La primera vez Malec

Una noche inolvidable

Reí algo nervioso a ver a mi chico temblar, si había una forma de decirle que todo estaría bien, quería encontrarla pero no tenía hechizos para eso.

-Amor ...calma, soy sólo yo, se que soy algo intimidante, pero no debes tenerme miedo - Me acerqué acariciando su mejilla, cubrí su rostro de suaves y delicados besos .

-Yo...yo lo sé ...pero tu debes de tener mucha experiencia y yo ...bueno, tu sabes ...-

-No creas que es fácil para mí, jamás había sentido algo así por alguien de este mundo Alexander, también tengo mis miedos...¿Y si no te gusta? ¿Si descubres que este subterráneo no es el indicado ? Yo preferiría la muerte al perderte mis ojos azules - Negué con mi cabeza, realmente sentía un fuerte dolor por dentro al pensar en la idea de que Alec se alejara de mi-

-¡¡No seas tonto !!Mi amor por ti es  más real que cualquier cosa que hubiere en este mundo -

Mi nefilim se acercó besando mis labios, reaccione de inmediato empujándolo sobre la cama, mis dedos nerviosos desabotonaron lentamente cada botón de su camisa, acariciaba su pecho, sintiendo su cuerpo reaccionar a mis atenciones.

-Alexander  Gideon Lightwood , este es el momento donde debes decir "Para " o sino no podré detenerme -

-No lo diría jamás Magnus Bane -El pelinegro sonrió entusiasmado mientras comenzó a quitar mi ropa, no me quedé atrás y me deshice de todas sus molesta prendas.

Sentir el contacto de nuestros cuerpos desnudos era sin duda una sensación incomparable, no hubo ningún lugar del hermoso cuerpo del nefilim donde no haya dejado mis besos.Sus jadeos me indicaban que le gustaba y cuando creí que estaba listo me coloque sobre El separando sus piernas, su corazón latía tan rápido que lo bese con necesidad y pasión para  calmar sus nervios.

-Te amo ...Y ser tu primer hombre es una bendición para mi -

El no respondió pues sólo cerro sus ojos cuando sintió que estaba entrando en su interior.Me acomode mejor mientras el rodeaba mi cadera con sus piernas, así que continúe penetrandolo por completo, era tan placentero, no podía ser de otra manera, era el amor de mi vida a quien le estaba haciendo el amor.
Finalmente cuando su cuerpo se amoldo al mío comencé a moverme lento y luego más rápido, nunca dejé de besar sus labios, sólo para susurrar cosas bonitas, todo lo que me hacia sentir .

-Eres solamamente mío Alexander ...mi amado ...- fue lo último que dije antes de caer en unos de los orgasmos más espectaculares de mi vida, no había comparación alguna.

-Solo...tuyo ...por siempre mi brujo ...- su voz entrecortada, su sonrojo me hacía morir de amor y cuando sentí su escencia en mi abdomen, lo abrace con mucha fuerza.

-Te amo ...- susurre en sus labios .

-Te amo más -

Nos quedamos abrazados, el temblor de nuestros cuerpos ya había pasado, y mi chico de ojos azules dormía acurrucado en mi pecho.

No sabía cómo sería nuestro futuro, pero había una cosa de la cual estaba completamente seguro, amaba a Alexander Lightwood con todas mis fuerzas y lo quería en mi vida por el resto de mis eternos días .