Capítulo 45

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Nuevo capítulo,espero que os guste,de verdad. Gracias a toda persona que lee y un gran abrazo.

COMENTAD y VOTAD, por favor.

Narra Dennis

Llegué a casa de Astrid aturdido, mis sentidos no estaban al cien por cien y hacer casi doscientos kilómetros en moto no me ayudó. Denna se bajó de la parte posterior de la moto y esperó a que yo bajara, antes de que lo hiciera aparecieron mis padres biológicos justo delante de nosotros. Eran relativamente jóvenes para haberme tenido como hijo. Yo tenía veinticuatro años y ellos tendrían unos cuarenta y pocos.

Bajé de la moto e inmediatamente tomé la mano de Denna, era como lo único para mi que me reconfortaba y me brindaba apoyo.

-¿Cómo os llamáis? -esa pregunta fue difícil de realizar, me dolía tanto aquello -.

-Yo soy Katherine Wolff y tu padre es Kenneth Wolff -habló ella y asentí -.

-Supongo que sabréis que yo soy Luke y ella es mi novia, Denna, no habla alemán, así que no creo que os entienda -dije encogiendo mis hombros -.

La pareja le dio la mano a modo de saludo a Denna, Kenneth hizo lo mismo conmigo, pero Katherine se abalanzó a abrazarme mientras lloraba.

-Siempre me preguntaba como estarías, odio tanto que todo saliese tan mal -susurró entre llantos -.

Cuando se separó de mi pidió perdón, aunque en parte entendía como se debía de sentir.

-Yo... Siento el comportamiento que tuve ayer, fue algo que no esperaba -susurré - ¿Por qué no vamos a tomar un café y hablamos tranquilamente?

Y así hicimos, fuimos a un café cercano, yo me acerqué a pedir los cuatro cafés, Denna estaba sentada con aquellas dos personas desconocidas para mi, la notaba algo incómoda. En parte estaba delante de sus suegros.

-Aquí están -dije dejando los cuatro cafés sobre la mesa - toma pequeña -dije dándole el suyo a Denna-.

-Gracias -susurró ella -.

-Podemos hablar en inglés, creo que ella también querrá saberlo todo y es bastante descortés hablar en un idioma que ella no habla -dijo Katherine - estuvimos cinco años viviendo en Estados Unidos, así que sabemos desenvolvernos bastante bien.

Asentí y les hice la pregunta que más me dolía hacer.

-¿Por qué me disteis en adopción?

-Cuando Katherine se quedó embarazada de ti tan solo tenía quince años -comenzó a hablar Kenneth - yo tenia dieciséis y todo se nos vino encima, eramos jóvenes, no teníamos trabajo, mis padres murieron cuando yo era pequeño y vivía con mi hermano mayor, él tan sólo tenía veinte años y vivíamos justos de dinero. Un niño implicaba muchísimo trabajo, esfuerzo y dinero. Nosotros no teníamos nada de eso. Eramos críos. Ni siquiera nos daba el dinero para el aborto, así que decidimos tenerte y cuando nacieras darte en adopción.

-Hablamos con decenas de parejas interesadas -continúo ahora ella - ninguna nos convencía, ya tenías dos meses y a penas teníamos para vestirte, entonces llegaron tus padres.

-No son mis padres -la interrumpí -.

-Bueno, ellos nos dieron confianza, sabíamos que con ellos vivirías bien y no te faltaría de nada. Lo hicimos lo mejor que pudimos. Cuando naciste yo acababa de cumplir los dieciséis y Kenneth ya tenía los diecisiete. Era todo muy turbio. Años después, cuando acabamos nuestras carreras universitarias sabíamos que lo hicimos mal, yo te echaba de menos a diario y el mundo se volvía siempre en mi contra.

Posesivo ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora