El Espía {Brandon Rowland y Tú} [Editando]

Conociendo Washington

Llegamos ya y lo primero que hizo Shawn fue mirar si había sobrevivido o no.

-Estoy bien- le recuerdo riendo

-Ya, me he dado cuenta- ríe conmigo.

-Lo harás bien- añado.

-¿Vamos?- dice Christine.

Ambos asentimos y vamos junto a ella y Brandon al hotel.
Solo había dos habitaciones encargadas, y lo peor es que los del hotel te decían con quién compartirlo, adivinad que, yo lo compartía con Brandon.

-Bueno, ya os lo he dicho todo, mientras Shawn y yo estamos organizando lo del concierto ,podéis dar una vuelta, a las 4 os quiero aqui, ¿me has oído Brandon?- dice Christine

Brandon asiente y ambos vamos visitando Washington.
Era un sitio muy bonito, lo molesto es que cada chica miraba a Brandon ,no se porqué pero me ha molestado y bastante ,un poco bastante, vamos a contar la verdad, me ha tocado las narices.

-No tienes que fulminar a cada chica que se me queda mirando- ríe Brandon.

Bajo la cabeza.

BRANDON'S POV:

Kendall estaba molesta por las chicas que me miraban, cosa que me hizo reír, haciéndola sonrojar.
El plan iba genial, como era previsto.
Ahora tocaba hacer de galán.
Cogo una rosa de un señor que vendía rosas y se la entregué a Kendall.

-Gracias- dice riendo.
Un violín empieza a sonar, hoy el mundo está a mi favor.

-Ahora dime, ¿cuánto les has pagado por hacer esto?- dice bailando mientras ríe.

-Ya quisiera decir yo que les he pagado- digo.
Las campanadas que daban que eran las 4 de la tarde empezaron a sonar haciendo parar el romántico momento.

-Venga Kendall a mi lado siempre- Shawn me coge de la mano haciendo caer mi rosa.

Me zafé de su agarre y fui a por la rosa.

-Shawn porfavor, estamos en la misma ciudad al menos, si me quieres aqui compórtante bien- le digo.

Al final tuvieron que cambiarnos a Brandon y a mi en la misma habitación y decidimos salir ambos a visitar sitios de Washington, tales como el Jefferson Memorial.

-Llámame lo que quieras, pero quiero ir a la biblioteca famosa-. Digo emocionada.

-Por mi vale-. Dice.

Fuimos por todo Washington intentando saber donde estaba la biblioteca, cuando al volver al hotel nos dimos cuenta que estaba a unas cuantas manzanas.
Ambos reímos a más no poder.

-Somos tontos-. Decimos al unísono.

Capitulo nuevo mis peques!!!
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