Dangerous Addiction

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Para cuando la campana sonó, Andy y yo nos dirigíamos hacia la cafetería. Jack se nos unió dejando a su grupo de amigos y encontramos una mesa vacía para poder comer.

—Traeré yo el almuerzo...¿Tu que vas a querer, Andy?—Ella se puso de pie.

—Te acompaño...¿Vienes, Sid?—Yo negué y me acomode en la silla colocando una sonrisa.

—Si voy con ustedes...¿Quien cuidara la mesa?—Andy sonrió y junto a Jack se alejaron de la mesa.

Antes.

—¡JAJAJAJA Que Perra! Anda, Bebe un poco de esto—Hilary me pasó una botella y yo fruncí el ceño—¡No seas tonta!

—¡Cállate Idiota!—Agarre la botella y la lleve a mis labios—Mi amor...¿Hoy irás a mi casa?

—No amor, Hoy iremos a la fiesta ¿Lo recuerdas? Te lo dije esta mañana—Yo reí y agarre sus mejillas—Eres muy despistada mi amor.

—James...¿Comiste mucha azúcar hoy o que?—Hilary continuó riendo y yo me levante del regazo de James.

—Hilary, Eres una idiota. Se nota que te falta un novio...¿Por que no vas tras Lucas que anda loquito por ti?—Todos rieron y yo lance un beso—Espero que tengan una linda relación.

—Eres una zorra—Solté una carcajada y me acerqué a James.

—Zorra o no...Ambas sabemos que nunca podrás ser yo...o al menos tener lo que yo tengo y james...Es el mío—Él río y pasó sus manos por mi cintura acercándome a él.

—Ya déjala amor—Besó mi mejilla y continuó riendo.

Ahora.

Jack colocó una bandeja frente a mi con comida y se sentó al lado de Andy. Colocó una sonrisa y acomodo su cabello rubio hacia un costado.

—Pastel de chocolate. Aún te gusta eso ¿verdad?—Asentí.

—Si Jack, Estuve fuera un año no toda la vida—Andy sonrió y me pasó una de las cucharas.

—Una persona puede cambiar mucho en un año—Andy miró hacia Hilary y yo negué con la cabeza—Nosotras...debemos hablar sobre...

—Claro que no—Mire hacia james quien mantenía la mirada baja—Míralo...Esta TAN feliz.

Hilary reía y trataba de besarlo mientras que el solo miraba hacia la mesa. Qué perra. Pensar que ella fue mi mejor amiga y ese idiota...mi novio.

—Ya vuelvo chicas—Jack se levantó y se puso a conversar con unos chicos.

—Sid, Las cosas han cambiado mucho en un año. Todo lo que pasó aquella noche dejo a James...asustado. Desde que te fuiste pasó más de una semana sin asimilarlo. Tu partida dejo una gran incógnita, Nadie sabía en dónde estabas ni qué hacías ni con quién estabas. Tus hermanos siguieron viniendo y tú no. Dijeron que estabas de viaje...Realmente James sufrió—Yo solté una carcajada.

—Tu y yo sabemos que pasó aquella noche Andy. No me importa que haya sufrido una semana. No me importa que se haya preocupado por mi. El me extraño una semana...Yo estuve metida en ese lugar por un año. Fue su culpa. El fue quien me metió en ese mundo—Andy negó.

—No te pusieron una pistola en la cabeza para que te unas a su mundo. Fuiste tú quien decidió seguirlos.

—¡Y fui yo quien lo pago también!—Todos nos quedaron mirando y yo agarre mi maleta—Se que fue mi error pero no necesito que me lo recuerdes.

Abandoné la cafetería y me dirigí hacia la entrada de las escaleras que daban hasta la azotea.

—¡Maldita sea!—Grite—¡AHHHHHH!—Mi espalda choco contra la pared y me deslicé hasta el suelo. Lleve mis rodillas hasta mi pecho y ahogue un sollozo—Ya cálmate Sídney. Andy no tiene la culpa de lo que pasó. No te la puedes agarrar con ella.

—Creía que estabas loca cuando entraste gritando pero ahora...Hasta estás hablando sola—Levante la cabeza y un chico se encontraba bloqueando mi vista.

—Lo que me faltaba. Un idiota que cree que lo sabe todo—Extendió una mano y la agarre para ponerme de pie.

—Jayden, un gusto—Yo reí—¿Tu eres?

—Sid—El soltó una carcajada y yo pase mi mano por debajo de mi ojo limpiando el rastro de lágrimas.

—Bueno Sid, Veo que no estás teniendo un buen primer día de clases y como tú nuevo anfitrión no puedo permitir que eso ocurra—Estiro su brazo—¿Me dejaras con el brazo estirado?

—¿Nuevo anfitrión? Conozco bastante bien esta escuela, Gracias—El sonrió y entrelazo nuestros brazos.

—¿Ya la conoces?—Pregunto sorprendido.

—Estudie antes aquí. Conozco el lugar y a las personas—Jayden negó mientras bajábamos las escaleras.

—No lo creo. Siempre es bueno reafirmar los pensamientos y refrescar la memoria ¿Cierto? Estoy seguro que podré darte nuevos conocimientos—Solté una carcajada.

—No lo creo. Mi hermano y mi mejor amiga me mantuvieron muy informada de todo—El asintió.

—Sid...Creo que como tú nuevo anfitrión debo tener tu numero para estar comunicados ¿Cierto?

—¡Jajaja! Claro que no. Nos vemos luego genio—Corrí hacia Andy—Andrea lo siento mucho. Tú no tienes la culpa de nada

Andy pestañeo varias veces y luego mordió su labio. Oh oh...Sabia lo que ese movimiento significaba.