Love Reign I

3_ Reflexión

Darius iba a cenar solo. Aun estaba confundido respecto a Jaro. Lo que había sentido cuando lo vio fue lo más raro que le había pasado. El chico era lindo, muy lindo... No comprendía porque pensaba eso. Quizás le recordara a sus otros amores. No había tenido suerte en el amor. Aunque no era virgen, claro. Su padre se encargo de eso antes de desaparecer. Pero llevaba mucho tiempo sin amar a ninguna mujer. Pensó en como se relacionaba Darius con esas mujeres. La homosexualidad era absurda... Pero en ese momento se sentía como si estuviese enamorado de Jaro. Era raro, pero posible. No debía decirle de eso a nadie. Se dio cuenta que realmente se había enamorado de Jaro. Si sigue aquí nunca lo olvidare. Pensó en mandarlo lejos y no volver a verlo, pero una parte de él quería estar con Jaro. Decidió dejar a Jaro. Él era el Rey, y el Rey podía hacer lo que quería. Cloud le trajo la cena. En la cena que se estaba haciendo abajo para honrar a los visitantes servirían sopa de carne de venado, tarta de paloma, panceta ahumada, puré de nabos, huevos fritos, pollo relleno y de postres frutillas a la crema, tarta de crema y chocolate, flan de vainilla y pastel de limón, con vinos excelentes y buena música. Pero la cena de Darius era solo de dos huevos fritos, panceta ahumada, pollo y una porción de pastel de limón. Casi no toco la cena mientras pensaba en Jaro. Tenia que decirle lo que sentía. Pero nadie normal era homosexual, y lo sabia. Estaba terminando de comer cuando Cloud entro.

-Lord Jaro quiere veros.

Cuando entro Jaro el corazón se le aceleró.

-Que haces aquí a esta hora, Jaro?

-Quería hacerle una visita al Rey.

Se acercó a la cama y le dio un cofre mediano de madera con bordes de oro.

-No lo abras hasta más tarde, cuando todos duerman.

Cuando se fue, quedo pensando en el cofre. Varias veces pensó en abrirlo para ver que había dentro, pero resistió el impulso. Cuando llego el momento, se preparo para abrirlo. Salió una serpiente. Se subió a la cama, sorprendido. La serpiente parecía querer atacarlo, pero no salto en ningún momento. Miro el cofre y vio algo brillando. Saco una espada de oro de adentro del cofre, perfecta para el. Pero cuando se dio vuelta, recibió el mordisco de la serpiente en el pie derecho. Consiguió clavarle la espada al reptil, mientras pensaba porque la persona que amaba le dio una espada y una serpiente. Darius se tiro en la cama y se desmayo.