no me dejes, eso acabaría por matarme por favor, te amo tanto nena que duele.

Solo lo quede mirando sin contestar, así me sentía por dentro la noche que me fui, él es mi otra mitad la parte que falta, desde la primera vez que nos separamos sentí ese dolor inexplicable que me calaba por dentro desde el poco tiempo de conocernos, es difícil, no se como haremos pero verlo como lo vi, no puedo alejarme de nuevo, no quiero verlo así otra vez. Me acerco a él más y acarició su cara, dejando besos por su rostro el me atrapa por la cintura y cierra los ojos suspirando, besos sus labios y me devuelve el beso, seguimos así unos minutos sin apresurar nada, paro apoyando mi cabeza en el hueco de su hombro y suspiro, él besa mí hombro mientras mete sus manos debajo de mi remera, no lo detengo, acaricia mi espalda y besa mí cuello dejando un camino de pequeños mordisco agarra mí mentón con una mano y me besa, roza su lengua con la mía y se aprieta más a mí, camina de espaldas chocando con la cama y haciéndonos caer sobre ella, eso me hace reír y el me sonríe, nos miramos unos momentos como dos tontos sonriendo, agarro su cara con mis dos manos y beso esos hermosos labios suave pero con decisión.

- Quiero hacerte el amor!- me dice entre nuestras bocas.
- Pensé que eso hacíamos- le contestó con una sonrisa.
- No puedo si seguimos vestidos- ríe.
- Yo me encargo.

Me levanto y le desprendo el pantalón bajando todo pantalón, calzones,medias lo dejo desnudo de la cintura para bajo, después me siento a orcajadas sobre él y empiezo a desabotonar su camisa él me mira apoyando sus manos en mis caderas, terminó y se la saco tirándola al piso con las otras cosas, me levanto y empiezo a sacarme la ropa él se levanta un poco apoyando su peso en los antebrazos y me mira pero cuando sólo me queda la ropa interior me atrae a él con una mano y quedo parada entre sus piernas el besa mí estómago y baja mis bragas al mismo tiempo, sigue besando y bajando hasta mi sexo, pasando su lengua una y otra vez, me apoyo en sus hombros y tiro mi cabeza hacia atrás, él sigue mientras desliza dos dedos dentro de mí haciendo círculos con su otra mano desprende mi sujetador y pasa su mano por mis pechos lo dejo caer al piso mientras el retira sus dedos y me hace sentar sobre él nos subimos más a la cama y lo acuesto, él me mira a los ojos mientras lentamente lo introdusco dentro de mí, tan al fondo como puedo, me muevo despacio de arriba a bajo inclinando mi pelvis un poco hacia delante y atrás,  lo hago tan lentamente que siento como mi orgasmo llega mas rápido, Christian masajea mis pechos mientras gimotea bajo de mí.

- Por favor nena- me dice apretandome las caderas con sus manos- muévete más rápido.
- Quiero que me sientas toda- digo jadeando.
- O dios! No puedo más Ana por favor!

Se sienta y mete mi pecho en su boca lo besa y muerde fuerte haciéndome gemir más fuerte y acelerar el ritmo, se acuesta de nuevo y me agarra los pesones los retuerce entre sus dedos y pellizca siento como me quema más y más él cuerpo, me muevo más rápido sobre él llevándolo más profundo puedo sentir como estoy viniendome, Christian toca mi sexo haciendo círculos y me hace gritar y tiemblo al terminar él me voltea todavía dentro de mi me embiste una vez más y acaba mordiendo mi cuello. Nos quedamos así recuperandonos un tiempo largo, hasta que sale de mí y se acuesta y nos tapa con las sábanas, cierro mis ojos y caigo rendida.