Capítulo final

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Ahora todo cobró sentido... Ese concierto, ese beso, ese... ese fue el adiós.

La persona que acompañaba a su papá era un notario, quién dió paso a la lectura del testamento, para mi sorpresa, yo aparecía ahí... El notario me entregó un sobre, lo abrí... era una carta.

"Seguro ahora entiendes todo, perdón por no decirte antes... llevo sabiendo de mi enfermedad desde hace años y quería pasar contigo el máximo tiempo que me fuera posible, pero... no pude dejar de amarte.

Quiero que lleves mis cenizas a Miramar, las esparcirás justo al amanecer, no te preocupes por nada, lo dejé todo arreglado, las cuentas están saldadas y ustedes dos pasarán una bella Luna de Miel en Portugal.

Te amo mi amor y quiero pedirte ese último favor."

Sonreí, seguía siendo aquella meticulosa, adentro del sobre estaban dos boletos para Porto, eran para dentro de un mes.

Tomé un poco de café, su papá se acercó.

Alejandro: Gracias por lo que hiciste por ella, gracias por lo que harás.- sonreí y no dije más.

No mentiré, todo me resultaba algo irreal, miraba la urna con las cenizas de mi portuguesa, me preguntaba tantas cosas.

Lucy y yo nos preparamos para Porto, el día esperado llegó...

Todo era un sueño, esta vez quería despertar, mi portuguesa viajaba por última vez. Llegamos al aeropuerto, noté una cara familiar.

Lauren: ¡Cruz!- era aquel guía de la otra vez, más de 10 años después y tenía un cartel que decí "Portuguesa, es aquí".

Partimos directamente a Miramar, nos hospedamos en un nuevo hotel, el paisaje había cambiado, había más hoteles... más gente, pero aquella capilla prevalecía.

Le pedí a Lucy un momento a solas, quedé en encontrarla al amanecer frente al hotel... Fuí hacía la capilla, me senté y lloré.

"Aquí estamos una vez más mi portuguesa, esta será la última vez"

Lloré y lloré, recordé... sentí la brisa del mar y me parecía escuchar ese viejo fado...

Salí de la capilla y fuí hacía el mar, caminé rumbo al horizonte, cuando el agua llegaba a mis rodillas, me detuve.

La urna la llevaba entre mis brazos, la abrí... tomé las cenizas y las esparcí.

"Hasta siempre... mi portuguesa..."

Decía en mi mente...

La urna pronto quedó vacía, mi mirada seguía fija en el horizonte... alguien me rodeó la cintura, era Lucy... me llevó hasta la orilla.

Nos sentamos y miramos el amanecer, mi mirada permanecía mirando el largo del mar.

Lucia: Es hermoso aquí ¿por qué lo habrá escogido?.

Pero no respondí... No respondí que Porto era el lugar donde se guardaban los sueños de mi portuguesa y míos; no le dije que Miramar y su mar, eran testigos de nuestra unión... Miré el anillo que llevaba en mi mano, el anillo de Porto.

Lauren: Tal vez este lugar le evocaba algo y durará por siempre en su memoria.- respondí, me levanté y le pedí que nos fueramos al hotel.

Un viejo fado sonó en mi memoria, los recuerdos se agolparon de pronto, y mi portuguesa se perdió en ese instante... era el momento de dejarlo atrás.

"Adiós portuguesa.."

Dije por última vez...

Y todos mis sueños en conjunto con ella, se quedaron ahí... en la longitud del mar...

Todavía... (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora