Pasaron días y noches, todos los días iba a la biblioteca para ver si el estaba, si algún día lo volvería a ver intente muchas veces olvidarme de el, por más ilógico que sea no me lo podía sacar de mi cabeza.
Pensé que no lo volvería a ver, pero un día en el almuerzo del colegió despistada como soy me tropiezo y le tiro mi licuado arriba de la remera de un chico, perdón le dije y levante la mirada cuando lo vi no lo pude creer era el, el mundo se paralizo en un instante, me perdí en su mirada, estaba nerviosa, el se río y me dijo que no pasaba nada, un accidente lo tiene cualquiera me sonrió y se fue.
Fui corriendo a contarle a Mateo, lucas, Thamar y Natali a contarles sobre el, el es el chico de que tanto había hablado, para mi fortuna Mateo me dijo que lo conocía, se llamaba Eros y era nuevo en el colegio, nuevo como yo.
Desde ese momento pensé que el destino lo había cruzado en mi camino.
Ese día en la escuela me lo cruce en todos lados y cada vez que lo veía me sentía una tonta.
entro al salón de clases y era nuestro nuevo compañero, el profesor lo presento yo lo único que podía hacer era mirarlo y sonreír, creo que ese día las matemáticas quedaron a un lado.
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La llave de mi corazón
Teen FictionElla buscaba un amor, amor del que hablaba el libro que leía por las noches, amor que de repente y sin pensarlo nos encuentra en pedazos y nos ama hasta dejarnos completos, ese amor que no nos cambia pero nos mejora, amor que llega para no soltarnos...
