Lover, I Don't Have To Love

CAPITULO 28

PoV Kurt

Ser crítico de arte nunca había sido una clase de talento que pensaba que tenía pero por alguna razón, habian confiado eni para hacerlo.

Harry era el artista oculto, el de la galería, la pintura que me había encantado por su similitud a mi vida era su obra, justo el día que lo conocí, y que Dave apareció después de años de no saber nada de él

Después de ver sus obras decidí irme a casa a descansar, y eso era lo que estaba haciendo durante un gran rato, estando sólo mi persona, un plato vacío a un lado mío y el televisor frente a mi, no deseaba que mi mente se pusiera a recordar el beso que Blaine me dio antes de irme de su oficina ni nada relacionado a él.

Pero recordé cada cosa, su tacto al tocarme, sus labios marcando el ritmo entre nosotros, su mano sobre mi mejilla y aquel sabor de sus labios, una combinación entre café y esperanza.

Abrí los ojos y trate de centrar mi mente en la televisión, pero fue difícil una vez que escuche el vibrador de mi celular activarse, me levanté para sacarlo de mi mochila y me di cuenta que habían varias llamadas perdidas de la persona que estaba pensando

Cuando vi que de nuevo su número aparecía en la pantalla decidi responder

-¿Ho....¿Hola?- respondí

-Kuuuurt- ¿Acaso estaba tomado?

-¿Blaine?-

-No quería dañarte pero lo hice. Porque soy la peor influencia para ti- dijo en un tono bastante complicado de entender por la música

-¿Donde estás?- cuestioné

-En un bar, algo cerca de la oficina-

Colgó y me debatía entre ir por el o llamarle a Max para que se hiciera cargo de su jefe pero decidí la primera.

Me encontraba esperando un taxi que me llevará al único bar cercano de la oficina para poder encontrarlo, mientras viajaba tenia mi celular en la mano para responder si volvía a llamar

Pagué y baje del taxi, por suerte traia el pase que me habían obsequiado el día del karaoke con britt, así que entre y entre un mar de personas tomando y otro tanto bailando me dispuse a buscarlo

Y como si el destino hubiese querido ponerse de nuevo en contra mía, la canción del karaoke apareció ferozmente invitando a los presentes a bailar pegados los unos a los otros, voltee mi mirada y lo vi.

A su alrededor habían bastantes caballitos vacios, pero me sorprendió ver que había una botella a lado de el pero nadie le acompañaba

-¿Blaine?- dije quitándole la bebida de la mano

El me miró como si nunca me hubiera visto antes, miró su bebida en mi mano y me miró a los ojos, estaba perdido

-Sera mejor que nos vayamos- mencione, sacando su cartera y pidiendo la cuenta, pagué y tome sus llaves para conducir hasta su casa

-No debiste haber venido por mi, ya no tienes ninguna responsabilidad- mencionó mientras caminabamos a la salida

-No creo que le hayas marcado a alguien las para que viniera por ti- lo acomode a un lado de la puerta para que pudiera abrirla y sentarlo

-Te deseo Kurt- dijo mientras intentaba meterlo al asiento -Te deseé desde que mi hermana me contó sobre ti, no sólo te deseé como persona, me gustabas-

Vi algo de sinceridad en su mirada pero debía mantenerme firme en todo, no podía dejar que sucediera lo que ya había pasado

-Dejame llevarte a casa- cerré la puerta y camine hacia el asiento del conductor

-Debes odiarme por haberte corrompido, por haber abusado de ti-

-Ese es el problema Blaine, que no te odio- mencione manteniendo mi mirada fija en la carretera

Después de un viaje de alrededor de 30 minutos, aparque en su entrada, encontré una pequeña tarjeta que abría el portón y entre, todo estaba oscuro, salí del auto para encender las luces y ayudarlo a llegar a su habitación

Estaba algo perdido en sueño pero era fácil de llevar, así que le ayude a acostarse, le quite los zapatos y la chaqueta, baje de nuevo para activar la cafetera, subí y lo vi dormido y aunque aún estaba latente todo lo que siento por el me resigne a tratarlo como un simple amigo

Lo desperté cuando regrese a la habitación con un café cargado y un par de aspirinas

-¿Cómo te sientes?-

-No estaba tan mal- dijo en tono bajo

-Bebe el café y vuelve a dormir, eso te ayudará para que no te sientas tan mal por la mañana-

Me disponía a irme, ya no tenía nada más que hacer ahí, ya lo había ayudado en lo que podía

-¿Podrias quedarte?-

A pesar de que estaba dándole la espalda, me congele en mi lugar ya que no sabía q ue podría responder ¿Queria quedarme? ¿Seria buena idea? ¿Realmente era necesario que lo hiciera? ¿Deseaba hacerlo?

-Si me quedó ¿Qué podría pasar?- mencione

-Solo, no quiero quedarme solo- dijo

Me senté de nuevo en la cama, y me limite a observarlo, durante ese momento no eramos mas que simples personas viéndonos la una a la otra, sin intentar un contacto más allá de la mirada, solamente existíamos, y existía el momento.