Entre a mi nueva casa, era algo vieja y las tablas del suelo crujían lo suficiente como para escucharlas. Mi padre ya me había dicho que había una biblioteca muy grande, un jardín a mi gusto y un piano con el que podría practicar después del instituto.
Lo único con lo que no estaba de acuerdo era el cuadro que estaba colgado en la sala principal, el cuadro de aquel hombre tan triste, pero a mi padre si, así que no me podía negar.
Subí a mi cuarto y coloque todas mis cosas en sus respectivos lugares. Colgué un cuadro en la pared y en cuanto me di la vuelta se cayo. Pensé que se habría caído por la corriente de viento que entraba por la ventana.
Me acosté en mi cama para descansar de la mudanza, no estaba acostumbrada a esto.
Me quedé dormida y tuve un sueño muy raro. Había un niño de mi edad con ropa muy cuidada y lujosa, estaba viendo la casa y no paraba de preguntar lo mismo:
-¿Quién soy? ¿Por qué estoy aquí?
En un momento se paró a verme:
-Por favor, ya no lo soporto más!!!!
En ese momento me desperté y vi algo que me dejó helada, ante mis narices la ventana se estaba cerrando sola.
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¿Quién eras?
SpiritualLuna llega a su nueva casa después de haberse tenido que mudarse por el trabajo de su padre. Algo...alguien la persigue pidiendo ayuda, pero no sabe quien es. Como lo podrá ayudar?
