Love Race 2 (Marc Marquez)

"Capítulo 13: El vestido"

Las carreras eran una vez por semana y la de Malasia sería la última antes de Valencia y eso significaba que no faltaba nada para la boda, y de tanto viajar no había visto ni mi vestido de novia, a pesar de que la señora Roser me ayudaba a la distancia así como mi madre que apenas podía con la tecnología.

Habíamos llegado al aeropuerto de Jakarta en Indonesia en un abrir y cerrar de ojos ya que las carreras de Asia eran seguidas Marc aprovechó la parada para cumplir una de sus obligaciones y quedarse en un evento de Sentul hecho por Honda.

Aquel país, era hermoso por donde solo viera con postes en diagonal de metal en el techo que sostenían los cristales por donde se veía a los aviones y personas, luces por todos lados y un piso en el cual se podía ver mi propio reflejo al brillar, pronto fuimos rodeados por personas que deseaban ver a Marc, los de seguridad lo rodearon para que no le pasara nada, allí tenía muchos fans y se escuchaba como aclamaban su nombre, a Alex lo encontraríamos directamente en Malasia ya recuperado pero al que si extrañaría sería a Dani que no dejaba de hablar por teléfono con él cuando tenía la oportunidad.

Subimos a un auto de color negro que George manejaría, quedaba un poco lejos donde nos hospedaríamos, iba tomar unos pocos minutos que apoyé mi cabeza en el hombro de Marc casi durmiéndome.

- ¿Ya has podido arreglar algo de la boda? –apenas levante la mirada y ver sus ojos que me encantaban, pero también pensaba en que no se preocupaba por esas cosas, me sorprendió.

-La mitad está resuelto, aún falta mi vestido y otras cosas-suspiré- Por los viajes lo he olvidado y no he encontrado modista.

-Te deseo mucha suerte-me palmeó la cabeza para después sentir unas cuantas caricias en mi cabello, me levanté un poco y lo vi a los ojos seria, a él le faltaba su traje que si también quería verlo en apuros después, me había ilusionado demasiado si es que pensaba que iba a recibir ayuda de él.

-Deberías ayudar un poco al menos-le dije, pero lo único que obtuve de su parte fueron pequeñas risas, me resigne que era mejor que yo lo hiciera mientras él se dedicaba a lo mejor que sabía hacer, las motos.

Era impresionante ver como admiraban al piloto, que cuando llegamos había muchos fotógrafos y fans, al menos estaría libre de Cristina y Alan por veinticuatro horas.

Debíamos cambiarnos rápido, como esta vez éramos nosotros dos y algunos del equipo, dormiríamos juntos, aun no me acostumbraba a pesar de que lo habíamos hecho varias veces y el resto de mi vida lo tendría a mi lado al cerrar los ojos y al despertar. Estaba un poco nublado que me vestí con un jean y una remera roja y un calzado cómodo porque caminaría mucho.

Nos llevaron a un circuito donde había un gran escenario, fuimos recibidos de la mejor manera ya que todos estaban vestidos de rojo con las banderas del piloto celebrando que había sido campeón, unos jóvenes que se iniciaban en el mundo de las motos fueron visitados por Marc para enseñarle algunos trucos de pilotaje, ellos lo miraban emocionados cuando explicaba, se notaba su admiración, todo termino en un foto grupal bastante grande sin faltar el give me five; luego el español tenía una entrevista pero al parecer quería comer más frutas que charlar.

Para terminar la jornada, Marc terminó subido arriba de un escenario en el circuito al que lo habían invitado, yo me quedé abajo con George frente al mismo con los del público, comenzó a cantar y bailar yo no pude evitar reír aunque a la vez le gritaba como loca como fan mientras miraba por todos lados los celulares que filmaban el acontecimiento claro que yo no tardé en hacer lo mismo, pero menos mal que se había dedicado a ser piloto y no cantante sino seguramente se moriría de hambre, algunas chicas al verme se acercaron a mí para charlar, habían logrado reconocerme por algunas fotografías con Marc, el guardas espaldas me ayudo un poco con el idioma, eran muy ambles que incluso me preguntaron cómo había conseguido a Marc y no faltaron los concejos; cuando terminó me hizo señas para que subiera con él, me puse roja de la vergüenza pero no dude, hizo que saludara a todos mientras me presentaba que todos reaccionaron eufóricos gritando que cantara, me negué muchas veces hasta que lograron que tomara el micrófono, pusieron la canción y con ayuda pude hacerlo, estuvo bastante divertido.