Cap. 4

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Como sea — Respondió.

Y, como en toda historia de mierda, las luces se fueron.... ¡A LA PUTA!

Mikaela, quien buscaba una linterna, ni sabía ubicarse en su propia casa, y por ende, acabó tropezándose y cayendo en la tina junto a Yuu.

Uh... — Fue lo único que pronunció el rubio.

¡NO ME TOQUES! — Gritó, cubriéndose con sus brazos.

¿Cómo sé que estaba haciendo eso si estaba oscuro? Flores, las flores son las culpables.

Y-Yuu-chan, cálmate — Apoyó sus manos en los hombros de éste, buscando generar confianza.

Por arte de magia, las luces regresaron a la normalidad, dejando ver a un avergonzado Yūichirō y a un Mikaela to' guapo con la camisa mojada.

— Iré a cambiarme... ¿Puedes bañarte solo? — Consultó, saliendo de allí.

S-sí, d-déjame en paz — Bajó su mirada, encontrándose con su rival, la esponja.

El rubio simplemente continuó con lo suyo.

"Yuu-chan es realmente lindo..." sonrió de manera leve por su pensamiento.

......................

¿Hoy fueron más o menos drogas? No sé. :3333

Flores de drogas; MikaYuu.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora