La mañana siguiente fue diferente a lo habitual.
Peter se encontraba mirando a su acompañante con el corazón saltando en nerviosismo.
Al despertar esa mañana se había congelado, con solo recordar lo que había hecho con Logan la noche anterior.
Tembloroso, estaba dispuesto a ponerse de pie, cuando lo intento, unos fornidos brazos le obligaron a recostarse de nuevo.
No lo iba a negar, Peter estaba nervioso. Arrepentido no. Pero después de todo, pensar en lo que habían hecho era muy vergonzoso.
Y no era para menos, la manera en la que había actuado anoche, era algo completamente inesperado de su parte.
Logan le miró, y le regaló una sonrisa somnolienta.
—Buen día, niño.—Agregó Logan mientras cerraba de nueva cuenta los ojos y se acomodaba con Peter aún entre sus brazos.
—Buen día.—Respondió el peliplata casi en un susurro inaudible y con el rostro sonrojado.
—¿Está todo en orden?.—Pregunto Logan al ver la confusión del chico.
Al escuchar esto, Peter se cubrió el rostro con una almohada y se enrolló en las sabanas completamente avergonzado. Si de avergonzar a Peter se trataba, era obvio que lo estaba logrando.
Porque después de todo aunque lo hubiera acosado desde hace alrededor de dos años, nunca había tenido esta clase de conversaciones.
—¡Si!.— Le contestó el menor sin dejar descubrir su rostro completamente. Era lo más vergonzoso que había vivido desde que su padre le dió charla.
Esto le causo gracia y ternura a Logan, quien comenzó a acariciar la pálida espalda del menor.
—Tranquilo, ya deja de avergonzarte por todo niño.— Respondió con un ligero tono de burla con la intención de avergonzar al velocista.
Peter a duras penas pudo levantarse, le dolía la parte baja de la cadera pero era algo soportable, hizo su mejor intento para levantarse mientas se enrollaba entre las cobijas, intentando no mostrar de más.
Pero es su triste intento de ponerse de pie, cayó al suelo cuando sus ahora entorpecidos pies se enredaron provocando que se golpeará contra el piso.
Tras el estruendoso ruido y un quejido por parte de Peter, Logan soltó una carcajada.
—¿Porqué te cubres?.— Pregunto burlón.— Te ví todo anoche, niño ¿O ya lo olvidaste?.— Cuestionó entre risas.
Peter solamente se quejó molesto y parecía que su cabeza explotaría de lo roja que estaba su cara.
Después de que el menor replicará aquella acción con alguna excusa torpe pero tierna, tuvieron que separarse.
Por mucho que quisieran mantener esa mañana viva por siempre.
Aún corrían el riesgo de que alguien descubriera aquél íntimo contacto que había tenido la noche anterior.Y vaya que Logan quería evitar tener más problemas con el imponente Erik Lensherr, su ahora "querido" suegro.
—Nos veremos luego, niño.— Una sonrisa se deslizó entre los labios de Logan y después de vestirse se despidió dándole a Peter un beso en la frente.
Tras ver al castaño cerrar la puerta sonrió con timidez, la calidez que crecía dentro de su corazón aumentaba por cada segundo que pasaba.
Entonces se puso de pie, a pesar de que un dolor ligeramente soportable recorrió su cuerpo entero, eso no acabo ni un poco con el entusiasmo que tenía.
Kurt se tenía que entrar de todo aquello.
Pero de igual forma Peter salió corriendo de la habitación de Logan cerrando la puerta tras de sí, y después llegar a la habitación propia, darse un baño y cambiar su ropa, todo en cuestión de segundos al hacer uso de su mutación.
Peter se sentía oficialmente.— Aunque fuera secreto.— en el mundo de los adultos, y esto de cierta forma, llenaba de euforia su corazón, más de lo normal.
Porqué Peter nunca espero que aquél amor que desarrollo por Logan en sus primeros años de juventud fuese correspondido.
Era temprano por la mañana, el suave viento movía las hojas de los árboles cercanos a la mansión.
El cielo era grisáceo, amenazaba con llover y el frío que se comenzaba a sentir daba a entender que el invierno estaba a la vuelta de la esquina.
Peter se paseó por la casa, de un momento a otro había comenzado a llover, buscaba algo que comer, pero sobre todo buscaba a su mejor amigo.
Se encontró, en una de las muchas biblioteca con sus padres quienes como acostumbraban desde hace muchos años, jugaban un partido de ajedrez.
Peter les sonrió y mientras alegaba buscar a Kurt, se despidió de ellos con la intención de dejarlos solos nuevamente.
Sus padres habían hecho eso desde que tiene memoria, el mismo había irrumpido en esa escena muchas veces durante la niñez. Era algo así como un ritual para ellos.
Peter nunca fue bueno guardando secretos, desde que era un niño había sido el causante de muchos desastres en la mansión debido a su incapacidad de diferenciar lo que no debía de repetir.
Por supuesto que con el tiempo se volvió más prudente, por lo que ahora había logrado mantener en secreto la relación que tenía su azulado mejor amigo quien a toda costa evitaba que su madre se enterará.
Y es recién ahora que Peter se daba cuenta del porque Kurt hacía lo que hacía.
A él tampoco le gustaría que sus padres se enterarán por boca de alguien más que tenía algo con Logan, y mucho menos que ya le entregó el "tesoro".
Peter se sonrojó con una leve risa al pensar en todo lo que había hecho anoche.
Termino tocando a la puerta de la habitación de Kurt, fue una sorpresa agradable para Peter saber que solamente él estaba dentro de su habitación.
Con el corazón latiendo rápidamente, se lanzó a la cama de quién fue su mejor amigo desde la infancia.
Y con una sonrisa ladina en sus labios susurró para sorpresa de su amigo dijo...
—Logan y yo lo hicimos anoche.— Comentó con un las mejillas encendidas.
El que fue sin duda un momento muy especial para Peter, sería tan sólo el comienzo de algo mucho más grande.
...
El capítulo ha quedado del asco :(
Ah, no sé si habrá alguien que aún lea está historia, ya qué, no la he actualizado en poco más de dos años.
Realmente en su momento le puse a esta historia todo el empeño que pude, la continuaré para que tenga el final que soñaba hace dos años.
Gracias por leer.
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¿Uno Más?; Editando.
Fanfiction«Todos cometemos errores, pero tú y yo quizás cometimos uno demás...»