Atracciones Peligrosas [Deunnie]

Solo confía en tu corazón

~ Bonnie... Ven aquí mi pequeño príncipe... Mira como has crecido... Ven... Acercate a mí tesoro... No sabes lo mucho que te extraño sabes... Yo también te extraño... ¿Porque tuviste que irte? Yo nunca me iré pequeño... Siempre estaré contigo... Madre...~

//Narra Bonnie//
Eran eso de las cinco de la madrugada, cuando un ruido bastante fuerte me sacó de mis sueños, haciéndome así, levantarme casi se manera espontánea.
- ¡Sal ya del baño sarnoso! ¡No eres único que quiere entrar! - Gritaba furiosa N. Mangle, hasta el momento, es el único nombre que conozco, en relación a la pandilla.
- Si yo fuese tu me iba poniendo cómoda... Porque si sigues gritando de esa manera, me veré forzado a tardarme más de la cuenta - Le respondía el peliazul, el cual se encontraba dentro del baño.
- ¡Que es todo este escandalo! - Decía furioso el pelinaranja, asomándose desde el salón con los ojos aún algo cerrados por el sueño.
- ¡El sarnoso de N. Bonnie no quiere salir del baño! ¡Llevo cerca de media hora esperando a que salga!
- ¡Primero escandalosa y ahora mentirosa, acabo de entrar hace un rato! - Replicaba el chico.
- ¡Ya ni dormir se puede tranquilo con ustedes! - Refunfuñó molesto el pelinaranjo, acto seguido se dirigió al baño, abriendo la puerta sin permiso y viendo amenazante al menor.- ¡Tu tiempo en el baño acabo!... -Dicho esto, el joven subió a su amigo en su hombro como a un saco de papas y se lo llevo a otro lado, dándole así la pasada a N. Mangle.
- ¿Q-que es todo este alboroto?...- Me atreví a preguntar algo temeroso al pelinaranja, el cual aún llevaba con sigo a su amigo.
- No te preocupes, siempre hacen lo mismo... Perdón por las molestias.
Desde que estos chicos llegaron, la mayor parte de las mañanas son así... Nada mas ayer noté que me están saliendo unas leves ojeras... En momentos como este, me gustaría desaparecer de esta casa.
- Buenos días enano... - Se escucho la voz del moreno, el cual segundos después estaba apoyado en mi.- ¿Que desayunaremos hoy?
- H-hoy quedé de ir a comer con Foxy...- Últimamente e estado mintiendo demasiado, lo único que quiero es un tiempo a solas.
- Tu no vas a ninguna parte... - Dijo tomando mis hombros y poniéndome contra la pared. Su mirada era amenazante, como de costumbre.- Tienes que quedarte con nosotros... ¿No recuerdas a caso tu deuda?...- Decía mientras acercaba su rostro cada vez más al mio, hasta el punto de sentir su respiración. No podía moverme, y tenia miedo de intentar soltarme...
- ¡Oigan! -Se escuchó a desde la puerta del baño, segundos después, el chico se hallaba en el suelo con una chancla en la cara (:'v sorry... No lo pude evitar)- A menos de dos metros esta tu habitación, ahí pueden hacer todo lo que quieran. No tengo porque estar viéndolos hacer esas cosas.- Decía algo molesta mientras se retiraba al cuarto que le había prestado.
  Fue justo en el momento en que el chico se separó de mi, cuando me fijé que ya se me hacia tarde para la escuela.
- ¡Ya es tarde! -Grité impactado tras ver la hora, emprendiendo la carrera al baño y encerrandome ahí.
- ¿Estas bien enano?- Me interrogaba el chico, en lo que me duchaba.
- ¡Claro claro! Oye... ¿Me harías un favor?- Algo nervioso lavándome el cabello.
- Te escucho enano.
- ¿Me traes mi uniforme? ¡Está en mi cuarto! - Terminando de ducharme.
- Si me abres la puerta te lo puedo entregar, ¿No crees?
- Cierto...- Al abrir la puerta el chico entró arrasando con la puerta y tomando mi muñeca, apegándome a el.- ¿¡Q-que crees que estas haciendo!? ¡T-tengo prisa!
- Vamos enano... ¿Porque siempre me quitas la diversión?- Me respondió con una mirada dominante.
- Por favor... Voy a llegar tarde... - Bastante nervioso mientras intentaba soltarme.
- Vamos... Solo serán unos minutos... -Dijo acercándose a mi rostro y apegando mi cuerpo al de el.

~~~Mágico corte troll de escena~~~

  Acabada la jornada escolar me despedí de mis amigos y me dispuse a volver a mi casa. Pero algo llamó mi atención. En el camino, delante de mi iba una madre con su pequeño hijo. Al verlos, mi cuerpo empezó a moverse por si mismo, de un momento a otro me hallaba en la puerta principal del hospital.
- Vamos bonnie... Se fuerte... - Me decía a mi mismo mientras entraba.
- Buenas tardas, ¿Que necesita joven?- Me pregunto amablemente una señorita tras el mostrador.
- E-eh... Si... Vengo a ver a la señora ____ (inserte nombre(? )
- Habitación 5B, en el segundo piso.
- Gracias... - Estaba algo nervioso... La última vez que la ví... Estaba con mi padre.
  Al llegar al cuarto me detuve en la puerta, respiré hondo, y giré el picaporte. Ahí estaba ella, sentada en la cama viendo por la ventana. Al oírme la mujer volteó.
- ¿Bonnie?... ¿Eres tu?... - Repetía la mujer sin creer lo que veía.
- Madre... - Sin pensarlo dos veces corrí a sus brazos rompiendo en llanto.- Madre...
- Mi pequeño Bonnie... Mira como has crecido... No sabes lo mucho que te extraño sabes...
- Yo también te extraño... ¿Como te sientes?
- Tranquilo pequeño, estoy bien. ¿Sabes algo de tu padre? - Me pregunto preocupada.
- No... Hace ya un mes que volvió a salir, creo que esta vez fue a Italia... Madre... Hay algo que tengo que contarle...
- ¿Que paso pequeño? Sabes que puedes confiar en mi.
- Es que me he estado sintiendo raro últimamente...
- ¿Es una chica? -Preguntó con una sonrisa pícara la mujer.
- N-no precisamente... - Dije sonrojándome levemente.
- Bueno... Lo único que pido es que confíes en tu corazón... ¿Prometes hacerlo?
- Claro madre...
  Así estuvimos hablando un buen tiempo de temas variados, hace mucho que no la veía, me hizo muy feliz ir a verla, y aparentemente a ella también. Ya dadas las ocho una señorita alta y de cabello rizado entró al cuarto y me dijo que la hora de las visitas acabarían pronto, por lo que me despedí de mi madre y me dirigí a la casa. En el trayecto no pude dejar de pensar en lo que me dijo... " Lo único que pido es que confíes en tu corazón..." Y en lo que me diría mi padre si le hablara sobre el tema.