Little secret: DARK | Draco Malfoy |

Capítulo 31

- ¡Por Merlín deténganse! -exclamó April mientras buscaba su varita entre los bolsillos internos de su túnica

- ¡Pelea, pelea! -gritaba Blaise que se acercaba a la escena corriendo como un niño

- ¡Blaise deja de comportarte como un crío! -gritaba Theo que corría detrás del moreno

Harry estaba completamente cegado por la ira, golpeaba al rubio con todas sus fuerzas pero Draco no se quedaba atrás repartía puñetazos por cualquier parte del cuerpo de Harry que encontraba.

- ¡Impedimenta! -exclamó April y ambos se separaron violentamente - ¡¿Qué mierda les pasa?! -gritó al punto del colapso nervioso

- Tu novio es un maldito salvaje -masculló Draco furioso mientras se limpiaba un hilo de sangre que salía de su nariz

- ¿Quieres que te rompa peor la cara? -la intención de Harry era acercarse a Draco para volver a golpearlo pero April lo impidió tomándolo de la cintura

- Ya basta Harry -el tono de voz de April era severo

- ¿Qué significa esto? -una profesora McGonagall se acercó con cara de pocos amigos - Esa no es la manera de comportarse en el colegio, están castigados señores Potter y Malfoy y está de más mencionar que descontaré veinte puntos a Slytherin y Gryffindor por su comportamiento de brutos barbajanes, ahora vayan a la enfermería -les ordenó antes de marcharse

- Ven, te acompaño a la enfermería -dijo la Slytherin tomando la mano de Harry

- Yo esperaba que corriera más sangre -dijo Blaise

- Zabini te callas o va a correr tú valiosa sangre pura -la azabache lo fulminó con la mirada

- Te veo en la Sala Común -dijo el moreno rápidamente antes de marcharse a paso rápido

- Vamos a que te curen esos golpes -miró el labio partido del Gryffindor y el pómulo izquierdo inflamado con algo de culpa y preocupación

- Estoy bien y no es tu culpa -Harry sonrió para tranquilizar a April - Yo solo quise pelearme porque nadie te falta el respeto en mi presencia -acarició la mejilla de la azabache con delicadeza

- Me encanta que seas tan dulce y protector pero no me gusta que te metas en problemas por mi causa, yo puedo...

- Defenderte sola -la interrumpió

- Así es señor adivino -besó la mejilla de Harry - Ahora vamos de una buena vez a que te quiten esas heridas horribles

- Admite que Malfoy quedó peor -comenzaron a caminar tomados de la mano - Le rompí la nariz, le devolví lo que me hizo a principio de año así que estamos a mano -dijo el Gryffindor

El mes de marzo llegó y eso significaba que la salida a Hogsmeade llegaría pronto. April iría con Theo y Blaise, ya que era cumpleaños de Ron y Harry estaría con él.

- ¡Esto es injusto! -escuchó April quejarse a Blaise

- ¿Qué ocurre? -preguntó mientras llegaba donde se encontraba su amigo

- Suspendieron la salida a Hogsmeade por lo que le pasó a la Gryffindor esa -masculló de mal humor - Yo quería dulces, muchos dulces -se lamentó

- Iré a desayunar, ¿Vienes? -palmeó el hombro de Blaise

- Adelántate, iré por mi varita y te alcanzo -dijo

April asintió y salió de la Sala Común, cuando estaba por salir de las mazmorras alguien la tomó del brazo con brutalidad. La Slytherin pensó que era Draco nuevamente pero se sorprendió al ver a una chica de Gryffindor de cabello color negro y con demasiado volumen.

- ¿Quién demonios te crees para tocarme? -bramó molesta April mientras intentaba zafarse del agarre pero la chica de Gryffindor enterró sus uñas en el brazo

- Soy Romilda Vane, la chica que te quitará a Harry -sonrió con hipocresía

- Si y yo soy muggle -dijo con un notorio sarcasmo

- Ríete mientras puedas serpiente asquerosa -masculló arrogantemente

- ¿Enserio crees que Harry se fijaría en una niña boba y fea como tú, teniéndome a mí como novia? -rio fuertemente - Sigue soñando cariño -se zafó del agarre y se marchó

- Eso lo veremos, somos de la misma casa pasamos más tiempo juntos -dijo una Romilda desafiante

April se volteó, le hizo una seña grosera y volvió a encaminarse al Gran Comedor para desayunar.

- ¿Qué Romilda Vane hizo que? - preguntó Harry confundido

- Me amenazó la mocosa del demonio -chasqueó la lengua

- Ignórala, solo quiere estar conmigo porque soy el elegido -la abrazó por la espalda y apoyó el mentón en el hombro de April

- Ya lo sé, pero si sigue molestando se las verá conmigo -Harry besó su mejilla - ¿Qué es este milagro que no estés con el cumpleañero? -preguntó

- Lavender se lo llevó no sé a dónde y quise pasar un rato contigo -deshizo el abrazo - Yo no entiendo a Ron, él ya no la soporta pero no termina con ella

- Tu amigo es raro -dijo April

- ¡Harry! -exclamó Hermione mientras llegaba completamente agitada - Oh, hola April -sonrió y la azabache le devolvió el gesto como saludo

- ¿Qué ocurrió? -preguntó el Gryffindor

- Es Ron...

- ¿Qué hizo ahora Weasley? -preguntó April anticipando a que Harry preguntara

- Se comió media caja de calderos, esos que te dije que no comieras porque Romilda Vane le puso algo -respondió la castaña de Gryffindor

- ¡Yo a esa estúpida la mato! -exclamó y Harry la retuvo porque sabía que las intenciones de April no eran precisamente hablar

- Tranquilízate, ya es tarde y no puedes entrar a mi Sala Común -dijo Harry

- Lo que los calderos contenían era amortentia, debes venir a verlo está en su cuarto -dijo Hermione

- Ya voy -le dijo a su mejor amiga - Te veo mañana, ya es tarde y no quiero que te castiguen por estar fuera de tu Sala Común

- Está bien, hasta mañana -besó a Harry y éste se marchó a paso apresurado con Hermione.