¡Felices graduados!

Era increíble.

La emoción y los nervios eran palpables en el salón, muchos de los presentes estaban incrédulos por haber logrado graduarse y muchos otros sólo sentían la emoción de empezar por fin una vida universitaria brillante y espléndida, alejados de todos los problemas y de cierto prefecto demonio.

–¡Juudaime! ¿¡Dónde está!?–Los desesperados gritos de Gokudera Hayato llamaron la atención de medio mundo.

Por un momento el shock los atacó, ¿En serio dame-tsuna también había logrado graduarse? Era algo totalmente sorpresivo.

–Tsuna debe de estar ocupado, debes aprender a dejarlo solo de vez en cuando, Hayato–La estrella del béisbol de namimori hizo el intento de calmar a su pareja, cabe destacar que falló.

Una mirada soñadora se hizo presente en los rostros de la población femenina, Yamamoto Takeshi siempre sería un amor prohibido para todas ellas, al igual que Gokudera, si lo pensaban un poco ¿Por qué esos dos chicos tan guapos y populares mostraban tanto respeto hacía el dame de la escuela?

–Go-Gokudera-san, Ya-Yamamoto-san, boss me pidió que le dejasen a solas por un momento–La segunda flor de nami-chū miró con nerviosismo a sus compañeros en un intento por calmar la unilateral discusión, también falló.

Fue turno de la población masculina de suspirar anhelantes, después de Sasagawa Kyoko, Dokuro Chrome era la chica más tierna del instituto y la más deseada, sin embargo era casi imposible acercarse a ella, sobre todo después de que la chica se enterase sobre la manera en que trataban a su preciado boss antes de la llegada del italiano obseso de las bombas.

–¡Esto es extremo! ¡Acabo de ver a Sawada conversando con Varia!–La repentina aparición de un senpai y aficionado al boxeo no sorprendió demasiado a los estudiantes, pero los dejó medio sordos.

A estudiantes como Osamu o Mochida les era difícil entender por qué la flor de su instituto formó amistad con un perdedor como Tsuna, era gracias a esa extraña amistad que el chico podía hablar tranquilamente con el mejor boxeador de namimori.

–Kufufufu~, son tan ruidosos, si alondra-kun estuviera aquí de seguro ya los habría mordido antes de buscarme pelea–La repentina aparición de un graduado de Kokuyo tensó a los futuros graduados, y molestó a Gokudera.

A pesar de que las cosas entre el instituto de la ciudad vecina y nami-chū se habían arreglado a ellos aún les costaba aceptar la presencia del hermano de la segunda flor en la ciudad, sin embargo él parecía muy a gusto paseándose por los alrededores y sobre todo cuando cierto castaño estaba cerca.

–¿A quién le llamas alondra-kun, herbívoro piña?–Una tonfa impactó contra uno de los nerviosos estudiantes, quien desafortunadamente quedó entre el fuego cruzado de los mayores.

Uno a uno fueron llegando más personas uniéndose a la discusión del extraño grupo, un sentimiento de inconformidad e intranquilidad invadió a todos los estudiantes, no podían comprender como era posible que toda esa gente estuviera junta sólo por un torpe renacuajo como aquél al que tanto humillaban, ¿Era él tan impresionante? El solo pensamiento era insólito y absurdo, dame-tsuna sólo era dame-tsuna.

–¡Hiii! ¿¡Qué hacen aquí reunidos!? ¡Esto es malo para mi corazón!–La llegada del causante de todo aquél alboroto tranquilizo las discusiones y peleas que se habían formado.

Sawada Tsunayoshi observaba con incredulidad a sus amigos, familiares, tortu-tutores, ex-enemigos pero no amigos y pareja, ¡Él sólo había estado conversando con Xanxus antes de irse al baño! ¿¡Qué demonios había pasado!? Su vida era una completa locura.

–¡Eres un perdedor, dame-tsuna!–Un infante de fedora pateó el rostro del chico.

Mientras el niño regañaba al adolescente y los otros personajes se dedicaban a reír, bufar, suplicar perdón en nombre de Juudaime, alabar la animada familia de Tsuna, entre otras cosas, los estudiantes de nami-chū observaban sin saber qué pensar.

Viéndolo bien, su compañero era increíble por el solo hecho de sobrevivir a toda esa gente, muchos recuerdos nostálgicos se arremolinaron en sus mentes, la mayor parte de ellos tenían que ver con aquel castaño o alguno de los miembros de su excéntrico grupo, sí, dame-tsuna era increíble.
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