Eres Tú. |KuroTsuki|

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6 meses y 1 día.

Tenía claro que contar los días que llevaban separados le hacia mal para su corazón roto. Sabía que aquello no calmaría sus lágrimas cristalinas que solían salir 4 veces al mes.

Extrañaba a Kuroo Tetsuro, lo sabía y admitía. Lo amaba, pero sabía que tenía que seguir adelante, tenía que olvidarlo como él lo había hecho y se lo había dejado muy claro el 4 de septiembre.

Siente como sus ojos se llenan de lágrimas al recordarlo, pero se olvida de él cuando Yamaguchi entra en su cuarto.

- Hey! Tsukki - A veces Kei piensa que Yamaguchi debería aprender a leer la atmósfera, a él no le molestaría para nada. 

- ¿Si? - dice limpiándose con cautela unas pequeñas lágrimas que se atrevieron a salir.

- ¿Podemos cancelar nuestros planes? - y ahí estaba, haciendo una petición con su maldita sonrisa que después de años de amistad, Tsukki no se resiste a ella.

- Okey - dice suspirando y poniéndose de pie - pero solo porque es un gran paso que estas dando con Yachi.

- ¿Co-como sabes que voy a salir con Yachi - kun? - y ahí estaba, su notorio sonrojo.

- Somos amigos ¿no? - yamaguchi asiente con una gran sonrisa.

- entonces...¡Adiós Tsukki! - se despide de el con un beso a la mejilla, que luego Tsukki, como de costumbre, lo limpia con una mueca de asco a lo que Yamaguchi sólo ríe.

Después de tanto había aprendido a apreciar su gran amistad, aunque siempre lo hubiera hecho, sabía que ahora debía mostrarlo con palabras y gestos. Aunque Yamaguchi todavía le costaba captar cuando algo andaba mal con su amigo.
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Odiaba que Yamaguchi cancelara sus planes a última hora, y en especial en estos momentos. Pero nada podía hacer, sabía que su amigo por fin se había atrevido a confesar sus sentimientos a la ex- manager de Karasuno y ella los había aceptado, y unas cuantas salidas - programadas a últimas horas - ayudarían un poco a mantener su relación un poco más estrecha.

Se sentía fatal, sabía que un día de películas con Yamaguchi iba a calmar este mal estar que a estado sintiendo la última semana, pero nunca nada le sale como quiere...Y cuando comienza a sonar su teléfono se da cuenta que la vida siempre va en su contra. Tetsuro lo estaba llamando y a pesar de no tener su número guardado, lo recordaba a la perfección. Y contesto, sin pensarlo dos veces presiono el botón verde, porque lo necesitaba, lo extrañaba y lo quería a su lado. 

-Ku...- noto lo desesperado que sonó y simplemente se quedo callado sin tener el valor para sacar las últimas letras de aquel nombre que tanto le gustaba mencionar hace 6 meses atrás.

-Tsukki.

Estaba al otro lado de la línea, y eso lo hizo sentir feliz pero a la vez sentía estúpido y dolido, estaba hablando con el chico que rompió su corazón luego de 6 meses y un día, pero a pesar de todo igualmente se sentía nervioso y deseoso de volver a verlo.

- Necesitó verte, de verdad yo...

A Tsukishima le enojo un poco que comenzara a rogarle enseguida, no hubo una pausa o un pequeño saludo, simplemente nada, solo palabras desesperada que salían a tropezones de su boca. Y luego entendió, del gran error que estaba cometiendo, le había contestado a Tetsuro como un desesperado y eso estaba mal.

A pesar del maldito testamento que le estaba diciendo a través del llamado telefónico, no podía dejar de pensar que cometió un gran error y entonces corto, dejando al ex- capitán de Nekoma con sus disculpa incompleta, al igual que el recorrido de la osada lágrimas que abrupta mente había sido cortada por la palma de su mano.