Estúpido amor

2-Porque... te quiero.

En toda lo noche no he podido dormir, por más que intento no dejo de pensar en lo que pasó en la cocina ¿En serio Alex me besó? ¿Está loco? ¿Estaba drogado? ¿Era un clon? Esas son las estúpidas preguntas que me rondaron en la cabeza toda la noche. Porque Alex en todos sus sentidos jamás me hubiera besado ¿verdad? ¿O será que fue mi imaginación? No, eso fue totalmente real, pero ¿Quién besaría a una patética como yo?

Al fin amaneció, y yo no pegue ni un ojo en toda la noche y además me veo más pálida de lo normal, tengo unas ojeras horribles y debo ir al instituto donde emperezará mi tortura, pero nada de eso me preocupa, lo que me tiene realmente nerviosa es verlo ¿Cómo actuo ahora? ¿Me tratará como siempre? ¿Se acordará?... Claro que lo hará, fue anoche, no creo que tenga la memoria de un pez.

Ya estoy lista para bajar a desayunar, pero me da miedo hacerlo, pues Alex estará ahí... 

¿Qué más da?

Entro a la cocina y está solo Lola desayunando. No hay rastro de Alex, por una parte me siento aliviada, pero por otro lado me siento aún más nerviosa porque significa que lo veré en el instituto.

—Oye babosa te ves horrible, incluso peor de lo que mantienes siempre y déjame decirte que es algo que creí casi imposible— dice Lola con cara de asco, sacándome de mis bobos pensamientos.

Solo volteé a mirarla y le sostuve la mirada por unos minutos, sin responderle.

—¡no me mires más con esa cara que podría causarme pesadillas esta noche o dejarme traumatizada de por vida!— Exclamó con su chillona voz y agregó— pareces una asesina serial.

No le hice mas caso y salí de la casa dando un portazo ¿tan fea soy? Ash, me molesta que me trate tan mal, todos lo hacen, pero no les doy tanta importancia como a ella y a Alex porque los tengo que aguantar las veinticuatro horas del día.

Entro al instituto y algunos me miran con asco. Ya estoy acostumbrada a esto.

 "siempre es lo mismo" dice mi subconsciente.

Sigo caminando hasta mi taquilla,  saco los libros necesarios para las siguientes clases, y luego ingreso a mi primera clase, la cual comparto con Lola, -aunque ella sea un año mayor que yo, está repitiendo año, al igual que Alex- me siento en uno de los primeros puestos, me concentro al máximo en la clase y dejo de pensar en él.

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Recién sonó la campana indicando que es hora del receso, el peor momento del día para mi.

Recojo mis libros, salgo del salón de clase y la escena que me encuentro es tal vez la que menos hubiese deseado ver en este momento. Frente a mi está Alex besando a una de la chicas más desagradables del instituto, es la rubia que más ligues tiene y es una de las amigas de Lola, lo cual quiere decir que también me trata como un ser inferior a ella, me trata como la basura y el apodo que me puso es de lo peor "mugre" y si, ella fue la que me envió el mensaje en el que me deseaba la muerte para no tener que verme más.

A lo que estaban haciendo ahí frente a las taquillas no se le podía llamar besarse, sino comerse la boca el uno al otro, parecía que necesitaban un cuarto y lo peor era que él le estaba tocando partes del cuerpo que no se pueden tocar en público. Cuando creí que ya la escena iba pasando a otro nivel, se separaron.

¿Qué más podía esperar? Él es ese chico que siempre me ha hecho sentir inferior a un bote de basura y que disfruta de mi dolor, no sé qué es más patético, que yo haya estado pensando en él todo el día o que me hubiese puesto nerviosa y ansiosa por verlo.

Sentí que mi corazón se rompía en mil pedazos cuando sus ojos se encontraron con los míos y se quedó mirándome fijamente, con sus ojos azules que usualmente están brillosos, pero que ahora están opacos casi grises, con su cabello alborotado y su deslumbrante sonrisa torcida. No aguante más la tortura de verle burlarse de mí y no poder hacer nada. Salí corriendo al baño, entre y caí en llanto ¡soy una boba! ¡de seguro fue una apuesta que perdió y tenía que besarme como consecuencia!