Hermanastros En Campamento

0. Peleas, Gorda y Campamento.

—¿Por nuestra hermosa familia? —pregunto la mujer levantando su copa de vino en el aire mirando a los demás integrantes de la mesa.   

—Por nuestra familia. —afirmó y concordó el hombre y ambos chocaron sus copas y bebieron de ellas.

Parecía ser una hermosa velada, las estrellas brillaban, la música de piano adornaba el restaurante, todo era perfecto. La familia Palmer y Grason se uniría volviéndose una sola, nada podía parecer arruinar esa noche... Nada excepto....

—¡CÁLLATE QUE TE APESTA LA BOCA!!

—¡NO HASTA QUE DEJES DE PATEARME ESTÚPIDO!!

—¡¡ESTÚPIDA TU!!

—¿Es lo mejor que tienes para decirme neandertal? —lo desafía la castaña, poniendo ambas manos en su cintura en una pose de reto.

—Mirenme todos, soy Lana Palmer —fingió la voz de la chica mientras hacia el movimiento de manos de jazz— me creo superior a todos por que se palabras científicas, jijiji, soy una engreída sin remedio que solo busca atención.

—¡DATE POR MUERTO, GRASON!

De un momento a otro el restaurante se había convertido en un campo de guerra de comida, Lana tomo su espagueti arrojándolo directamente a Ethan cayendo en su cabeza. Los padres de ambos no podían hacer nada más que hundirse en sus asientos.

—Que lindo, tienes una hermosa cabellera rubia —para aumentar la burla, Lana tomo su celular y le tomo una foto al chico con el espagueti en su cabeza y parte de su hombro— veremos cuantos likes consigues, idiota —sonrió victoriosa-.

—¡ESTO NO SE QUEDARA ASÍ! —gritó Ethan levantándose de su silla y tomando sus ravioles para lanzarlo a su blanco que es Lana.

La suerte de Ethan no fue precisamente buena, o el era muy estúpido predecible y Lana muy lista, con solo un paso Lana estaba lejos de la trayectoria de los ravioles. 

—Lanzas como nena —se burló sonriente.

—¡SOY UNA NENA!...—grito sin pensar y al reconocer lo que había dicho, se quedo callado, mirando hacia todas partes comprobando si nadie lo había escuchado, pero era obvia la respuesta, ya que medio restaurante los miraba.

Los ravioles cayeron en una mujer elegante y regordeta, tanto que al levantarse para ver quien lanzo la comida se trabo en la silla, se golpeo con la mesa, y sus mejillas rebotaban frente a su cara como pelotas.

—¡AAAHHHH!! JABBA DE STAR WARS —grito Ethan ocultándose detrás de su mamá— ALÉJATE MONSTRUO.

—MALDITO MOCOSO —grito la gorda... mujer, si es que a eso se le puede llamar siquiera...humano.

—Uuuu —exclamo Lana— Miss Piggy te regaño idiota.

Justo cuando Lana creyó haber ganado, sintió un gran frió recorrer su cuerpo desde su cabeza, la gorda había derramado su bebida sobre ella, y para mejorar todo, tenia hielos y uno entro por su blusa, y de ahí, bueno, Lana hubiera deseado jamás haberse puesto aquel sostén.

—¡¡¿Y A MI POR QUE ME MOJA LOCA?!! —grita Lana, girándose a la mujer, puede que fuera mala idea tenerla de frente.

—¡YO NO ESTOY LOCA!

—No,—dice Lana, en un tono en el que parecería como si estuviera ironizando— usted es una gorda demente chiflada. 

La gor... Mujer tomo uno de sus pasteles, si, tenia mas comida, para lanzarlo a la chica insolente que acababa de insultarla, pero ella se volvió a hacerse a un lado, y como lo imaginaban, este callo en un hombre con traje, el que lanzó mas comida y callo en otra persona, esta lanzo su comida, y así con cada persona.