Angels will fly || Ed Sheeran.

Novena Flecha.

Lila's POV

Observaba a una pareja sentada en un café. Después de muchos debates conmigo misma, decidí hacer caso a Cupido por ahora, no había sentido alguno en hacerle enojar cuando fácilmente podía ser evitado. 

En frente mío estaban sentados los jóvenes Camilla Edwards y Jason Peters. Los dos habían crecido juntos y tenían 23 años. Recientemente le había dado a Jason con una de mis flechas y ahora los estaba vigilando, cuidándolos de los ángeles negros; ocasionalmente alguno de ellos aparecía y arruinaban una pareja al dispararles con una flecha de odio provocando que el amor cesara y se despreciaran mutuamente; tomaba meses larguísimos para reparar el daño causado. 

Jason puso su bebida en los labios de Camilla y le permitió tomar de su batido. Ella rió y observo sus ojos verdes. El cariño que irradiaban prácticamente estrujo mis pulmones. Mi pecho se contrajo mientras pensaba en Ed. Lo había visto en ese mismo café miles de veces, pero ahora él no se encontraba allí. Estaba tentada a ir y verlo, pero eso solo empeoraría todo y Cupido se enojaría aun más por romper sus reglas. 

La pareja se levanto, se tomaron de la mano y salieron, dejándome allí sola. Me rodee con mis brazos mientras que un escalofrió recorría mi espalda: eso no era una buena señal.

-Hola Lila- mi cabeza se levanto en shock al escuchar eso. Justo al frente mio se encontraba Payten, un ángel negro.

Payten y yo habíamos crecido juntas en Londres. Cuando eramos pequeñas yo siempre creí que había algo mucho mayor a nosotros, así como me habían enseñado en la iglesia; Payten nunca lo hizo, siempre dijo que eran simples cuentos de fantasías que las madres solían contar a los niños antes de que se durmieran.   

Cuando teníamos 15, Payten fue golpeada con la peste negra mientras que esta se esparcía lentamente por Europa. Tristemente no lo logró, y a causa de su creencias ella fue maldecida para convertirse en un ángel oscuro del diablo. 

Cuando yo morí me convertí en una aprendiz a causa de mi fe en Dios. Así es como se determina si serás un ángel de oscuridad o de luz; tus creencias terrenales. 

Ella sonrió maliciosamente y se sentó a mi lado. Su atuendo consistía en shorts de mezclilla rasgados y un singlet con unos converse negros rasgados. Su cabello estaba pintado de rojo y sujetado en una cola de caballo alta. Sus oscuros ojos verdes traspasaron mi alma y se dirigieron justo a donde estaban mis inseguridades. Cada ojo de un ángel tenía un "estilo", los de ella tenían el estilo de Cleopatra. 

Puede que seamos ángeles opuestos desde distintos campos en el "afterlife" pero de alguna manera conseguimos seguir siendo amigas. Sonreí al ver que su "fachada" se caía y aparecía la Payten real, la amiga que quise tanto de niña. 

-¿Cómo va tu pequeño partido haciendo conciertos- ella susurro, mientras se estiraba en su puesto. 

-Me está volviendo loca- se puso boca abajo y descanso su cabeza en sus manos. 

-Tengo un presentimiento... y creo que voy a disfrutar esta historia- ella podía ser una de mis mejores amigas pero a veces su lado oscuro se dejaba ver. 

Nos sentamos en aquel lugar alrededor de 2 horas mientras que le explicaba que había pasado entre Ed y yo, los sueños, Cupido, y yo finalmente admitiendo mis verdaderos sentimientos. 

-Tengo este cálido sentimiento siempre que pienso en él, le observo o hablo. No lo entiendo pero me agrada. Solo sucede con Ed y no quiero que eso cambie-. 

Payten sonrió picaramente. - Parece que mi pequeña Lila se ha enamorado de un mortal-. suspire y me hundí en el asiento,

-Sin embargo, no me es permitido, y Cupido me mataría!- rodó los ojos.