Capítulo 5: Viernes.

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-¡Al fin hemos acabado el segundo trimestre!- grita Lucía al salir del instituto.

-Sí, ¡parecía eterno!- comento.

-¿Dónde queréis ir a comer?- pregunta Cris.

-Más que comer, ¿tapeo y cañitas?- propongo.

-Sí- contestan.

Vamos cada una a nuestra casa, para arreglarnos y quedamos tres cuartos de hora después en la Plaza de España. Me doy una ducha rápida, me visto con una mini falda recta negra con tachuelas, medias negras de red grande, camisa blanca con un nudo y botines de cordones con tacón gordo y alto negros. Me pinto y me peino, cojo una chaqueta rojo pasión fina por si hace frío y un bolso del color de la chaqueta.

Recojo a Cristina, me despido de mis padres y nos dirigimos al punto de quedada.

Nacho me habla, estos días he estado muy ocupada porque me llamaron para unas sesiones de fotos por lo que no hemos podido quedar.

-Chicas, Nacho dice de quedar esta tardenoche para tomar algo, ¿quedamos y que se traiga a sus amigos?

-Vale- contestan.

Le digo que sí, que quedamos todos, que nosotras estaremos por ahí y que cuando salgan que me avise para fijar un punto.

De momento me habla todos los días, creo que en el fondo me gusta eso, pero también me gusta que me lo pongan un poco difícil, no sé, me atrae y lo quiero seguir conociendo.


A las cinco y media de la tarde seguimos tomando cervezas, este es el cuarto bar al que vamos. Brindamos una y otra vez por las buenas notas, las vacaciones y la amistad. Decidimos ir a un pub cercano, pedimos un cóctel cada una y una cachimba para compartir.


A las ocho y media quedamos con los chicos en Callao, estamos bastante afectadas por el alcohol, después de los cócteles vinieron los cubatas y hasta bailamos. Nos cuesta un poco llegar pero cuando lo conseguimos nos están esperando allí.

-Hola rubia- me saluda Nacho con dos besos- que guapa.

-Gracias- río.

-Estáis muy happy ¿no?

-Que va- le guiño un ojo- chicas vamos a por algo dulce al Starbucks.

Espero que el azúcar nos baje el efecto del alcohol, porque Nacho tiene razón, estamos muy happy todas.

Después de comprar un café y un muffin, damos un paseo por las calles de Madrid que están llenas de jóvenes celebrando el final del trimestre.

Me percato del tonteo entre Lucía y Rubén, hacen buena pareja. Hablo con los otros chicos, y noto como Nacho les mira mal cada vez que intentan ligar conmigo. Me cuesta hablar con Nacho porque suelo ser vergonzosa cuando me gusta un chico, por lo que paso un poco de él.

A las diez vamos al Hard Rock a cenar, me gusta el sitio porque la decoración es una pasada y la comida está buena. Hay mucha gente como de costumbre por lo que tenemos que esperar.

Después de cenar los chicos dicen de ir a alguna discoteca, pero nosotras decimos un no rotundo. Salimos anoche un rato después de la sesión con mi hermano y sus amigos y hemos dormido poquísimo, además llevamos todo el día en la calle y estamos súper cansadas.


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