La familia Akabane

El paraíso

Hawaii es conocido como un lugar que se considera el paraíso aparte de otros lugares como el Caribe entre otros, en ese lugar muchas cosas pueden nacer.

El amor por ejemplo.

Judai Yuki y Daichi Akabane se encontraban en uno de los restaurantes más elegantes de ese precioso lugar cenando y hablando de cosas triviales.

Ambos disfrutaban la compañía del otro, pero en el fondo Daichi sentía que su compañía era más que sólo agradable era muy familiar.

Judai sabia que si su relación quería que durará para siempre debía hablar con el sobre lo que había hecho por el, aunque en el fondo sabia que el no se acordaba de él.

Con la mayor tranquilidad posible tomo la mano de su amado pelirrojo mientras el lo miraba sonriendo, ambos terminaron su copa de vino y el comenzó a hablar.

Dai quiero hablar contigo de algo -dijo sonriendo levemente-

¿de que Ju? -pregunto sonriendo-

No se si recuerdas a un pobre niño que salvaste hace 12 años -dijo mirandolo serio-

¿eh? ¿lo conociste? -el asintió- me pregunto que habrá sido de él, la última vez que fui al orfanato de Sugino-san me dijeron que lo habían adoptado y se lo llevaron en ese instante a Europa me abría encantado despedirme de él, ahora que lo pienso en todo el tiempo que estuve con el nunca supe su nombre

Es porque nunca lo preguntaste -dijo sonriendo-

Es verdad pero ¿como lo sabes Ju? -Judai tomo su mano-

Porque ese niño....soy yo -en ese momento Daichi lo miro con sorpresa-

¿E..eres tu? -pregunto impactado y Judai asintió sonriendo- No puedo creerlo...¿tu eres ese niño que salve de aquel bar?

Si, tu me salvaste del infierno y me enseñaste que habían personas buenas en el mundo y la primera que conocí fuiste tu -sonrió mas- y sin darme cuenta me enamore de ti por aquellas acciones que hiciste por mi

Y yo me enamore de ti por la cálida sensación que me dabas -dijo mientras le sonreía- era por eso que me sentía tan a gusto contigo Ju era porque...

Nos conocíamos mucho antes de amarnos -ambos se levantaron y fueron a uno de los balcones del restaurante- ¿me amas aun sabiendo quien soy?

Jamás dejaría de amarte Ju y ahora que se esto te amo más que nunca -le dijo abrazandolo por la espalda-

Daichi -Judai se dio la vuelta y tomo tus mejillas con sus manos- gracias -ambos sonrieron y se besaron-

Después terminaron de comer y fueron de vuelta al hotel solo que Daichi tenia otras intenciones no por nada era hijo de Karma Akabane.

Lo tenia todo listo.

Daichi gracias por lo de hoy -le dijo sonriendo-

No es nada Ju siempre procuraré que todos los días sean así -le sonrio mientras Judai trataba de abrir su habitación pero no lo conseguía- ¿pasa algo?

N..no puedo abrirla -dijo tratando de abrir la puerta sin éxito-

Te ayudo -lo apartó un poco e intento abrir la puerta, después de unos intentos se escuchó un crujido- hay...