Cartas para un amor que no me merece

Como olvidar

Es gracioso como las cosas pasan, como el tiempo nos engaña o como nuestra arrogancia nos hacer creer que tenemos todo el momento para nosotros.

Es el motivo por el cual nos negamos muchas veces a soltar el recuerdo, el momento. Nos aferramos a esa escena única en nuestra memoria y como una película la ponemos y volvemos a poner. Muchas veces cuando está fresca podemos recordar el aroma de la habitación, de la grama, de la piel. Otras veces, casi podemos volver a sentir la textura de cada textil, del cabello, de ese cuerpo. Por último, podemos jurar que estamos viendo cada detalle, hasta que poco a poco los años empañen la misma. Absolutamente todos esos sentidos se desvanecen en nuestra memoria, pero tengo certeza que mi alma recuerda. Para bien o para mal, tiene su mente propia y esta se mueve por los sentimientos. Fusionados temporalmente por los recuerdos en una tregua fatula de trascender el tiempo. Uno se desvanece lentamente, el otro se queda y se trasforma para sobrevivir. La tristeza a ira, la ira a la Paz; el amor a una completa devastación, esa devastación a una leve esperanza.

Seguiré, suspendida en este aire de incertidumbre, inmóvil, incapaz de seguir, atrapada en el tiempo. En lo que mi mente olvida cada detalle y mi corazón trasforme esta tristeza, ira, amor y hasta que de mi cuerpo se vaya todo rastro de adicción de lo que fue una pasión. Por que no importa cuantas veces cierre mis ojos; es a ti a quien veo.