Sofia. Una Nueva Vida.

Capitulo 1

Sofia vio entrar a Maggie al salón de clases y de inmediato la saludo con la mano con una sonrisa gigante en su rostro, demostrándole afectó. Maggie la miro he hizo lo mismo, para después llegar a su lugar y sentarse junto a ella.

— ¿Estas lista para esta clase?- Le pregunto Maggie, sacando su libreta.

— No. Nunca me ha gustado esta clase. Solo porque estas tu.- Le dijo Sofia.

— Solo porque te paso los apuntes.- Río.

— ¿Que?, ni me los pasas. Se los pasas a los tarados de Ben y Harry. A mi nunca me los has pasado.- La desmintió.

— Oh, oh.- Miro la puerta del salón.- Tu príncipe azul a llegado.- Le murmuro.

Sofia fijo su mirada en la entrada y ahí estaba él, pareció como si todo se colocara en cámara lenta, para que ella pudiera observarlo por un momento. Fernando noto que Sofia lo miraba, así que le sonrió y después su dedo pulgar se dirigió a la punta de su nariz para rascarla, todavía con una sonrisa.

— Oh, vamos. No te gastes energías en él. Tus ojos prenden chispas al verlo.- Comentó Maggie, sacando a Sofia de la atención de Fernando.

— No me gasto energías... Él me carga al cien.- Suspiro.

— WoW, ¿se supone que deba reírme?- Le pregunto Maggie.

— Creeme, ni yo se lo que dije.- Sofia se sintió muy tonta por haber dicho eso; mas bien, se sintió muy avergonzada. Nunca había sido así con alguien, o por lo menos nunca lo había comentado.

La muestra entro al salón, y comenzó la clase. La mitad de toda esta, Fernando se la paso parado, recargándose para escribir en él escritorio de la maestra, al parecer su asiento no estaba en donde debería, ni en otro lugar del salón, así que se tuvo que quedar parado.
De pronto un hombre alto y algo canoso se coloco frente a la puerta del salón, y toco la puerta y se aproximo a decir:

— Disculpe maestra, me permitiría a Maggie Robinsón.- Dijo él hombre.

Sofia la miro.

— ¿Te iras?- Le susurro.

— Si, me están hablando para que vaya a la dirección.- Dijo Maggie, mientras guardaba sus cosas.

— ¿Porque?-

— No se para que esta ves. Pero estoy segura de que quieren que haga un trabajo con otros compañeros.- Dijo y comenzó a caminar a la salida.

Sofia pensó que su día no se podía hacer mas aburrido; primero sus amigas hablando de un baile, al cual faltan meses y ella no tuviera pareja para aquello, y una de sus compañeras favoritas de calculo se había ido por primera ves. Suspiro y miro su libreta, pensó que ya no valía la pena seguir haciendo él trabajo. Comenzó a pegar con su pluma en la mesa, mientras tenia la cabeza recargada en una de sus manos.

Miro hacia él frente, donde se encontraba Fernando, y lo vio guardando sus cosas, pensó que también se iría, así que regreso la mirada a la libreta. Miro de nuevo al frente, y vio que esta ves caminaba, pero no a la salida, si no hacia ella. Dejo caer sus cosas en él suelo a un lado de la silla, y se sentó; Sofia estaba confundida, pero no quería poner a pensar cosas que no debería.

— Hola.- Fernando susurro, ya que la muestra no le gustaba él ruido e su clase.

Sofia lo miro, y le hizo una señal con la cabeza, saludándolo. Estaba muy de acuerdo con él ruido en esa clase, y no quería meterse en problemas.

— Con que respetas todo esto.- Ella lo miro, y se comenzó a preguntar que era lo que tanto respetaba ella, para que él saliera con aquel comentario.

— ¿Que?- Le pregunto Sofia, susurrando.

— Oh, ahora ya no.- Dijo él chico.

Él timbre sonó para poder ir a comer algo, todos de inmediato se levantaron y comenzaron a salir. Fernando se levanto con su mochila en un hombro, mientras que Sofia guardaba sus cosas para salir, ello lo miro, pensó que ya se había ido, pero seguía ahí. Y él chico antes de irse le guiño él ojo. Sofia no se puso roja como tomate, al igual que las demás chicas; ella solo se quedo paralizada.