Amar a muerte

Punto de retorno

                                                         Amar a muerte

Thomas Tucker conducía a su casa después de un pesado día de trabajo en la oficina, miraba con indiferencia el paisaje hasta que de lejos vio un grupo de chicos que le resultaron muy familiares, cuando se acercó más pudo ver que en efecto; esos eran los amigos de su hijo y detuvo el auto frente a los muchachos

-buenas noches chicos-

-buenas noches señor Tucker- contesto Clyde seguido de Kevin, Jimmy, Jason y Damien

-¿no está Craig con ustedes?-

-no -contesto el chico al que reconoció como Kevin Stoley- no lo hemos visto en todo el día, nosotros venimos del cine-

-no..no no lo hemos...vis visto desde que...que salimos de vaca...va...-

-no lo hemos visto desde que salimos de vacaciones-contesto rápidamente Damien desesperado por la mala elocuencia de Jimmy- tal vez se fue con una chica y ya-

-¿Craig? ja! pues solo que sea una de las meseras de su trabajo; se la pasa metido en su trabajo- contesto Clyde con inocencia

-entonces...en sus días de descanso ¿no ha estado con ustedes?- pregunto el pelirrojo

-no-contestaron los cinco casi al unísono

-bueno...solo quería saber si estuvo con ustedes, gracias y hasta luego chicos-

Thomas arranco el auto de nuevo ante la atónita mirada de los menores, ahora lo único que quería era que Craig le explicare en donde diablos se metía, cada vez que salía les decía que iría con sus amigos...tenía un mal presentimiento al respecto y se estaba poniendo muy molesto

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Craig terminaba de vestirse para regresar a su casa, el cielo ya se había obscurecido y Tweek le había recomendado que se fuera para evitar problemas con sus padres, a pesar de que quería dormir junto a él, tuvo que admitir que tenía razón

-no sabes lo que daría por dormir toda la noche contigo-

-ugh...imposible, si tus padres ven que no llegas podrían pensar que algo te paso, tal vez que te secuestraron o cosas peores-

-está bien...tu ganas por esta vez, pero quiero mi beso de despedida-

Tweek sonrió y le dio un apasionado beso en los labios, como los que le estuvo dando desde la mañana, lo terminaron debido a la falta de aire en sus pulmones

-hasta mañana, Craig y ten cuidado de que nadie te vea salir-

-hasta mañana Tweek y si, tendré cuidado-

El menor salió de la habitación con una sonrisa en los labios, bajo las escaleras y paso por la cocina para llegar a la puerta trasera, se asomó por la ventana para verificar que no hubiera gente cerca, salió de la casa como un ladrón y fue por su bicicleta que había ocultado tras los arbustos; después de eso empezó a pedalear hasta alejarse unas cuantas calles, se detuvo y saco su teléfono para revisar la hora, ya eran casi las nueve de la noche; pero lo que más le sorprendió fue la cantidad de llamadas perdidas y mensajes que tenia de sus amigos, abrió el último de ellos para saber que había pasado

DE: el idiota de Clyde

PARA: mi

"Craig, porque no contestas nuestras llamadas; márcame por favor, es urgente y por tu propio bien"

El pelinegro no pensaba en contestar, pero después de ver que incluso tenia llamadas de Damien, pensó que quizás si era algo serio y no uno de los típicos dramas del castaño, entonces marco al teléfono de Clyde, no espero mucho para que le contestara