Tal Vez

Final

POV Quinn

Me encontraba con Rachel acostadas en nuestra cama, ella estaba abrazándome, la voltee a ver y me di cuenta que tenía puesto un garrito rojo y en la punta tenía un pompón blanco igualito al de Santa, y es que esa noche Santa llegaba a la casa, bueno... realmente nosotras éramos Santa, estábamos esperando para estar seguras que las nenas estaban dormidas y pudieran sacar los regalos y ponerlos bajo el árbol.

- ¿Crees que ya estén dormidas?-pregunto mi morena

-Ummm-mire el reloj eran la 1:30 am por lo que más seguro era que ellas todavía no lo estuvieran -esperemos más tiempo...-sugerí

-Está bien-acepto -pero como tenemos que esperar, haremos nuestra tradición de cada año-me dijo antes de posicionarse encima de mí

-Yo no me opondré-fue mi contestación antes de sentir que como atacaba mis labios.

Ella empezó a besar mi cuello, pero como tenía el gorrito con el pompo de la punta me hacía cosquillas en la nariz, por lo que se lo quite.

- ¡oye!-se quejó -quiero hacer el amor navideño, y si mequitas el gorrito ya no es-hacia puchero, le di un pico rápido para después ponerme el gorrito, lo que le causo risa -estamos a mano-fue lo que me dijo antes de atacarme a beso de nuevo.

Hicimos el amor hasta caer rendidas cuando lo hicimos eran las 3 de la mañana por lo que estábamos seguras que las niñas ya estaban dormidas, por lo que Rachel salió y se fue al sótano a buscar los regalos, los escondimos ahí porque sabíamos que Barbra, Lucy, Michele, Elise y Charlotte la ultima es por lo que le tuvimos que poner llave porque a las cuatro anteriores no bajaban ni en broma al sótano después de que Rachel les dijera que había un monstro, pero Charlie o Lotte como quieran ella no se lo creyó, por eso lo de la llave, mientras Rachel sacaba los regalos yo aproveche para tomar del cajón con llave una cajita cuadrada roja con un moño dorado lo abro y una enorme sonrisa se forma en mis labios.

Cierro la caja y salgo lo más rápido del cuarto para dirigirme a la parte de abajo y ponerlo en el árbol, lo dejo ahí sin olvidarme en ponerle para quien es no quiero que nadie lo tome pensando que es para ella, una vez que lo dejo vuelvo a subir y me dirijo hacia dónde está mi esposa, quien saco los regalos uno por uno.

-Rach-le llamo - ¿ya estás?-pregunto pero con voz moderada ya que no quiero que eso despierte a las nenas

-Si-me contesto la escucho subir -este es el último-me señala la caja que carga -bueno...-ella la deja en el suelo junto a las demás -Puff... que cansado-se pasaba la mano en su frente

-Eres una exagerada-le pico

-see, see lo que digas-decia

-Eres una tonta-le digo

-Pero soy tu tonta-sonríe y me jala para besarme en los labios -si-digo al separarme

-Eres mi tonta-le sonrió

Dejamos de hacernos patas y empezamos a llevar los regalos abajo, una vez que ya teníamos todo ahí, Rachel me abrazo por detrás mientras asentaba su mentón en mi hombro para poder contemplar como nuestro enorme árbol se iluminaba por las luces de colores que tenía.

-Es precioso-me dice

-obvio-sonrió -quien crees que lo adorno-digo soberbia

-obvio que yo no-no la veo pero sé que esa rodando los ojos

-Ya está listo-le digo -es hora de irnos a costar-ella me gira para poder mirarme -porque te aseguro que tus clones se levantaran muy temprano para ver qué es lo que les dejo Santa-le aseguro