Dark Paradise

Entre estas frias paredes!

Y es que de tantas ocaciones, ya perdí la cuenta de las veces que he estado aquí, entre solo paredes blancas llenas de soledad, luces demasiado fuertes que ofenden la vista. Otra vez estoy en el hospital, una vez más mi vida está dependiendo de los médicos, odio estas malditas crisis de ansiedad; suena leve pero créanme ¡Es de lo peor! Sientes como pierdes el control de todo tu cuerpo, todo se empieza a nublar, se te hace difícil caminar, como si estuvieses borracho, sientes como si mil camiones hubieran pasado por tu cabeza. ¡Y NO! No hice esto por algún estúpido amor o un problema menor (tal vez más adelante les hable del porque, primero de fuerzas me tengo que llenar para ese tema poder tocar) Pero si les dire que en mi mente recorrían cientos de pensamientos los cuales no me dejaban de bombardear, y a mi mente solo se vinieron muchas ideas para lograr mi vida acabar. Llorar es inevitable y gritar esencial, aún cuando hasta respirar duele. El aire te falta.
¡Es mucha mierda para tan poca edad!

Vi la forma en la que me miraba la enfermera cuando me intentaba canalizar una vez más, vio mis cortes y su cara fue de horror y repudio. Pero ¿De qué me asombro? Ellos nunca comprenderán nuestros cortes, nuestras "salidas fáciles" pero esta bien; nosotros tampoco entenderemos el porque de esta vida tan turbia y nefasta.

Logró escuchar cuando los médicos dicen que será necesario llamar a mis padres para comunicarles lo ocurrido
¿LLAMARLOS? ACASO SE HAN VUELTO LOCOS!
Mi madre me matará y papá se entristecerá.

Pido hablar con el doctor encargado del turno....
-Es necesario que firme algún papel?
(Me estaba haciendo la desentendida, haciéndome pasar como si fuera mayor de edad y yo fuera mi propia encargada)
-Necesitamos a sus padres
(Por un momento me horroricé, ¡enserio!)
-Mis padres están fuera de la ciudad (Mentí)
-Entonces algún encargado ¿Tiene hermanos?

(¡CLARO QUE TENGO HERMANO! Si por ese monstruo he estado infinidades de veces al roce de mi querida amiga la muerte)
-No Doctor, no tengo hermanos
(UN MOMENTO! Tengo amigos que seguramente me echaran la mano) sonreí por un instante y dije
-Pero tengo un primo que está a cargo mío
-Perfecto, necesitamos venga hacer el papeleo y es necesario platicar con él sobre su estado
-¿Mi estado? ¿De que habla?
-Tiene una depresión profunda y un caso de ansiedad severa, en una de estas crisis puede lograr acabar con su vida

(Por un demonio! ¿Acaso no es evidente que eso es exactamente lo que quiero?)

-Está bien doctor, entiendo perfectamente.

Inmediatamente llame a mi amigo el cual llego casi de enseguida para hacer el trámite correspondiente.
Le dijeron que era necesario que asistiera a terapias psicológicas día de por medio, y si yo me oponía o faltaba a alguna de ellas entonces sería internada en un psiquiátrico de emergencia.

¡MALDICIÓN! Yo no soy el problema! El problema es mi maldito pasado, este maldito infierno. ¿Porque no meten al puto psiquiátrico a los demonios que tanto me atormentan?

Es más que lógico que acepté las terapias forzosas ya que ni loca entraría a ese maldito psiquiátrico.

Siento las mejias como si estuvieran a punto de incendiarse, cada lágrima que cae por ellas arde demasiado. Pero no tanto como el ardor que recorre mi vena, son demasiadas malditas sustancias que han ingresado a mi cuerpo, muchos tranquilizantes tuvieron que ponerme para poder tranquilizarme.

Como de costumbre, hice una gran idiotez, volví abrir mi cuerpo para que saliera todo ese mal y odio que ahora es parte de mi. Perdí mucha sangre por lo que se vieron obligados a ponerme una pinta, la bolsa de suero no va ni por la mitad, esto es delirante; siento como mis ojos pesan pero no tanto como la culpa que llevo conmigo.
Los médicos están distraídos y el botiquín de medicinas está completamente descuidado, está es la hora favorita de mis demonios; mucho medicamento a mi alrededor para con mi vida poder acabar, solo sería cuestión de segundos.
Más no puedo hacerlo, si logran detenerme tendrán los requisitos necesarios para ingresarme de inmediato al psiquiátrico.