CAPITULO DOS.
Tyler Tomlinson
Hay personas a las que nunca logras olvidar, no importa cuanto tiempo pases intentándolo.
Al final del día, cuando la noche llega y te tumbas en la cama; con la cabeza sobre la almohada y el cuerpo desecho y entonces tu mente se empieza a despejar; ahí esta, como un constante recordatorio de que el tiempo no sirve para nada; esa persona a la que a pesar de los años no logras olvidar.
Tyler, Tyler Tomlinson era mi pensamiento cada noche. No importaba cuanto tiempo pasara fingiendo ante el que no sentía absolutamente nada o cuanto tiempo me maldijera por ser tan tonta, el seguía en mi cabeza.
Tyler y yo éramos amigos, de la clase que compartes secretos y risas bajo la mesa. Eramos mejores amigos. El era el tipo de chico que de alguna forma lograba cautivar a cualquier chica; misterioso, un tanto cínico, pero simplemente encantador, lo conocí durante el verano de mi cumpleaños numero diez cuando se presento a mi fiesta de cumpleaños junto a un compañero de clase, Joshua.
Desde ese día y hasta el final de la secundaria fuimos inseparables.
—Por favor dime que no te acostaste con ella— farfulle frunciendo el ceño mientras ambos veíamos hacia Derry Trinity la despampanante pelirroja que acaba de llegar a la secundaria para cursar el ultimo año. La chica se pavoneaba junto a sus amigas al fondo del pasillo, consciente de que su nada prudente vestimenta y ademanes capturaban la atención de todo el sector masculino de la secundaria.
Tyler hizo una mueca graciosa y cerro su casillero. No tuvo que decir nada mas, sabia que era esa mirada. Gruñi con desagrado y oprimí mis cuadernos contra el pecho cuando algo en mi interior se retorció.
—Eres repugnante, Tyler... tu... demonios, eres...
—Lo se, lo se— suspiro dramáticamente a la vez que comenzábamos a caminar por el pasillo de la escuela hacia nuestra primera clase de día; Filosofía.
—¿No pudiste buscar a alguien con mas clase?— exclame siguiéndole el paso.
Se limito a reír.—No encontré a alguien mas dispuesta a hacerlo en un baño.
Rodee los ojos.
— ¡Hey! Te esta mirando...
—¿Que? ¿Quien?— mire a ms lados en busca de ese "alguien"
—Daniel, te esta mirando de nuevo ¿Que se traen ustedes dos?
—Nada...
—¿Nada? Así como tu no te traías nada con Joshua.
—Tyler— gruñi con fastidio— ¡Eso fue hace mas de dos años! ¿De acuerdo?
—Si, pero es que aun no puedo creer que te besaras con mi mejor amigo.
—Vale, superalo.
—Es que no puedo— carcajeo haciéndome enfadar.— ¡Dos veces, Gi!l ¿Como pudiste?
—¿Te duele que lo haya hecho?
—Sabes que si— exclamo pasando su brazo por mi hombros y atrayéndome contra su pecho— sabes que cada vez que estas con alguien me rompes el corazón.
—Calla, ya pesado.— bufe y me aparte para golpearle el hombro.
Cosa que no funciono en lo mas absoluto pues el no hizo otra cosa mas que reír. En ese momento cruzamos el macro de la puerta y el bullicio de la clase desordenada nos distrajo.
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A Pesar de Todo
Romance"Por que son ustedes los únicos responsables de amar y dejarse amar, así como son ustedes los únicos responsables de herir y dejarse herir."