El chico nuevo

Capítulo 8

Capítulo 8...

―estás loco ¿De verdad eso te dijo?

―te lo juro, Kazemaru―se llevó las manos a la cabeza―si prácticamente el tipo me amenazó, por eso te lo estoy contando porque necesito ayuda, eres el más cuerdo, no se lo puedo contar a Midorikawa

― ¿Qué no le puedes contar a Midorikawa? ―interrumpía el castaño entrando al salón

―nada importante, Endo―le sonrió Kazemaru― ¿Por qué no me esperas afuera? No me tardaré mucho

―de acuerdo―devolvió la sonrisa

―bien, entonces ¿Qué harás? ―preguntó el peli azul una vez que el otro abandonó el lugar

―no lo sé, pero alejarme de Fubuki no es una opción, necesito que vea la clase de tipo que es Afuro

―y según tú ¿Qué clase de tipo es? ―se recargó en la pared

―yo que sé, malo y eso es lo único que importa

―te creo pero la cosa es que no todos lo harán, Fubuki no te escuchará si no tienes pruebas ¿Entiendes? Ellos dos se llevan muy bien y aunque te quiere no sé si decirle en este momento ayude de alguna manera―suspiró―tal vez si le vas diciendo poco a poco puedas hacerlo

¿Cómo hacerlo? A simple vista el rubio parecía la mejor persona que pudieras conocer, no iba a caer tan rápido en una trampa pero si se quedaba sin hacer nada sería el fin para su relación con el peli plata, bueno...quizá esa no sea la mejor manera de expresarlo.

―entonces ya no han hablado nada sobre el tema ¿No? ―dijo Ryuuji ya de camino a casa, el que no hubiera pasado nada más entre ellos era un poco extraño

―supongo que no hemos tenido el tiempo para hacerlo pero aun con eso nos vimos hace un par de días― respondió Fubuki mientras caminaban

―es raro que Goenji no lo haya vuelto a mencionar, quizá ya considere que son pareja ¿No crees?

―puede que sí―sonrió el peli plata―pero no sé, llegar y darle un beso se vería bastante extraño

―de una manera u otra te quitarías de dudas ¿No? Ustedes ya salen, no es raro que tú hagas eso

―puede que tengas razón, Midorikawa, pero ¿Y si no?

―Goenji puede ser lo que quieras pero nunca tendría una relación a escondidas, no es por molestarte pero aunque sea una aventura él lo ha dado a conocer así que no creo que ese sea un problema

―entonces considera que voy a pensarlo pero si algo sale mal tú tendrás la culpa

Aquella acción le había dejado sin palabras, le había costado corresponder pero por fin lo hizo, no entendía el porqué de su comportamiento pero sin duda alguna le alegraba aunque el hecho de que el rubio estuviera frente a ellos viendo tal escena le preocupaba bastante.

―Vaya, no sabía que ustedes salían―comentó el rubio un poco después de tal beso―me alegra mucho por ustedes, hacen una linda pareja

Parecía un comentario muy sincero, quizá aceptaría una derrota por la buena, eso parecía, incluso de un momento a otro se había convertido en uno más de sus amigos pero era raro pensar en ello de esa manera ya que después de todo aún desconfiaba aunque sea muy poco.

―nos vemos luego―se despedía el rubio después de clases―recuerden que mañana a las ocho hay fiesta en mi casa así que los espero ¿De acuerdo?

¿Cuánto tiempo había pasado? Digamos que lo suficiente como para el moreno dejara por un momento de desconfiar del chico que hasta el momento se había portado más que bien, no fue muy difícil aceptar aquella invitación, no era la primera vez que lo hacía después de todo.

― ¿Hola? Afuro ¿Eres tú?

―claro que soy yo no seas idiota, lee la pantalla de tu celular

―vale ya, no me regañes y dime mejor que quieres porque estoy un poco ocupado―decía aquella voz por el teléfono móvil

―te quiero aquí mañana junto con tu amigo

― ¿Mi amigo? ¿Te refieres a..?

―si, a ese, también necesito que traigas a cualquiera de tus "amigas", la más guapa si se puede, te necesito puntual, a las siete en mi casa, ya sabes cómo llegar, tengo un plan y necesito de su ayuda

―vaya, el viejo Terumi por fin se hace presente, pensé que ya te habías olvidado de nosotros, no te preocupes que estaremos por allá dispuestos a ayudar ¿Seguro que solo quieres que vayamos nosotros tres?

―no es nada peligroso, el tipo es un idiota y no creo que sea necesario, de cualquier manera hemos salido juntos de situaciones peores ¿No lo recuerdas?

― ¡Cómo no recordarlo! ―se rio―si pensé que por eso habías salido de aquí

―no soy un cobarde, vine aquí con una misión y aún no la he olvidado pero no te preocupes, lo que vamos a hacer nos llevará un poco más cerca de nuestro objetivo

―pero no antes de sacar un personal provecho de ello ¿No?

―tú sí que me conoces bien, ahora sabes porque confío en ti

―eso ya lo sé pero ese chico ¿Qué tiene de especial?

―absolutamente nada, solo quiero restregarle en la cara a ese idiota que yo soy el mejor, digamos que será un bonito trofeo y mañana voy a conseguirlo, cuento contigo, adiós.